Capitulo 32-La primera habilidad dominada

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(Al final todo resultó más sencillo y rápido de lo que esperaba, talvez deba dar unas vueltas por la ciudad y buscar una tienda de armas, o podría ir a pedirle una recomendación al señor Fallgaris, él tenía armas y cosas del estilo así que debería de conocer unos cuantos lugares)

Caminando desde la puerta de la mansión hacia el portón, Errante pensaba satisfecho sobre el tiempo que le tomo solucionar el problema. Con el tiempo que pudo ahorrarse, pensó en los preparativos que quería hacer antes de ir nuevamente al bosque.

La razón por la que sólo tenía intenciones de ir a la tienda de Fallgaris por recomendaciones de otras tiendas con armas y armaduras en lugar de comprarlas ahí era simple; sus armamentos eran normales, si, eran de una calidad impresionante, pero lo que Errante buscaba era otro tipo de calidad, la cual no estaba en su tienda.

Al acercarse al portón y ser visto por los guardias, ellos lo abrieron  inmediatamente, Errante hizo un pequeño agradecimiento hacia los guardias al salir.

Decidiendo ir a preguntarle a Fallgaris por una recomendación, Errante camino hacia la tienda sin ninguna desviación.

(¿Está cerrado?)

Errante al llegar a la tienda, observo como un pequeño cartel de madera estaba colgado en la puerta, las letras del cartel exclamaban las palabras “Cerrado” su pregunta recaía en las dudas de por qué estaba cerrada la tienda.

(Talvez está ocupado confeccionando productos con la piel del Espectro. Me sentiría mal si lo interrumpo sólo para preguntarle por otra tienda…. Mis opciones son explorar la ciudad o ir a la tienda del enano. Aunque en su tienda no parecía haber nada de una buena calidad, Incluso los objetos de Fallgaris parecían mejores. Quiero saber de las mejores armas y armaduras para entender más sobre los objetos que existen en este reino, si crean cosas mediante habilidades mágicas o algo parecido, o si solo se limitan a crear artículos mediante los minerales, como la piedra de moler o el cincel que están hechos de Grenmilaquita… Ahora que lo pienso, si voy al bosque, debería de comprar un cuchillo de Grenmilaquita como el que tenía Nio, sino lo hago, en el momento en el que vuelva a matar a un Espectro: Devorador de piel, no podré recolectar su piel y  eso sería un desperdicio de recursos, no estoy seguro si comprar un cincel ya que solo quiero ir para entrenar, supongo que lo pensaré si es que me encuentro con uno a la venta en la misma tienda en la que vendan el cuchillo. También me gustaría saber más sobre la mochila que me regalo Guen… Ya me decidí, daré vueltas por la ciudad buscando todos los objetos que necesito para ir bien preparado al bosque, y de paso aprenderé más sobre el nivel de artículos que existen en este Reino)


Pensando detenidamente sobre que hacer, Errante termino por escoger la opción más viable, que era buscar diferentes tiendas con los mejores armamentos y herramientas, así podría ampliar sus conocimientos y de paso prepararse adecuadamente para volver al bosque.

El sol rebosaba de energía, las nubes que adornaban el cielo ayudaban a que se creara un clima más que agradable. La vida alegre se manifestaba en los rostros de todos los que caminaban por las calles.
Al parecer, el problema de racismo que Errante había presenciado era un problema interno en el reino, pues en las calles se podía ver como los humanos y semi-humanos convivían de manera normal, incluso se podían ver algunas parejas y familias que paseaban alegremente.

(Se siente cómo haber encontrado un cadáver enterrado en un bello jardín)


Errante al presenciar a las felices personas, se decía a si mismo esas palabras al pensar sobre lo desagradable que se sentía saber que un reino que parecía tan pacífico y armonioso, tuviera en sus sombras personas racistas.

(Aún así, como pensaba, la mayoría de semi-humanos que veo son los que pueden ser catalogados como hombres bestia, la única raza diferente que he visto han sido unos cuantos enanos, no he podido ver ninguna otra raza como las que presencie adelante de la academia. Quizás el racismo este más centrado en ellos. Ah, esa tienda parece bastante lujosa, iré a echar un vistazo)


Teniendo en cuenta a las personas que vio, Errante afirmó lo que había pensado en el último piso de la academia; en la ciudad de semi-humanos en su gran mayoría , solo habían hombres bestias. Esa conclusión le hizo pensar que era posible que en realidad el racismo estaba centrado en las otras razas. Aunque por supuesto, el racismo que presenció hasta ahora parecía ir de un lado a otro entre todas las razas, era un tema complejo y molesto de pensar, pero para Errante no era más que algo a tener en consideración para posibles situaciones futuras, por eso pudo dejar de lado el tema de manera rápida apenas encontró un indicio de su objetivo principal.

Frente a él, una edificación que estaba entre las que le rodeaban llamo su atención, se trataba de una construcción de dos pisos hecha de una madera que tenía un aire de haber sido cuidadosamente seleccionada, la tienda tenia en ambos lados de la puerta, unas vitrinas que dejaban a la vista algunos de los objetivos a comprar que Errante tenía en mente.

Al acercarse a observar dichos objetos, Errante pudo notar como unas dagas y espadas estaban puestas cuidadosamente junto a sus precios, Errante miro tanto los precios como los objetos.

(A simple vista parecen ser armas normales con diseños llamativos, pero si las miro detenidamente, tienen cierto brillo pulcro que demuestra una calidad impresionante por muy sobre las que tenía Fallgaris, y tienen algunos diseños que tienen un aire a runas mágicas, por desgracia no puedo leerlas. No puedo sentir ningún aura proveniente de ninguna arma, pero eso puede que sea obra del cristal, nada me ayuda a afirmar o descartar que sean runas con finés mágicos, sin embargo parece ser algo bastante posible. Además, el precio que tienen es bastante alto incluso comparándolo con las pociones y elíxires que puedo hacer. Aunque puedo comprarlas, pero será mejor que averigüe bien su calidad antes de hacerlo, ¿Debería entrar?)

Errante tenía la mirada puesta en las armas y en sus precios, sus pensamientos variaban entre la opción de comprar algo o solo analizarlo detenidamente para compararlo con otras armas más adelante. Su decisión sería tomada dependiendo de la información que obtenga al entrar a la tienda.
En su mayor parte, las runas talladas en las armas eran lo que más capto la atención de Errante, él quería saber que decían y para que servían, ¿diseño? ¿las insignias del herrero? Errante descarto ambas cosas, se veían demasiado elaboradas y misteriosas para ser simples cosas como esas. Sin embargo, Errante no tenía en mente usar el [Regalo de los dioses] Para empezar, Errante no tenía idea de como usarlo, pero simplemente no tenía planeado usar nada de eso ahora, por lo que no pudo confirmar por sus propias conclusiones el verdadero fin de esas runas en las armas.

-Quieres quitarte, estoy tratando de mirar.

Antes de que Errante pudiera tomar una decisión, una voz llena de una soberbia irritante se escucho desde su espalda. Errante con su mirada aburrida, miro hacia atrás buscando el origen de esa voz molesta.
Se trataba de un joven humano de unos catorce años, su pelo era de color azabache oscuro, estaba cortado elegantemente y le daba un aura sofisticado, dejando de lado su expresión de desagrado hacia Errante, el joven en términos generales se podría considerar dotado de un gran atractivo que bien podría significar la razón de que lo acompañaran dos hermosas chicas, pero Errante descarto la posibilidad de que fueran sus admiradoras o parejas de un solo vistazo, las jóvenes parecían estar evitando mirar al chico y a él, los más seguro era que ellas simplemente fueran subordinadas o familiares que lo acompañaban. Lo más posible era que fueran familiares debido a que los tres tenían ropas lujosas y apariencias destacables por encima del promedio que Errante había establecido en su mente al ver a las personas de la ciudad.


-Lo siento.

Errante respondió de manera despreocupada y sin emoción alguna, no se dejó perturbar ni por un milisegundo. Acababa de salir de un problema que él en cierta parte provocó debido a su comportamiento hostil de antes, Errante ya había aprendido la lección y decidió no volver a dejar que sus emociones lo controlarán. Actuar de manera desinteresada y eludir el problema era la opción correcta, no era el momento para andar corrigiendo la actitud de todo noble con el que se cruzara. Sin mencionar que aquel joven obviamente buscaba empezar una discusión con Errante, puesto que había otra vitrina la cual Errante no tapaba en lo absoluto.

Rápidamente, Errante decidió irse a buscar otra tienda, seria realmente incómodo que ese tipo lo siguiera a dentro de la tienda para tratar de fastidiarlo.

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