Historias de Dioses y Mortales

Capitulo 31-Beneficios

Llegando al primer piso, Errante fue directamente hacia la recepcionista quien lo miro con una expresión llena de angustia.

-Hable con el señor paladain y me dijo que sólo aceptaría recontratar a tu hermana si ella y su padre escribían y firman una carta de disculpa por infringir las reglas de la academia y por causarme molestias. 

Yendo directamente al grano, Errante le explicó las condiciones bajo las que su hermana sería perdonada.

Su expresión en un principio fue de felicidad, era natural alegrarse al ver un rayo de esperanza. Por desgracia, su expresión se volvió tensa y nerviosa al ver la mirada seria de Errante, ella en ese instante entendió la dificultad que conllevaría el que su padre y hermana se disculparan, esa podría ser una tarea complicada que realizar.

-Necesito que me dé la ubicación de la vivienda de su familia, de ser posible me gustaría ir ahora mismo y solucionar ya esté asunto. ¿Es posible para mi reunirme con su padre sin organizar una reunión con antelación?.

El silencio de la recepcionista era en parte por la sorpresa que le causaba ver a Errante llevar la situación tan casualmente, él acababa de hablar con la persona que igualaba en importancia al rey. Aún así, ella dejo de lado sus pensamientos y se propuso a pensar en una respuesta rápida.

-En realidad, padre se hizo el patriarca hace no más de tres meses, por lo que ha estado bastante ocupado tratando de aumentar la economía y poder de fuerza de nuestra familia. Será complicado organizar una reunión de inmediato.

Respondiendo de una manera eficiente, la recepcionista declaro la dificultad de llevar a cabo la idea de Errante sobre solucionar rápidamente aquel asunto con su familia. Sin embargo, Errante ante sus palabras, en lugar de demostrar molestia o preocupación, tranquilamente se sacó la mochila de su espalda y retiro un sobre tamaño carta y lo mostró ante ella.

-¿Con esto crees que deje de lado tales asuntos?

La recepcionista mostró confusión al recibir el sobre, pero luego mostro una mirada llena de asombro.
Lo que ella estaba mirando era el sello que tenía el sobre, se trataba de uno que solo manejaba el rey y Dreygon paladain para asuntos de suma importancia. Claramente demostraba las intenciones de Dreygon sobre querer solucionar el problema.

Errante por supuesto, no sabía la importancia del sello, pero intuyo que había una razón por la que Dreygon le entrego una carta para corroborar que él tenía intenciones de recontratar a la hija mayor de la familia cristal rosado. Ese sobre sellado definitivamente tendría algunos cuantos usos útiles.

-P~Por supuesto, si le muestra esta carta sellada a los guardias de la puerta, definitivamente irán a hablar con mi padre para que deje de lado sus asuntos por algunos minutos para recibirlo a usted.

La joven recepcionista estaba teniendo la esperanza remarcada en su rostro, no esperaba para nada que las cosas terminaran resultando más sencillas, ni su padre se atrevería a ignorar un asunto considerado de suma importancia por el señor paladain.

-Ya veo, por favor, deme la dirección.

Remarcando que quería solucionar todo ahora, Errante pidió nuevamente la dirección de la familia cristal rosado.

-Caminando cinco cuadras hacia la izquierda de la academia, podrá llegar a una mansión, esa es la residencia de nuestra familia.

Apuntando hacia su izquierda, la recepcionista brindo la dirección de su casa que aparentemente es una mansión.

-Entiendo. Antes de irme, me gustaría preguntarle cuando inician las clases de la academia.

En lugar de irse sin más, Errante pregunto algo que quería saber cuando llego a la academia, que era el horario de las clases.

-Las clases empezarán en tres días a las nueve de la mañana.

-Entiendo, nos vemos.

Recibiendo el horario, ya no había nada más que hacer en este lugar, Errante calmadamente se retiró.

(¿Quien será él como para hacer que el señor paladain use aquel sello? Quizás decidió tomarlo como su discípulo)

Al mirar la espalda de Errante, la recepcionista comenzó a pensar sobre la importancia de aquel joven que provocó que Dreygon paladain decidiera tomar este asunto con su hermana como uno de gran importancia.


(A qué lugar debería de ir a entrenar, talvez podría regresar al bosque al que fui con Nio. Tendré que comprar un arma para asegurarme de que no me maten esos Espectros que habitan ahí)

Pensando sobre a que lugar ir para su entrenamiento, Errante caminaba mirando los alrededores tratando de visualizar alguna tienda de armas. Desgraciadamente, no logro ver ninguna en el camino hacia la mansión.


-Disculpe, vengo de parte del señor paladain para reunirme con el patriarca y entregarle esto.

Delante de dos guardias que custodiaban un portón de unos cuatro metros, Errante les hablo mientras les mostraba el sobre con el sello.
Al momento de mirarlo, los guardias abrieron sus ojos sorprendidos, era de esperarse su sorpresa.

-P~Por favor acompañemos, le guiaremos hacia el patriarca.

Uno de los guardias hablo nerviosamente mientras el otro se encargó de abrir el portón.
Errante calmadamente les siguió el paso hasta la entrada de la mansión. La lejanía entre el portón y la mansión era bastante considerable, Errante estaba un poco confundido al respecto.

(Si una familia de bajo rango tiene todo este terreno para ellos, ¿Qué clase de lugares habitan los de más altos rangos? Bueno, quizás en realidad esta familia adquirió este terreno cuando estaban más altos en los rangos. No sirve de nada pensar en todo eso, más tarde podrá averiguarlo)

Pensando sobre el territorio que observaba, Errante trataba de hacerse una idea de las adquisiciones que poseían aquellos llamados nobles, pero debido a diversas razones por las que unos de bajo rango podrían tener tanto territorio, Errante decidió simplemente dejar ahí el tema.

Al entrar, habían sirvientas y algunas personas vestidas elegantemente caminando por los alrededores. Naturalmente, la gran mayoría de ellos desvió sus miradas a Errante y a los guardias que le acompañaban.

Por suerte, nadie decidió interrumpirlos en su camino hacia una oficina en el segundo piso. Pero Errante pudo notar algo, las miradas de algunos nobles guardaban molestia y un cierto desprecio hacia él. La razón era simple, la hermana mayor que fue despedida por su culpa era popular en su familia, era natural que los miembros de la familia cristal rosado guardaran tales sentimientos.


-Señor patriarca, tenemos un invitado con un mensaje del honorable señor paladain.

Tras golpear la puerta, inmediatamente el guardia anuncio el motivo de su presencia, a pesar de que aún nadie habría la puerta.

Rápidamente, la puerta se abrió de manera agresiva.

-¡¿Un mensaje del gran señor paladain?!

Con euforia en su rostro, un hombre de unos cuarenta años de aspecto cuidado pero cansado, hablo con entusiasmo al ver al guardia. Sin embargo, todo su fervor disminuyó al ver a Errante.

-…Pueden retirarse, por favor pasa.

Perdiendo todo su interés en el asunto, el hombre les ordeno a los guardias que se fueran e invito a Errante a pasar, la expresión del hombre al hablarle a Errante era amarga, pero Errante no se sintió incomodo, el hombre a pesar de su mirada y tono de voz, parecía mas educado de lo que había escuchado, pues el de inmediato le hizo pasar de manera respetuosa, no lo atendió fuera de su oficina. Para Errante, eso era un punto a considerar.

Errante en completo silencio, siguió al hombre dentro de la oficina.

El lugar estaba repleto de papeles y Libros apilados por doquier, solo el camino desde la puerta hacia un escritorio estaba despejado.

(Parece que de verdad esta tratando de aumentar su estatus)

Errante al notar toda esa cantidad de papeles y libros que decían a gritos ser documentos importantes, pudo confirmar la información dada por la segunda hija del hombre.

El hombre camino en silencio hasta el escritorio, sin ninguna palabra, él se sentó en una silla detrás del escritorio y miro a Errante con una expresión realmente molesta y sería.

-¿Acaso has venido a humillar a mi familia más de lo que ya lo has hecho?

El hombre fue directo al punto de su molestia, claramente en su mente la presencia de Errante dictaba que él quería una disculpa. Por supuesto que sería algo humillante para él tener que bajar su cabeza ante un extranjero sin ningún respaldo familiar, Errante en su punto actual incluso podría ser considerado de un rango más bajo que un plebeyo.