Equipo Luz de Luna (Inazuma Eleven)

Capítulo 48

A paso lento me dirigí hacia el banquillo con toda la confianza renovada. Por fin podríamos jugar libres y ahora nadie nos pararía.

Al llegar disfrute durante varios segundos de la cara de confusión que tenían todas. Después comencé a hablar.

-He encontrado la solución. -anuncié con una gran sonrisa y pude ver la cara de alivio de todas las chicas. -Tenéis que mirar a través del telón, no os centréis en lo que vuestra mirada os muestra, mirad más allá. -termino de explicar con pasión.

La cara de las chicas era bastante graciosa, no me habían entendido nada, pero no sabía cómo explicarlo.

-Chicas centraos, seguro que estos últimos días habéis estado viendo cosas que os han molestado, cosas que os han dolido lo suficiente como para no dejaros enfocarnos en lo que realmente es importante. Mirad a vuestro alrededor y abrid los ojos a la verdad.

Lo siguiente que vi fue a todas las chicas mirad alrededor con los ojos entrecerrados. Eran bastante graciosas. Pero sabía que eso no funcionaría. Me acerqué a Sara, primero la ayudaría a ella.

-Sara, mira a Axel. -le dije y ésta desvío su mirada hacia él. -¿Qué está haciendo?

-Está hablando con la graciosa de Mel, y bastante más cerca de lo que debería. -dijo con la voz triste.

Ahora dirigí mi mirada y pude ver que Mel estaba sentada entre Scotty y Hurley. Y Axel estaba hablando con Caleb. Nada de lo que estaba viendo era real.

-Sara, Axel no está ahí sentado. Fíjate mejor.

Pude ver, orgullosa, como Sara abría los ojos más de la cuenta y sabía que ya se había dado cuenta de la verdad.

-Tienes que mirar a través. Ahora ayúdame con las demás.

Poco a poco todas lograron romper aquello que no permitía a las chicas concentrarse, aunque no sabía de qué clase de truco se trataba. ¿Control mental?

Las caras de las chicas albergaban rabia contenida. Normal, no sé qué habrían visto pero sin saberlo, se perfectamente lo que habían sentido.

-Tenéis que fingir ahora. -habló la entrenadora. -dejad que canse su fuerza, pero atacad, quiero que en menos de 10 minutos ese marcador esté a nuestro favor.

Con esto ella se sentó, y salimos a correr para calentar. Lo bueno que tenemos es que estamos llenas de energía y podríamos explotar todo lo que quedaba de tiempo.

Por fin podía notar el alma de todas como una sola, todas ansiosas en un barullo que gritaba por ser usadas.

Nuestras almas ahora se asemejaban a un animal enjaulado, deseoso de libertad y de destrozar a su raptor. Cualquier persona podría notar que ya no éramos las mismas. Nuestras carreras estaban sincronizadas, y nuestros corazones latían como uno solo. Furioso y rebelde.

Nos colocamos con bastante tiempo en nuestras posiciones y esperamos pacientes a que el árbitro saliera del vestuario y el otro equipo volviera a pisar el campo. Ahora me sentía más poderosa que nunca, en el centro del campo y escuchando distintos cánticos.

No pude evitar que una sonrisa felina adornara mi cara, casi relamiéndome los labios ante lo que se venía.

Por fin salieron los chicos, semblante sonriente, tenían la victoria demasiado asimilada, pero no van a salir campeones por cantar victoria antes de tiempo. Y esa era una lección que les íbamos a enseñar en breve.

- Dije enserio lo del pelo nena, no hace falta que seas tan borde conmigo. -me dijo Luse acercándose a mí en señal de paz.

-¿Te han mandado a ti a calmarme o cómo? -pregunto sarcástica. -puedo oler el miedo desde aquí.