Equipo Luz de Luna (Inazuma Eleven)

Capítulo 11

Narrador omnisciente

- Es así que presento a mi equipo. –Dijo la entrenadora.

Hubo una pausa dramática entre todos los presentes cuando una fila de chicas con la misma vestimenta entró en fila, al mismo paso y con una mirada en alto seria al escenario.

Aria era la última de ellas en la fila. Ella tenía la mirada al suelo, pero se podía distinguir una sonrisa casi burlona en su rostro. Cuando todas las chicas se detuvieron, Aria ando por delante de todas y se posicionó a la derecha de la entrenadora, con una sonrisa segura, ahora sí mirando al frente.

Todos los chicos del Inazuma Japón palidecieron, al igual que todos los presentes, sentían un sudor frío por todo el cuerpo. El equipo tenía una presencia imponente nada más pisar el escenario. Nadie movía un hueso, apenas respiraban.

Jude se sentía confundido, la chica que estaba al lado de la entrenadora se veía parecida a Aria, pero su mirada, su sonrisa, nada de eso era de la dulce Aria que desapareció de sus vidas un año antes. Miro un poco a la derecha de las chicas y pudo ver a una chica idéntica a Sara, pero ésta tenía el pelo plateado y el semblante serio.

Su mente fría y calculadora no llegaba a entender que podía estar pasando allí, necesitaba datos e información de las jugadoras. Sería posible que fueran ellas, y en ese caso, que pintaban ellas que no habían jugado nunca a ningún deporte ahí metidas.

Mientras que Jude le daba vueltas a la cabeza, un poco más a la derecha Caleb juntaba algunas piezas más que el anterior, y la miraba fijamente a los ojos. Él sabía de la tapadera de las primas cuando estudiaban en el Raimon, por lo que no le extrañaría que esa fuera su forma de ser verdadera, pero si ellas sabían jugar al fútbol y al parecer bastante bien, por qué hasta ahora no habían aparecido en el terreno y se habían limitado a ser simples gerentes...

Las caras de los jugadores del Raimon pasaban desde algo de ilusión como tenía Mark a miedo incontrolable de Jack. Axel se encontraba en shock, él había reconocido a las primas también a pesar del cambio de look, pero su presencia era diferente. Parecían más salvajes, poderosas, no sabría muy bien como describirlo.

Lo único que tenían en claro todos los jugadores era que tenían que tener cuidado, ese equipo podía ser muy peligroso.

En la otra punta de la sala, un chico miraba con los ojos asombrados a la chica de los cascos rojos en la cabeza. Sabía desde el día que la conoció que tenía algo especial, además de la forma que tuvieron de conocerse ya de por sí fue única. Sabía que la volvería a ver, pero no se lo esperaba tan pronto.

El chico afina un poco la mirada y llega a ver un pequeño anillo de plata en el dedo de la chica y ahí lo confirma. De repente cambian sus prioridades. Le sigue importando el torneo, pero se propone descifrar a esa chica que resulta ser como un cubo de rubik.

Pero no sólo estaban confundidos éstos jugadores, las demás selecciones miraban a cada chica que formaba el equipo y cada uno distinguía a alguna compañera antigua del equipo. Todas ellas abandonaron sus equipos hace un año, y ahora están ahí.

La entrenadora se permitió varios minutos admirando la confusión de las personas, mientras ni una sola jugadora movió un solo dedo. Tras la pausa prosiguió.

-Ella es Aria, capitana del equipo Luz de Luna. –Aria se mantuvo en la misma posición. Mientras la entrenadora comenzó a dar vueltas alrededor de ella. –si os fijáis, lleva unos cascos que la mantienen en conexión conmigo durante todo el día. Por favor, pediría a los capitanes de cada equipo que se acerquen a aquella mesa –dijo indicando una mesa al fondo de la sala. –y cojan los cascos que les correspondan, éstos no deberán de ser quitados a menos que el entrenador lo ordene. Así nunca se perderá el contacto con el equipo.

Esperó durante unos minutos para que los 7 capitanes se colocaran sus cascos, cada uno de un color diferente.

-Para daros las gracias por haber accedido a participar en el torneo quiero daros un regalo, -comenzó diciendo la entrenadora- daré la oportunidad a cada uno de los equipos a escoger a una de mis jugadoras a través de los nombres que les he enviado a los entrenadores, y ella los guiará a un campo y les enseñará un poco de su fuerza. Escoged bien. Sólo un equipo por jugadora. Podéis debatir antes. –finalizó la entrenadora.

Los equipos debatían que jugadora sería la más indicada, escoger a Blanca, la portera española sería un buen punto ya que podrían medir la fuerza de su portera, pero sonaba más tentador averiguar la fuerza que tenía su capitana, Aria.

Entre Inazuma Japón se debatían entre Aria y Sara, aunque ninguno de ellos pensaba en la situación ya que se encontraban en shock.

El caso contrario era el de la selección italiana que tenía como estrategia escoger a la capitana y medirla tanto física como psicológicamente. Ellos no dudaron.

Cuando la elección de los equipos llegó a la entrenadora esta soltó una breve carcajada.

-Al parecer nuestra capitana es muy popular, ya que todos los equipos la escogieron a ella. Pero eso no es posible, por lo que le dejaremos a ella la elección. Aria adelante.

Ésta no abrió la boca durante el proceso, sabía que esa situación era posible, es más Sara le advirtió que esa sería la estrategia más inteligente, que todos la escogieran ella. Es por eso que se había debatido entre dos equipos. Y finalmente se decantó por uno.

-Aria a escogido al Inazuma eleven, ella os mostrará su fuerza, enhorabuena.

Lo mismo ocurrió con Blanca, todos querían medirse con la portera, y ésta sorprendentemente escogió a los chicos del desierto, a pesar de que sus antiguos compañeros la querían escoger.

Sara acabo con la selección española, Olga con la rusa, Caroline acabó en la selección francesa, Kiara que era la estratega del equipo, acabó con la selección Italiana y por último Cleo acabó con los caballeros de la reina.

Tras esta elección las jugadoras como máquinas se dispusieron a bajar del escenario, pero Aria se giró hacia ellas y les quitó por un segundo algo de oxígeno para que no se movieran más. Estas giraron para ver a su capitana y volvieron a su lugar de origen.

Los presentes estaban asombrados, como Aria podía mandarles a todas sin abrir la boca. Simplemente con una mirada todas sabían que hacer.

-Para terminar, sólo quiero decir que ellas les guiarán a los distintos campos de los que dispone este lugar. No intenten hablar con ellas, tienen órdenes de no hacerlo. Si después de ver una prueba de su fuerza los capitanes solicitan tiempo de entrenamiento, se les será concedido un mes en los que se les proporcionará un lugar donde dormir y comida a todos los miembros de los equipos. Si no consideran oportuno entrenar más, el torneo podrá empezar mañana. Espero que disfruten de la demostración.

Tras esto todos se quedaron en silencio, estaban esperando a que las jugadoras decidieran moverse, pero a qué estaban esperando. Ninguna se movía. Todo cambió cuando Aria se giró hacia el resto y les asintió con la cabeza en señal de aceptación. Ahí todas bajaron del escenario y se acercaron a los equipos que les habían sido asignados y los fueron guiando por los pasillos de aquel edificio. La última en moverse de su lugar fue Aria, tras supervisar que todas sus compañeras estaban seguras.En vez de coger las escaleras por dónde habían bajado todas, ella saltó del escenario, quedando en frente del equipo. Su mirada era seria y pasaba por cada uno de sus antiguos amigos. Antes de que ninguno pudiera decir una palabra se giró y con una señal con la mano hizo que los chicos la siguieran por un pasillo.

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-Z