21. Fingir estar de acuerdo.

9 0 0
                                    

El despertar fue algo diferente a lo habitual. No fue el sol entrando por mi ventana. no fui yo misma, ni tampoco mi madre arrancando mis mantas para luego gritarme.

Fue un beso, luego otro, y el siguiente en mi cuello.

Abro los ojos inmediatamente y me encuentro con Vincent sobre mi.

-¿Qué estás haciendo?-pregunto algo confundida separándome.

-Una disculpa por todo lo que pasó con tu hermano- se aleja un poco y me mira mejor-vine a ayudarte, lo prometí.

Le ofrezco una sonrisa y él se acerca para besarme esta vez muy cerca de mis labios.

Creo que me precipité, Vincent debe pretender estar de acuerdo con el consejo si quiere protegerme.

Lo juzgué mal.

-El consejo quiere la prueba, tengo que dárselas antes de que arremetan contra tu hermano o peor, contigo.

-Te la daré-asiento- Hoy mismo, trae al doctor y lo haré.

Parece impresionado, algo incluso asustado de mi entusiasmo de hacerlo, pero necesito probar mi inocencia.

Vincent se quita de encima y al estar de pie me ofrece su mano la cual acepto. Una vez estando de pie frente a él me quedo estática al sentir que pada su brazo por mi cintura, pegándome a él y levantándome de tal manera que he quedado de puntas en mis pies.

-Estas preciosa, Elissa.

No comprendo a que viene todo esto.

-Gracias- digo sin poder mirarlo a los ojos.

Vincent toma mi barbilla y la alza para obligarme a verlo. No sé si es peor mirarlo o no hacerlo.

-Mírate-murmura-Tus ojos, tu cabello, tus labios- se aleja para arrodillarse frente a mi- Te pido una disculpa desde lo más profundo de mi corazón. Lo que te dije anoche era cierto, pero también llegué a dudar de ti, y cuando golpee a Daly frente a las caballerizas fue porque el consejo logró convencerme.

-Vincent, déjalo.

-No voy a ponerme de pie hasta que me perdones- dice tomando mis manos- No importa si tengo que pasar así todo el día. Solo necesito que comprendas que no soy perfecto, por más que aparente serlo y tener todo bajo control. Nadie me ha enseñado como ser un buen esposo y al ser la primera vez que me caso te pido que me guíes porque no tengo idea si estoy haciéndolo bien.

Extraño como toda mi vida fui entrenada para agradar a mi esposo mientras que a él nunca le hicieron pasar por ello. Si yo fuera varón tal vez hubiera pasado más tiempo al montando y peleando al aire libre en lugar de escuchando gritos que me pedían dejar de ser tan maleducada.

Nunca es tarde para aprender, ¿cierto? Podemos aprender uno del otro.

Intento no sonreír pero me es imposible. Vincent parece tomar eso como una buena señal, se pone de pie sin soltar mi mano y me mira preocupado.

-¿Podemos llevarnos bien?- pregunta.

-Buen discurso- me limito a decir y me doy la vuelta para salir de la habitación, pero al hacerlo sé que no fue completamente lo que quise hacer así que regreso y planto un beso corto en los labios de mi esposo- Consideremos llevarnos bien.

Y así abandono la habitación.

•••

Pasé toda la mañana sola. Le pedí a Catherine que avisara en la cocina que trajeran mi almuerzo a la habitación en la sala en la que estuve aislandome.

Perfecta creaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora