Equipo Luz de Luna (Inazuma Eleven)

Capítulo 21

Miro el reloj que hay en la cocina y veo que faltan tan sólo 2 minutos para que empiece. Debo aligerar. Con paso rápido me acerco al edificio dónde se quedan los entrenadores. Y llego justo a tiempo para entrar en la reunión nada más comenzar.

-Aria, que haces aquí. –me pregunta la entrenadora un poco sorprendida.

-Como capitana de Luz de Luna, vengo a representar a mi equipo. –le digo muy obvia.

-Después de pasar dos días desmayada, no la dejará, ¿no? Entrenadora Katerina. –le dice el entrenador del Inazuma.

Me fijo a su lado y veo a un Mark algo pensativo, mirándome muy fijamente. Paolo, me mira con cara acusatoria. Me pasé con él, pero es mejor así. Cambio mi mirada hacia la entrenadora y la miro segura. Ella me entiende.

-Mi jugadora se encuentra en perfecto estado, entrenador travis. Y ahora que estamos todos podemos comenzar con la reunión.

Terminó la reunión. Para mí había sido un poco incómoda ya que los chicos no me quitaban la vista de encima. No sé exactamente que pretendían, pero eso sólo hizo que me enfureciera y manipulara el aire a mi antojo para que sintieran temor. No puedo permitir que dejen de temerme. Quedamos vistas las fechas para los partidos, los estadios en los que se realizarían, las entradas y las nuevas equipaciones.

-Aria, quédate unos minutos ahora, por favor. –me dijo la entrenadora, lo cual era una orden en cubierta.

-Claro.

Una vez que la sala quedó vacía me hizo sentarme y comenzó a hablar.

-Primero, ¿Cómo te encuentras? –me sorprendió ya que casi nunca me preguntaba por mí.

-Bastante mejor, tuve que gastar un montón de energía para no hacerle daño a nadie y por eso acabé desmayada.

-Losé, pero, ¿y tú collar?, tú más que nadie sabes que ese collar no sólo te protege a ti sino a los de tu alrededor y es muy peligroso si estás sin él. –me regaña enfureciendo un poco su tono de voz.

-Se me olvidó. Salí de la ducha y me iba a mí habitación cuando todo pasó.

-Te he rediseñado tu collar. A Sara igual. Esta vez no os lo podréis quitar ni para ducharos. Recuerda, es por vosotras, para protegeros.

-Claro que sí entrenadora.

Y acto seguido me dio un collar de plata con pequeños fragmentos de la piedra que una vez estuvo en mi collar.

- ¿Puedo retirarme ya entrenadora? –le pregunté a sabiendas que la respuesta sería negativa.

- Vieron parte de tu poder Aria... -comienza la entrenadora. –y pueden descubrir tu verdadero poder, aquel por el que eres capitana. Aquel por el que nadie puede hacerte frente si te lo propones, y aquel que te obliga a llevar ese collar, si no serías muy peligrosa.

Se hace el silencio en la sala. Sólo Sara y yo conocíamos de aquel poder, ambas juntas podíamos realizarlo, y nada había podido romperlo. Ya habíamos herido a muchas personas debido a él y es por eso que la entrenadora nos preparó durante nuestro entrenamiento diferentes planes, por si algo así pasaba. También nos preparó mentalmente para asumir las consecuencias si algo ocurría. Quizás por ello resistí a hacer daño a los chicos el otro día.

-Quiero que pongas en marcha el plan S. Avisa a Sara. Confío en vosotras y sé que lo conseguiréis. Ahora sí puedes marcharte.

Asiento con la cabeza, asimilando la orden que me acababa de dar e ideando un plan para que todo saliera bien. Teníamos que ser muy cuidadosas si no queríamos que el resto viera la trampa. La diversión estaba por comenzar.