Capítulo 7

397 26 2
                                    

Ya habían pasado varias semanas desde aquel día. No había vuelto a hablar con la entrenadora ni con el resto de mis compañeras, que supongo, habrían vuelto a su país.

Con los chicos del club las cosas estaban... bueno estaban que ya es mucho decir. Silvia, Celia y Cami fueron las únicas que se atrevieron a hablar conmigo del tema, y me pidieron perdón como mil veces. Sobre todo, Celia disculpando el comportamiento de su hermano. La verdad es que me daban igual todos, el hecho de que ellas me pidiesen perdón solo hizo que mi corazón se ablandeciera un poco, pero seguía muy triste y enfadada.

Pasaron los días y las semanas y con ello llegamos a una semana antes de las vacaciones de verano. Mis exámenes habían ido muy bien y me encontraba con las chicas en la cafetería planeando la fiesta de fin de curso. Un baile queríamos hacer para despedir el "maravilloso" año.

- ¿Tú qué crees Aria?, de disfraces de la edad media o de fantasía –me hablo Silvia, aunque llevaba perdida en la conversación demasiado tiempo.

-Perdona Silvia, pero no te estaba escuchando

-Llevas toda la semana igual Aria, no entiendo dónde tienes la cabeza... -Me recrimina Nelly.

Si ellas supieran que esta iba a ser la última semana que me vieran antes de irme al internado no estarían tan centradas como me obligan a estar.

-Nada, sólo pensando en que ponerme para el baile –y sonrío amablemente.

-Bueno, pero antes tendremos que saber de qué hacemos la fiesta. Edad media o fantasía... -suspira Celia algo derrotada.

-Yo creo que de Edad Media estará bien –no pienso ponerme un disfraz de princesita, me niego.

Gracias al cielo todas estuvieron de acuerdo y yo le mandé un mensaje a mi madre con la idea de lo que quería en mente.

Ella se empeñó en que me diseñaran el disfraz a medida porque querían que todos me vieran como, y cito textualmente, la reina más hermosa del universo. Cómo se nota que mi madre sólo conoce a la niña que ella quiso que fuera y no a la que soy realmente.

Comenzamos con los preparativos, Sara y yo nos encargaríamos de pedir por internet los adornos que irían colgados en las paredes, Celia se encargaría del catering, Cami y Silvia de las mesas y de las sillas y Nelly contrataría al Dj y supervisaría todo como la presidenta del consejo que es.

Era divertido pasar las horas con las chicas a solas, hablando un poco de todo y preparando las cosas para la fiesta.

Estábamos colgando los adornos en las paredes cuando la silla en la que estaba subida comenzó a tambalearse, ya me veía en el suelo cuando unas manos me agarraron por la cintura y me dejaron lentamente en el suelo.

Me di la vuelta para encontrarme con mi rescatador y me encuentro unas gafas que escondían unos ojos preciosos detrás.

-Cuidado Aria, has estado a punto de caerte.

-No te preocupes por mí, estoy bien. –le digo, con un doble sentido que dudo que se lo esperara de mí.

Me puso una cara muy rara y se giró para volver con los demás del equipo que habían entrado a ayudar con los adornos. Me acerco a la caja para coger unos banderines cuando Caleb se agacha a la misma vez.

-Quiero hablar contigo, ¿podemos quedar más tarde?

-No sé por qué debería de quedar contigo después de todo.

-Solo quiero saber una cosa y no creo que sea el mejor momento para hacerlo, tú decides.

Me quedo callada procesando sus palabras, que querrá ahora de mí después de todos los insultos y las cosas. Iba a contestarle cuando vuelve a abrir la boca.

Equipo Luz de Luna (Inazuma Eleven)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora