| GOT YOU | 《Chandler Bing》[1]

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Maratón 1/4

Madison y Monica estaban atónitas ante lo que Phoebe les estaba diciendo, mientras se dirigían al central perk donde estarían sus amigos. 

—No puedes hacer eso. —Madison asintió de acuerdo a Monica, pero al ver a Rachel sonrió en saludo.

—¿Hacer qué?—pregunta Rachel luego de corresponder el saludo de la joven Walsh.

—Roger quiere invitarla a salir hoy—explica Monica mientras se quitaba el abrigo y Rachel la miró al instante.

—¡No! ¿Recuerdas por qué lo botaste?

—Porque era repulsivo. Y malo, y daba miedo—empezó a decir y sus amigas asentían, tratando de que entrara en razón. —Pero aún así, ¡es bueno tener una cita en el día de san valentín!

Madison suspiró acercándose a ella, que se había alejado. —Pheebs, tú podrías conseguir una mejor cita en un dos por tres. Hola—saluda al ver a Joey y a Chandler hablar.

—Hola. —ambos sonríen al ver a Madison.

—Phoebe, Mads tiene razón, puedes salir con quien quieres cualquier día. Es decir, eso es lo que yo hago—dice Monica encogiéndose de hombros, las dos rubias del grupo se miran y se sientan en el sillón. —Hola.

—Hola—los dos jóvenes saludan esta vez a Monica.

—Si quieres yo te consigo a alguien, pero por favor no salgas con él—dice Madison agarrando el brazo de Phoebe y lo empezaba a mover, logrando hacerla reír. Rachel miró al par y frunció el ceño.

—¿Qué harán mañana en la noche?—pregunta y Madison se gira rápidamente para escuchar la respuesta, Chandler siente su mirada y le sonríe; y estaba por responder, pero Joey se le adelanta.

—Eso depende de esta noche.

—Oh, Joe, lo de esta noche...—empieza hablar Chandler, dándole una mirada a Madison, Joey al ver eso se puso serio.

—¡No me vayas a dejar plantado! Dije que le traería un amigo para su amiga—explica y Madison abre los ojos.

—¿Disculpa? ¿Desde cuando eres el proxeneta de mi novio?—se acomoda la rubia, acercándose mas al joven Tribbiani, colocándolo nervioso.

—¿Proxeneta?

—Silencio, Bing. —suelta un suspiro. —Joe, lo siento pero ya habíamos planeado nuestra noche.

—Mads, por favor—ruega el pelinegro. —Es para la amiga de mi cita, normalmente son un lío patético. Enserio lo necesito.

—¿Y por qué no llevas a Ross?

—Él estará ocupado—responde Joey señalando a donde estaba su amigo hablando con una mujer. Madison rueda los ojos. 

—Madi, ella es la amiga que nunca saldrá con alguien, Chandler no arruinaría lo que tiene contigo por un desastre—habla encogiéndose de hombros, Rachel abrió la boca ofendida de que traten así a una mujer por lo que le lanza un pan a Joey en la nuca. —Gracias.

—Joey, lo siento... Pero va ser nuestro primer san valentín juntos... —empieza a decir Chandler, logrando que Madison sonría enternecida.

—Oh vamos, te necesito Chandler, por favor Madison, al menos dime que lo pensarás—suplica Joey haciendo un leve puchero, la susodicha mira a sus amigas quienes se encogen de hombros y luego a su novio, qué también estaba dudando. Finalmente, suspiró y se echo hacia atrás, colocando su espalda en el respaldar del sillón, donde Monica empezó acariciar su cabello.

—Lo pensaré.

—¡Sí!—festeja su amigo, Chandler rodó los ojos pero no dijo nada. En eso llega Ross con una sonrisa.

—Dijo que sí. —los chicos sonrieron felices por su amigo Ross, porque no creían que funcionaría lo del huevo.

—¡Así se hace, hombre!—todos fruncieron el ceño al escuchar un crujido cuando Chandler abraza a Ross. —Aún tienes el huevo, ¿no?

—Sí.

°°°

Luego de solucionar lo del huevo, Madison y Chandler subieron al edificio para ver que hacían con respecto a su amigo y su cita. Ambos entraron en el apartamento de Madison y la chica caminó arrastrando los pies hacia los muebles y tirarse allí.

—¿Por qué no tienen otros amigos?

—Amor, si no quieres, solo digamosle y ya. —Chandler se apoya en el respaldar de mueble y empieza acariciar la espalda de su novia. —La verdad es que no quiero ir, porque ¿Por qué pasar san valentín con una chica cualquiera cuando ya tengo a la cita perfecta en frente de mi?

Madison se acomoda arrodillándose en el sillón y lo mira fijamente con una sonrisa. —Eres el mejor novio que he tenido en mi vida.

—Lo sé. —Madison ríe y suspira. —No, ahí está tu rostro de que estás sintiendo mal y vas aceptar la locura de Joey Tribbiani.

—Es qué, esta cita al parecer es importante para Joe, ¿y si es la mujer que Joey estaba esperando para asentar cabeza?

—No, no lo creo—negó rápidamente el joven Bing, colocando las manos en las mejillas de Madison. —Madi, ¿desperdiciarás nuestro primer san valentín por una cita de Joey?

—Mi amor, tendremos muchísimos días de san valentín juntos... —explica poniendo sus manos en la cintura del joven, dando leves caricias. —Conociendo a Joey, la probabilidad de que Joey consiga alguien para toda la vida, y tenga algo así como lo que tenemos nosotros, es muy baja.

Chandler suspiró bajando la cabeza. —Pero en verdad quería pasar la noche contigo.

—¿Y quién dijo que no estarás conmigo esta noche? Cuando acabe todo te vienes y pasamos la noche despiertos—dice con una sonrisa traviesa, haciendo que Chandler trague saliva.

—Por favor, dime que no será viendo The Baywatch—suplica cerrando los ojos.

—Hoy no hay episodios de la serie. —Chandler abrió los ojos al instante y sonrió.

—¿Es un trato?

—Claro que sí, tonto—dijo acercándose para juntar los labios con los de Chandler, él sintió que sus piernas temblaron por un instante por lo que se agarró bien del mueble, Madison al ver eso rió en medio del beso y llevó sus manos a la nuca de su novio para profundizar más el beso. —Cuando estés con la amiga, no olvides de esto.

—Tendrás que hacerlo otra vez para que lo recuerde muy bien—susurra tratando de acercarse, pero tocan la puerta interrumpiendo el momento. —No hagas ruido, pueden que se vayan.

—Madison, sé que estás aquí—dice la voz del otro lado de la puerta, y la susodicha sonrió al reconocer la voz, por lo que rápidamente fue para recibir a la persona. —¡Mads!

—¡Oli!—exclama la rubia, abrazando al joven que estaba en frente, quién recibió a Madison con una risa. Chandler desde donde estaba sentado, se encontraba remedando al par, en cuanto reconoció al chico.

—Pero que bella estás—dice el joven apretando las mejillas de Madison, quién solo rodó los ojos.

—Y tú, mírate todo un galán—dice Madison tocando el abdomen del joven con sus dedos indices. —Cuanto tiempo ha pasado desde que te vi por ultima vez. 

—Lo sé, han pasado 7 años—dice encogiéndose de hombros, Madison deja de sonreír y frunce el ceño confundida.

—¿Pero qué haces aquí?—Chandler rasca su nuca.

—Es lo que todos nos preguntamos—susurra a sí mismo sin dejar de mirar al joven, pero el par no escuchó.

—La empresa me transfirió, y bueno, a partir de hoy seremos vecinos.

—¿En serio?—pregunta Madison con una sonrisa grande y llena de emoción. —¡Eso es genial! Chand, ¿estás escuchando?—el nombrado solo da una sonrisa falsa y asiente, solo ahí el joven en frente de Madison, lo nota.

—Oh, hola, Chandler.