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.Habían pasado varios días de la última vez que Milo y Sophie se vieron, después de ese abrazo, ambos pretendieron que nada había sucedido, que todo estaba bien y disimularon en la mesa, aunque Milo moría por preguntarle que pasaba, presentía que debía ser demasiado personal como para que ella se pusiera de esa forma.
Sophie corría por el pasillo, buscando a Gia, quien traía el desayuno para ambas, la castaña se había retrasado un poco en el estacionamiento, ya que había olvidado buscar su bolso en el auto de Gene. Llevaba una falda blanca sencilla y una camiseta con fresas en la tela, se detuvo en seco cuando vio a Milo reír con Heather.
Quiso ocultarse, pero solo se quedó ahí, viendo los movimientos de los brazos de Milo y como parecía hacer el amago de tomarle de la cintura. Sophie se sintió verdaderamente estúpida, cuando notó la forma en que el pelinegro se dirigía a Heather y como ella se ponía de puntillas para darle un beso en la mejilla.
Sophie se dio la vuelta, caminando rápido antes de que la vieran, estaba molesta y ni sabia porqué. Cuando Gia la vio, una expresión interrogante se alzó sobre su rostro.
-¿Qué te pasa?- preguntó la rubia, Sophie negó- Soph, tienes una cara de que quieres matar a alguien que asusta.
La castaña dirigió su atención al panecillo de arándanos que de pronto ya no se sentía tan apetitoso. La puerta se abrió, dejando ver a Milo y Heather entre risas, Gia entendió al instante:-Por eso nunca le daré la oportunidad, es un maldito mujeriego.
Milo le dio una sonrisa a Sophie que ella ignoró, e incluso lo dejó con el saludo en la boca, ya ni siquiera quería ir a la dichosa fiesta de piscina porque sabía que Heather estaría ahí.
-No voy a competir por un chico y si el da atención a todas, no me interesa- sentenció- Gia, no me mires así, no estoy celosa.
Gia alzó las manos con inocencia.
-¡Yo no estoy diciendo nada! Solo estoy escuchándote y estoy de acuerdo, en serio. Que se pudra- soltó, luego de rodar los ojos y hacer una señal con la mano- te está viendo con ojos de perrito mojado.
-No me importa.
Se quedaron en silencio unos segundos, Sophie murmuró:-¿En serio me está mirando?
Gia sonrió.
-Si, esta como un búho intentando ver que anda mal- contesta- pero mira, si el quiere andar entre Heather y tú, mandalo a la mierda.
Sophie asintió.
Continuaron desayunando, hasta que el pelinegro caminó hasta la mesa, intentando hablar con Sophie quien al verlo, se puso de pie y se fue. Milo frunció el ceño, Gia suspiró tomando un poco de su café.
-¿Todo esta bien con Sophie?- preguntó, ella negó- ¿Qué pasa?
-No lo sé, tu explica señor womanizer- citó la canción de Britney Spears. El la miró sin entender- no sé, ella esta molesta, arreglalo.
Se puso de pie pero Milo la siguió, la rubia rodó los ojos, mientras avanzaban por los pasillos de Disney.
-Dime que hice.
-No.
-Por favor.
-Ya te dije que no- reiteró Gia viendo su móvil.
-Te pago.
-No quiero tu dinero.
Milo suspiró:-Te compro lo que quieras en starbucks durante un mes- la rubia se detuvo interesada.
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Cybersex 《Milo Manheim》✔ EDITANDO
FanfictionEl sexchat es divertido, hasta que la persona con la que charlaste es nadie más y nadie menos que la chica que trabajará contigo. Milo y Sophie se divirtieron hablando anonimamente en una página para hablar con desconocidos. Sophie llega a Disney p...