Half A Heart ☄ (Dahmo)

Capítulo 60

— Está bien. — se rindió. Mina asintió.— Mina, prométeme que no se lo dirás a nadie.

La castaña asintió, sonriendo.

— Él es... Bueno... — rascó su nuca.

— ¿Sabes qué? — dijo Mina, mientras observaba como entraba mucha gente. —Hablamos mejor cuando este lugar esté tranquilo.

Dahyun soltó un gran respiro. — Con eso... — dijo, mientras guardaba la plata rápidamente. — Necesito hablar contigo también. — la miró con un semblante serio. — Hola, muy buenas tardes ¿Qué desea pedir? — le sonrió al cliente frente a ella.

La tarde transcurrió muy rápido, el lugar no dejaba de llenarse. Mina le pedía constantemente a Jeremy que la deje hacer sus trabajos. Dahyun la oyó pedir trabajo extra. Se veía exhausta, pero sin dejar de trabajar.

Las piernas de la rubia comenzaban a temblar cuando se acercaba la hora de salida. Mina era muy perseverante, y para nada olvidadiza, se parecían mucho en eso, y lo odiaba en ese instante.
Tomó la iniciativa para preguntarle qué le estaba sucediendo.

— Mina, puedes descansar un rato. —  oyó decir a Jeremy.

— Minari ¿Quieres hablar ahora?

— Tengo curiosidad por el hombre ¿Es el mismo sobre el que Jeremy me contó que te molestaba?

— ¿Él dijo eso? ¿Por qué? — arrugó las cejas. Se dió cuenta de que comenzaban a hablar de ella, y sacudió la cabeza. — Pero yo empecé esta conversación, y voy a preguntar primero.

Las dos salieron detrás del mostrador y se sentaron frente a frente en los sofás del local.

— ¿Qué te está pasando? Te noto agotada, pero aún así no paras de trabajar, te escuché pedir horas extras. Tienes universidad Mina.

— ¿Chae te lo contó?

— Y yo no soy ciega.

— Me pregunta todo el tiempo qué es lo que me sucede. No quiero deprimirla con mi vida.

— Mina... — tomó las manos de la chica por encima de la mesa. — Ella es parte de tu vida ¿No? — la castaña asintió, sonriendo. — Te gustaría que ella te cuente sus felicidades, sus penas ¿O no? — volvió a asentir, presionando sus labios. — Entonces confía en ella, te dará las fuerzas que necesitas, por lo que sea que estés pasando, ella está contigo. Y yo también. — la miró a los ojos, y sonrió.

— Te adoro, Dahyun. — Tomó una de las manos de la rubia, y la besó.

— No hagas eso — se estremeció y ruborizó completamente.

— Es costumbre — soltó una risita.

— Tambien te adoro, muchísimo, siempre cuentas con tus amigas y tú increíble novia.

— Tú también Dahyunie, así que cuéntame quién es ese misterioso hombre del que Jeremy habla.

El rostro de la rubia cambio completamente. Había estado tan ocupada que no pensó una mentira. ¿Y ahora qué haría? Lo esquivaria con preguntas.

— ¿De qué hombre habla Jeremy? — fingió confusión, aunque, a decir verdad si estaba un poco confundida ¿Jeremy sabía de sus encuentros con Mark?

— Él me dijo que, a veces, un hombre viene a hablar contigo, y tú pareces incómoda... Me dijo que una vez entró a comprar algo y no fue rápidamente atendido. ¿Es algún cliente inconforme? ¿Él te está molestando? Es importante que lo digas, Dahyunie.

Gracias Mina, gracias.

— Ss-si — dudó, pero mintió al fin. — Si es eso, él sólo se molestó y me visitó dos veces, eso es todo, ya no me molestará. — asentía rápidamente.