GAME OVER AFRODITA [BORRADOR]

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- Mads: te estaba buscando por todas partes, ¿dónde estabas?
- Jaden: conmigo. - yo le miré.
- Mads: no desaprovecháis, ¿eh?
- Jaden: no empieces cantajuegos.
- Mads: que te follen.
- Jaden: ya lo hicieron, no veas el placer que me dio.
- ¿Podéis dejar de picaros? Gracias.
- Mads: el día que calmes a esa bestia, te daré un premio.
- Jaden: que metan mierda nunca fue conmigo.
- Parad ya. Jaden.- dije mirándolo pidiendo que parase.
- Jaden: me voy con los chicos. Te veo luego muñeca - dijo dándome un beso - adiós cantajuegos - dijo enseñándole el dedo mientras yo reía.
- Mads: ¿Mañana tenías el vuelo de vuelta?
- Sí, pero tranquila, vendré dentro de 2 semanas por tu cumpleaños.
- Mads: entonces, ¿podrás venir?- preguntó emocionada.
- Por supuesto, no me perdería tu cumpleaños por nada del mundo.
- Mads: ¿Y qué pasa con él? Porque tú volverás a Malibú...
- No lo sé. - respondí mirando en la dirección en la que estaba mi chico. - No había pensado en eso...
- Mads: ¿Sabes qué? Da igual, estamos de fiesta, olvidémonos de todo.
- Llevas razón.
Fuimos con el resto de chicas y tras estar un buen rato bailando y bebiendo, apenas me podía mantener en pie, no solo por la embriaguez, sino también por el cansancio.
- Jaden: ¿Te pasaste bebiendo otra vez?
- Un poquito.- respondí arrastrando las palabras.
- Jaden: te voy a tener que quitar el vodka- dijo riendo.
- Ok papi.
No era consciente de que Jaden tomó esa palabra con segundas intenciones.
- Jaden: ¿Sabes? Te dejaré el vodka.- dijo mirándome pícaramente.
- Gracias Mr. Hossler.
- Jaden: será mejor que nos vayamos, o la cosa seguirá subiendo de tono.
Jaden me cargó a sus hombros y todos los chicos se fueron con sus respectivas parejas.
- Bryce: tengo que irme con Addi, sino, te vigilaría para que no te aproveches de ella.
- Jaden: sabes perfectamente que jamás me aprovecharía de ella y que hiciese algo que Kendal no quisiera.
- Bryce: estás vigilado Hossler.

- Jaden: ¿Algún día tu hermano dejará de amenazarme?- preguntó riendo mientras se metía en el coche.
- No.- respondí sonriente.
- Jaden: ¿Por qué sonríes? ¿Acaso me quieres muerto?- dijo sonriente.
- Te quería muerto, pero ahora solo te quiero entre mis piernas.
Empezaba a hacer calor en ese coche.
- Jaden: encantado reina.
- ¿A qué esperas?- pregunté llena de lujuria acercándome a él.
- Jaden: estás borracha.- dijo dándome un corto beso.- El vodka te pega fuerte.
- Respondiendo a tu pregunta- dije volviendo a mi asiento, sabía perfectamente que él no cedería porque lo último que haría sería aprovecharse de mi borracha, pero al menos se quedaría con ganas. Una pequeña venganza por lo capullo que fue.- jamás te dejaría morir, porque si tú mueres, yo también. Necesito que sigas a mi lado. Dicen que cuando alguien está borracho es cuando más verdades dicen, solo digo la verdad. Te amo Jaden Hossler.- dije para segundos después cerrar mis ojos.
- Jaden: ¿qué? preguntó exaltado.
Pero yo ya estaba dormida.

JADEN:
- ¿Algún día tu hermano dejará de amenazarme?- pregunté riendo.
- Kendal: no.- respondió sonriente.
- ¿Por qué sonríes? ¿Acaso me quieres muerto?- dije sonriendo.
- Kendal: te quería muerto pero ahora solo te quiero entre mis piernas.
Maldita sea, sabe perfectamente que no lo haré y que me quedaré con las ganas.
- Encantado reina.
- Kendal: ¿A qué esperas?- preguntó llena de lujuria acercándose a mí.
- Estás borracha.- dije dándole un corto beso.- El vodka te pega fuerte.
- Kendal: respondiendo a tu pregunta- dijo volviendo a su asiento- jamás te dejaría morir, porque si tú mueres, yo también. Necesito que sigas a mi lado.Dicen que cuando alguien está borracho es cuando más verdades dicen, solo digo la verdad. Te amo Jaden Hossler.- dijo para segundos después cerrar sus ojos.
- ¿Qué? pregunté exaltado.
Kendal, mi Afrodita, volvió a decir que me ama. 2 años. 2 años he pasado sin oírle decir eso, pensando que jamás la recuperaría y que me odiaría de por vida, y ahora, borracha, me dice que me ama. ¿Por qué no se ha emborrachado antes?
Todo esto se me cruzaba por la cabeza mientras la miraba sonriente cuando ella dormía.
Llegamos al hotel y la cogí para subirla a su habitación.
La abrí y la dejé en la cama.
- Buenas noches princesa.- le dije dándole un beso en la frente.
Estaba dispuesto a salir de la habitación cuando la oí decir:
- Kendal: ¿Jaden?
- ¿Sí?
- Kendal: quédate conmigo, por favor.
- ¿Segura?
Ella asintió.
Me acosté a su lado y en cuanto me tumbé me abrazó rodeándome con sus brazos posando su cabeza en mi pecho.
- Kendal: gracias.
- Yo también te amo, Kendal McCrystal.- ella me aferró más fuerte.
- Kendal: no vuelvas a alejarnos.- susurró y volvió a dormir.
- Esta vez no.- dije acariciando su espalda.- No volveré a perderte.