Destellos [USA x Rusia]

26.

—Pimpón es un muñeco~.

USA seguía tecleando en su celular, sin fijarse en su alrededor.

—Muy guapo —sonrió—. Cómo yo —le guiñó al espejo.

Rusia sólo sintió pena ajena.

—Y de cartón~ —continuó su travesía por la sala—. Se lava la carita~ con agua y con jabón~

Rusia volvió a suspirar.

—¿Sabes que estoy aquí?

USA solo pegó un gritito antes de soltar su celular y caer al suelo. Bueno. Eso le respondió la pregunta al ruso.

—¡¿Qué haces aquí?!

—Tú hermano me citó.

—¡¿Estás saliendo con mi hermano?!

—No.

—Entonces por qué...

—Él va a salir con Ucrania. Y me pidió de favor que fuera tu niñera —sonrió divertido.

—¿Qué?

—Dijo que la última vez que te quedaste sólo, incendiaste la cocina.

—¡Sólo fue una vez! Además, ¿por qué aceptaste tan tonta petición?

—Para darte unas nalgadas si te portas mal.

—¿Qué?

—Hum... ¿Lo dije en voz alta?

—Hum... ¡Canadá! —llamó al culpable—. ¿Por qué el comunista raro está en nuestra sala? —obvio no iba a aceptar esa estupidez—. ¡No voy a quedarme con él a solas! ¡Es como un acosador!

—Creí que te gustaba —comentó Canadá desde las escaleras.

—Me gustan las papas fritas. Me gusta el helado de vainilla. ¡Este tipo definitivamente no me gusta!

—Pero tú si a él —comentó Ucrania entre risitas.

—¿Esto es una broma punk?

Pero no. Esos dos de verdad lo iban a dejar con el eslavo de niñera.