Me encontraba en una de las habitaciones tratando de ponerme el neopreno, llevaba un buen rato batallando para subir la cremallera cuando escuché a alguien entrar a la habitación y soltar un quejido.
—Puedes tocar a la próxima Bogotá —hablé de espaldas halando con todas mis fuerzas la cremallera del traje.
—No sabía que había alguien aquí —respondió en tono inocente—. Pero no me molesta lo que veo —Se acercó a pasos lentos hasta pararse frente a mí y subir la cremallera del neopreno con facilidad.
—Te equivocas conmigo, amor —Estiré mi mano para acariciar su barba con la yema de mis dedos—. Ahora a trabajar que para eso estamos aquí —Palmeé su pecho antes de salir de la habitación.
—Que llevo un montón de tiempo intentando ocultar lo que tenemos pero ya no puedo —Se quejó tratando de seguirme el paso.
—Ya hemos hablado de esto cientos de veces —murmuré cuando sentí que él caminaba a mi lado—. Pero si de verdad quieres hacerlo...
—No quiero presionarte —Bogotá me interrumpió parando su caminar.
—Se lo contamos a todos después de que terminemos de hacer esto —Me detuve frente a él para mirarlo con una sonrisa en mi rostro—. ¿Te parece bien? —pregunté acercándome hasta rodear su cuello.
—Si eso significa poder besarte frente a todos entonces si —Me rodeó la cintura con una de sus manos mientras la otra descansaba en mi mejilla, sin esperarlo juntó nuestros labios en un beso dulce y calmado.
—Por mucho que me guste esto creo que tenemos cosas que hacer—Dejé un último beso en su mejilla antes de separarme completamente de él.
Sin esperar su respuesta caminé a toda velocidad para encontrarme a Nairobi y Denver encima del tanque en el cual íbamos a practicar, pocos segundos después llegó Bogotá, quien me ayudo a subir sobre el tanque al ver que se me dificultaba debido a mi corta estatura.
—Bueno, tú vas primero —Bogotá señaló a Denver mientras todos veíamos el orificio en la parte superior del tanque.
—Que no, que yo ahí no entro ni de coña, vamos —Denver se negó de inmediato.
—Coge la botella —Bogotá contestó con simpleza.
—Que es una puta ratonera, que de ahí no salimos —Denver se agachó para ver de cerca el agua que había dentro.
—Salimos por donde vamos a entrar, y a pulso —Bogotá siguió hablando sin darle mayor importancia.
—¿A qué mierda huele esto? —El chico preguntó en mi dirección.
—Pues a lo que acabas de decir, a mierda —contesté ganándome una mala mirada de Bogotá y una carcajada de Nairobi.
—Pero si a esto le habrán echado ahí pesticida, lejía y cosas tóxicas para el ser humano, que no entro yo ahí, no —Denver negó por milésima vez al escuchar mi respuesta.
—Que es agua —Nairobi se burló.
—Agua oxigenada —Denver respondió sin siquiera pensarlo.
—Agua de cañería —contesté yo al mismo tiempo, Denver levantó la mirada para reír junto a mi logrando que Bogotá rodara los ojos.
—Siéntate anda —Bogotá le ordenó.
—Yo me siento, pero yo ahí no entro, vamos —Denver dio por finalizada la conversación por lo que todos nos sentamos sobre el tanque sin ganas de entrenar.
Denver se sentó en el frente con Bogotá a su lado, Nairobi los imitó sentándose en uno de los lados del tanque mientras que yo me ubiqué sobre el orificio por donde debíamos entrar, dejando mis pies descolgados en el aire.
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La Casa de Papel - One Shots
FanfictionPequeñas historias con tus personajes favoritos de la casa de papel. Encontraras historias tanto de algunas escenas de la serie como algunas inventadas por mi.