GAME OVER AFRODITA [BORRADOR]

39

El beso fue subiendo la intensidad y acto seguido tenía a Jaden encima mía besándome el cuello.
- Jaden: ¿te han dicho alguna vez que las carreras ilegales te hacen más sexy de lo que ya eres?- sonrió inocentemente entre besos.
Yo negué con la cabeza riendo.
- Jaden: te amo Kendal, nunca lo olvides.
- Y yo a ti Hossler.
Y otra vez, volvimos a dormir en el suelo. Los deslumbradores rayos del sol me despertaron y notaba como Jaden me miraba mientras me aferraba más a él.
- No me voy a escapar tonto.- dije riendo.
- Jaden: lo se, pero quién sabe cuando podré volver a tenerte así. - dijo acomodando su cabeza en mi cuello y yo le acariciaba el pelo.
- Siempre me tendrás.- pensé en voz alta.
- Jaden: ¿qué dijiste?- preguntó sonriente.
- Nada.
- Jaden: siempre me tendrás...- dijo imitándome.
- Cállate o me largo.
- Jaden: wowowo, está bien.- dijo volviendo a tumbarse.- ¿Lo dices en serio?
- ¿El qué?
- Jaden: lo de que siempre serás mía y te tendré.
- Jaden, puede parecer que sea una estúpida por volver cientos de veces con la única persona que tiene mi corazón y destruirlo tanto como quiera, y quizás no seas lo mejor para mí, pero se que eres lo que necesito para vivir.
- Jaden: madre mía, me enamoras cada día más.- dijo para darme un beso en los labios.
- Esto no es precisamente el tiempo que pedí Jaden...
- Jaden: tú también consientes que te de besos, así que tú también accedes a ellos pillina.- yo solo reí.
- Lo se, pero por ahora prefiero seguir como estábamos.
- Jaden: básicamente cuando nos vemos es para follar.
- ¡¡JADEN HOSSLER!!- dije gritando y acto seguido salió corriendo.- JADEN VEN AQUÍ.
- Jaden: ¡perdón, perdón, no quería decir eso!
Vi como doblaba por la esquina de una caseta y yo lo seguí, al cruzar la esquina alguien me cogió del brazo y me agarró por la cintura.
- Jaden: no puedes negar lo evidente.
- Te voy a matar Hossler, ya puedes estar rezando para poder tener hijos, porque te juro que te voy a dejar sin ellos.
- Jaden: entonces tú tampoco tendrás, una lástima porque tendríamos unos hijos preciosos Afrodita.
- Cierra el pico Hossler.
- Jaden: no te pongas así Kendal, en cierta parte llevo razón, desde que nos separamos las veces que nos hemos visto, o hemos dormido en el suelo, o hemos follado o nos hemos besado, no tiene ni pies ni cabeza lo nuestro.
- Dios, ¿por qué eres tan brusco hablando?- dije riendo.
- Jaden: eso no importa, ahora di que tengo razón, porque la tengo. - dijo sonriente.
- Jamás.- dije riendo y salí corriendo, provocando que Jaden viniese detrás mía.
- Jaden: ¡KENDAL NO PIENSO JUGAR AL PILLA-PILLA CON 19 AÑOS!
- ¡ALLÁ TÚ!
Volví a donde estaba mi coche y vi como Bryce se acercaba con el suyo.
- Bryce: buenos días.- dijo somnoliento.
- Buenos días.- dije abrazándolo.- ¿Cómo sabes que seguía aquí?
- Bryce: le pregunté a tu noviecito anoche si te encontrabas bien.- Señaló a Jaden con la cabeza, quien venía corriendo.
- No es mi novio.
- Bryce: eso ya lo veremos.
- Jaden: joder Kendal, no sabía que corrieses tanto.- dijo asfixiado.- ¿Qué haces aquí?- le preguntó confuso a Bryce.
- Bryce: al parecer nadie quiere verme.- dijo riendo.- Lo siento tortolitos, pero tenemos que irnos Jaden.
- Jaden: está bien, dame 5 minutos. ¿Mi coche sigue aquí?- Bryce asintió y se marchó al suyo.
- Jaden: bueno, supongo que hasta aquí mi visita señorita Kendal.
- Encantada señor Hossler.- dije sonriendo.
- Jaden: el móvil es muy útil, la verdad, podrías usarlo más a menudo para llamarme.
- Cállate estúpido.- dije riendo.
Jaden me acercó lentamente a él cogiéndome por la cintura y yo puse mis brazos alrededor de su nuca.
- Jaden: te voy a echar de menos.
- Yo no.- Jaden puso morritos y yo solo reí.
- Jaden: nunca te pedí que intercambiásemos roles, ahora tú eres la fuckgirl.
- Bueno, las cosas cambian.
- Jaden: cuídate, ¿ok?- yo asentí.
- Y tú prométeme que no tomarás más de esas mierdas.
- Jaden: te lo prometo.- y me dio un corto beso en los labios.
Mientras se alejaba hacia su coche, antes de montarse me hizo una señal de un teléfono y otra de fuck me, a lo que yo riendo le saqué el dedo y provoqué su risa. Me despedí también de Bryce y ambos se fueron, yo me marché a mi casa.