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Se puso las medias de red color rosa que destacaba sobre su piel blanquecina en la mayor parte, se colocó los ligueros a juego que le regaló Canadá, y su atuendo estaba completo.

—Wow... de verdad me veo bien.

Su falda plisada, su top lleno de brillos y encajes, sus hombros descubiertos y bonitos, adoraba su clavícula adornada por un collar de plata y su cabello de lado.

—¡Canadá! ¡Tenías razón! —rio bajito mientras salía del cuarto—. ¡Me veo bien con eso que llamas... "baby look"! ¿Dónde carajo estás?

Bajó al primer piso un poco fastidiado porque se suponía que Canadá iba a estar cerca para no perder tiempo. Pero al estar en la sala supo por qué. Y bufó.

—Ame, ¡te ves muy bien!

—¡Lo sé! —sonrió hacia Canadá y después hizo una mueca—. ¿Y tú qué haces aquí, comunista?

Rusia estaba en shock, era obvio, hasta había derramado la bebida que le dieron como bienvenida. Y si bien logró controlar un poco su rostro para no enrojecer, no pudo dejar de mirar a USA.

—Rusia está aquí por un negocio... Bueno, en realidad vino porque Ucry no pudo venir... Pero la cosa es que...

—No me importa —USA chasqueó los dedos—. Toma tu cámara, Canadá. Vamos a hacer la sesión ahora porque después no habrá tiempo —sonrió—. ¡Vamos!

—Bueno... —Canadá miró a Rusia—, ¿puedes esperar un rato? —pero no le contestaron—. ¿Rusia?

—O esperas o ayudas —USA se encaminó al segundo piso—. ¡Decide comunista!... Vámonos, Cany.

—¡Sí! —sonrió—. Estás en tu casa, Rusia —le dio un golpecito en el brazo—. Estaremos en el segundo cuarto a la derecha... O si quieres, por allá está la cocina y el mini bar.

Pero Rusia siguió sin decir palabra... aun no lograba procesar lo que vio.

Destellos [USA x Rusia]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora