Half A Heart ☄ (Dahmo)

Capítulo 65

— Esta temperatura me está matando, no hay un rastro del sol aún, pero el calor es demasiado...

Dahyun se quejaba, mientras abría la ventana del balcón, luego se abanicó  con su mano desesperadamente, pero el viento no aparecía ni por casualidad.
Momo estaba en la ducha por tercera vez desde que llegaron y le insistía a Dahyun que entre porque ella no planeaba salir de ahí hasta que el calor pase; la rubia sabía que el calor aumentaría si entraba ahí, aunque se estaba conteniendo fuertemente con las manos apretadas contra la baranda del balcón, porque la idea de compartir una ducha o una tina de agua fría con Momo la tenía intrigada, pero aún no.

— Oh — dijo al tiempo que se le escapó un suspiro, una idea vino a su mente. ¿Cómo no lo había pensado antes?

Se golpeó la frente con la palma de su mano.

— ¡Momoring! — caminó hasta el baño a duras penas.
Momo respondió pero su voz llegó en un suave hilo.

— ¡Momoring, piscina! — gritó del otro lado de la puerta.

Una fuerte carcajada llegó hasta Dahyun y la hizo sonreír.

— Creo que el viaje debe haber afectado nuestras neuronas. — comentó al salir enredada en una toalla. Dahyun rió asintiendo.

— ¿Crees que dejen nadar con short? — caminó hasta su maleta ignorando el hecho de que Momo la miraba con una sonrisa perversa.

— Si el hotel lo permite pues yo no. — sostenía esa sonrisa.

Dahyun se dió vuelta, tenía los labios ligeramente separados.

— ¿Perdón? — abrió grande sus ojos.

— Te perdono si me das un beso... — se apuntó los labios con el dedo índice.

— ¿Perdón? — habló con un tono más divertido y ladeando su cabeza.

— Que sean dos besos. Y usarás una bikini que traje para tí. — caminó a su maleta evitando reír por las expresiones de Dahyun.

— No me gustan las bikinis. — se cruzó de brazos.

— Descuida, te gustará, no es pequeña.

La sacó de entre su ropa, aún estaba en el empaque pero Dahyun pudo saber de cuales era.

— Oh — sonrió y caminó hasta Momo con las manos extendidas para agarrar su regalo. — Bueno, esta si me encanta. — miró a la chica y le dio un rápido beso en la mano a la vez que agarraba el conjunto.

— Lo sabía, por eso te lo traje, es básicamente un short, corto, pero no es uno. — asintió.

— Y el color es bonito — sus ojos sonrieron al darse cuenta de lo mucho que Momo la conocía.

— ¿Te gusta? — hizo puchero.

— Me encanta — lo apretó contra ella y se dió la vuelta. — iré a ponérmelo.

La mayor se puso a buscar la suya, que no era como la de Dahyun, sino una bikini como las de costumbre, las que casi todo el mundo usaba en la playa.
Se envolvió la parte inferior con una toalla y esperó por su novia.

— Listo — dijo, abriendo la puerta del baño y consiguiendo la mirada de Momo.

La pelinegra apretó suavemente sus labios y luego los dejó entre abiertos.

— ¿Por qué me miras así? — las mejillas de la chica se tornaron rosas.

— Eres hermosa. — sonrió enamorada.