Matrimonio Civil

550 43 6
                                    

El día de lo matrimonio civil, las dos se vistieron y fueron juntas a la oficina de registro. No querían hacer nada especial, porque todavía estaban pensando en celebrar con amigos.

Una vez allí, encontraron a madre, los hermanos y tíos de Tamara, quienes serían los testigos de la boda.

-Hija, qué hermosa.

-Gracias mama. Pero, mi esposa es mucho más hermosa, ¿no te parece? - dijo Tamara, abrazando a Irene.

-Ambas se ven maravillosas. - las abrazó - estoy muy feliz por ustedes.

-¿Qué pasa, cuñada? ¿Estás segura de que realmente te vas a casar? - Ale le dijo a Irene - Todavía hay tiempo para rendirse.

- Hola, Ale. Sí, me voy a casar. - tomó la mano de Tamara.

-¡Pelotudo! Vete a interrumpir el matrimonio de otra persona. - Dijo Tamara.

-¿Qué es eso, hermana? Solo quiero que ella pueda elegir mejor. ¿Tal vez ella quiere casarse con otro miembro de la familia?

-¡¿Quieres ser golpeado, descarado?! – corrió riendo y Tamara fue tras él.

-Amor, vuelve aquí. - Irene trató de sostener a Tamara, en vano.

-¡Estos dos son imposibles! - dijo la madre de Tamara - Cuando se juntan parecen dos niños.

-Tam tiene celos por nada. - Dijo Gaia.- Hasta parece que Irene la cambiaría por el gilipollas de mi hermano.

-¡Gaia! ¿Es esa la forma de hablar de tu hermano?

-Qué mierda, mamá. Él es realmente molesto. - dijo y se alejó.

-Disculpe, Irene. Voy a tener una conversación con esta chica. - se fue caminando tras ella - Gaia, vuelve aquí.

Tamara regresó y dijo:

-Disculpa, amor. Esta familia está realmente loca. Quizás mi hermano tenga razón. ¿Quieres rendirte?

-¡Idiota! – Besó a Tamara - Amo a tu familia. ¡Muy divertida!

-No es mía, amor. Nuestra familia. - besó a Irene.

Después de la boda, fueron a almorzar a un restaurante. Las dos no soltaron sus manos por un minuto y siguieron sonriendo.

-Familia, no me gustan estas cosas, pero quería decir algunas palabras. - Dijo Tamara.

Todos la miraron e Irene casi se escondió debajo de la mesa.

-A pesar de que hoy no es el día de la boda mismo, el que recordaremos por el resto de nuestras vidas, es un día importante ante la sociedad. Poder ser parte de un matrimonio entre personas del mismo sexo, siendo bisexual, en un mundo donde incluso hoy, desafortunadamente, en algunos países no está permitido, es como ser parte de la historia. No soy la primera ni la última en casarme en estas condiciones, pero, solo por ser parte de eso, ya me siento orgullosa. Sin embargo, tengo una razón mucho más importante para celebrar hoy. - Miró a Irene - Cumplí el sueño de hace años, casándome con la mujer de mi vida, la que me enamoré la primera vez que vi y nunca olvidé. Y es por eso que propongo un brindis: a la unión de dos personas que se amaron, se aman y se amarán hasta el final. ¡Te amo, mi esposa!

Todos brindaron y aplaudieron mientras las dos se besaban. Irene no podía ser más roja, pero tampoco podía ser más feliz. Su sonrisa gigante mostraba todo lo que no podía expresar con palabras porque tenía los ojos llenos de lágrimas.

-Amor, si supiera que te haría llorar así, no habría dicho nada. - dijo Tamara, limpiando las lágrimas de Irene.

-¡Tonta! – Besó a Tamara - No puedo hablar ahora, por eso doy RT.

-¡Idiota! - besó a Irene - ¡TE AMO!

-¡Te amo, mi esposa! – besó a Tamara.

Después de almorzar se fueron a casa, se ducharon y se sentaron en el sofá. La espalda de Irene estaba contra Tamara y sus dos manos estaban entrelazadas con las de ella.

-Amor, si alguien me dijera ahora que hay una felicidad mayor que esa, no lo creería. Nunca me he sentido tan bien.

-Sí, amor, también estoy inmensamente feliz. Si alguien dijera que estaríamos juntas hoy, hace 11 años, ni siquiera lo creería. Y estamos aquí, contra todas las expectativas.

-Esto solo fue posible porque nuestro amor es mayor que todo. - besó la mano de Tamara con el anillo - No había nada lo suficientemente fuerte como para sacudirlo.

-Y espero que sigamos superando todos los obstáculos, siempre así, de la mano. - apretó suavemente las manos de Irene y besó su mejilla - Hasta el final de nuestras vidas.

-Para mí, de acuerdo. Nunca te dejaré ir de nuevo. - volvió la cara y besó a Tamara - El infinito es poco para nuestro amor.

-Te amo hoy, mañana, después... - besó a Irene.

-Te amo incluso en otras vidas. - Soltó las manos de Tamara, se volvió y se sentó en su regazo, besándola apasionadamente.

NOTA DE LA AUTORA:

Si alguien todavía está dispuesto a soñar, ven conmigo. Mientras tenga imaginación, este Fic sigue.
¡Muchas gracias por tu apoyo!

Fly con vos (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora