Declaración

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Cuando amaneció, Tamara ya estaba despierta y comenzó a poner en práctica su plan. Primero llamó al director de Movistar.

-Buenas tardes. Soy Tamara Luz Ronchese, ¿podría hablar con el director? Todo bien. Yo espero.

Esperó a que la secretaria transfiriera la llamada.

-Buenas tardes. ¿Sí y tú? Qué bien. Necesito tu ayuda.

Explicó lo que quería hacer y el director dijo que ayudaría con lo que estuviera disponible. Luego tomó la guitarra y comenzó a ensayar una canción. Sonó su móvil y ella respondió rápidamente, pensando que era Irene.

-Hola.

-Hola Tamara. ¿Todo bien?

-Bien, Maria. ¿Y tú?

-Estoy bien. Te llamé porque Irene me preguntó. Ella quiere que hables con Alex. Despertó te buscando hoy e incluso tuvo fiebre. Ahora está mejor, pero está muy callado.

-Mi pobre hijo. Déjame hablar con él, María, por favor.

-Sí. Se lo pasaré a él. - Fue a ver a Alex y le entregó el móvil. - Tu mamá quiere hablar contigo.

-¿Mamá? Te extraño.

-Hola hijo. Mamá también te extraña.

-¿Vuelves, mamá?

-Todavía no, cariño- dijo Tamara con voz ahogada - Mamá todavía lleva unos días.

-Quiero abrazarte, mamá. - dijo Alex, llorando.

-No llores, hijo. Mamá también quiere abrazarte. No puedo irme ahora, todavía estoy trabajando, ¿de acuerdo? Prometo que cuando regrese, te daré muchos abrazos.

-De acuerdo mamá. No te demores, ¿de acuerdo?

-Volveré tan pronto como pueda, hijo. Mientras tanto, podrías ayudar a mamá. ¿Usted puede ayudarme?

-Puedo.

-Entonces, haz lo siguiente, abraza mucho a mami Irene y dale muchos besos. ¿Puedes hacerlo?

-Si mamá.

-Gracias hijo.

-De nada, mamá. ¿Quieres hablar con mamá Irene?

-A hora no hijo. Dale el teléfono a la abuela, por favor.

-Vale. Te amo mamá.

-Te amo hijo.

-Hola hija. ¿Quieres hablar conmigo?

-Sí. No sé si sabes algo, pero quiero que estés segura de que amo mucho a tu hija y que nunca haría nada para lastimarla.

-Lo sé, hija mía. Irene es extraña, pero no quiere decirme nada. Sea lo que sea, espero que lo resuelva pronto. Y puedes contar con mi apoyo, ¿ves?

-Gracias. Si lo necesita, puede volver a llamarme.

-De nada. Sí.

-Adiós.

-Adiós.

Tamara colgó el teléfono y continuó practicando. Después de un rato, el director llamó.

-Hola. Gracias. Sí.

La secretaria transfirió la llamada.

-Hola. ¿Logró? Qué bueno. Muchas gracias. ¿Qué horas? Perfecto.

Colgó y fue a preparar el resto del plan. Después de que todo se resolvió, llamó a María.

-Mamá, necesito tu ayuda.

Fly con vos (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora