::Gatito mimado:♱:KookV::

Uno

Capitulo dedicado a BritanyAcosta3

4 años

Con desagrado y un profundo odio, el demonio veía al pequeño niño de tres años de pie frente a él. Quería matarlo, pero debía cuidarlo. Es su nuevo amo. JungKook tenía una forma que asemejaba a una pantera negra. Pero mucho más grande, feroz y peligroso. Provocaba miedo sobre cualquiera, pero a la vez  era un demonio que desprendía un aire de elegancia y belleza. Y ese aroma que desprendía es demasiado atrayente para cualquiera. No es un demonio normal.

Su antiguo dueño había muerto y había sido heredado a ese saco de olores desagradables y llanto. Por lo general sus amos ya tenían la edad suficiente para controlar magia no esa cosa. No le gustan los niños.

TaeHyung veía al enorme ser, aunque JungKook estuviera sentado en el piso se veía mucho más grande que el árbol del jardín.

Mientras los adultos hablaban sobre el prodigioso futuro de TaeHyung como futuro líder del aquelarre, le dejaron solo con aquel demonio. TaeHyung veía su pelota y luego a JungKook, dejando la pelota en el suelo le dio un pequeño y torpe golpe con su pie acercándosela. La pelota chocó con una de las grandes patas del demonio y este la viera con desinterés y luego a TaeHyung.

“No quiero jugar contigo humano así, que no me lo pidas” Dijo con molestia. En realidad, nunca había jugado con alguien así que no sabía hacerlo.

Escuchando la voz en su cabeza, TaeHyung le vio sujetando sus manitas. No sabía que hacer. Trató de ir de nuevo por la pelota, pero se tropezó. Siendo detenido por una de las patas del demonio.

Sorprendido TaeHyung le vio sintiendo lo suave del pelaje, sonriendo lo abrazo. El enorme gatito es como un peluche.

JungKook le vio con desagrado y asqueado, pero no lo alejó.

—TaeHyung ven a dormir —Le llamó su madre desde la puerta, alejándose el peligris dio un par de pasos antes de voltear viendo al demonio que seguía ahí sentado.

—Sígueme gatito —Dijo haciendo un ademan con su mano. Hoy le habían dado una mascota y estaba feliz.

“¡¿Gatito?!” Dijo indignado ¿Cómo se atrevía a decirle así? “El hecho de que seas mi amo no te da derecho a humillarme así” Se quejó comenzando a andar tras de él y la madre del pequeño brujo se asustara un poco retrocediendo asustada de JungKook.

Viendo que no cabría por esa puerta JungKook tomó su forma humana, dejando a la vista a un apuesto hombre con orejas y cola que asemejaban las de un gato, con su vestimenta negra y encadenado, cadenas mágicas que lo unían a TaeHyung y le causarían un horrible dolor si se atrevía desobedecer o hacerle daño. Hasta que TaeHyung aprendería a ocultarlas seguirían a la vista de todos.

Adentrándose en la casa, vio con desprecio a todos. No estaba ahí por voluntad propia. Solo era un esclavo de esos estúpidos brujos. Cuando el mocoso muriera pasaría a otro familiar y así sucesivamente como llevaba haciendo en 500 años.

TaeHyung le vio sorprendido y el pelinegro le viera a los ojos, con el pelo casi cubriéndole los ojos, sonriendo TaeHyung le tomó la mano y hacerlo ir a las escaleras.

—El señor gato dormirá en mi habitación —Sonrió el pequeño subiendo.

—Que no soy un gato —Se quejó JungKook.

—No es necesario TaeHyung. El familiar puede dormir afuera para cuidar la casa. Tu abuelo lo dejaba afuera no necesita entrar a la casa —Dijo su padre.

—No. Afuera hace frío —Se quejó sin soltarle la mano.

—¿No tienes pulgas o si? —Pregunta la madre de TaeHyung viendo a JungKook

—No, pero como humanos, en especial las mujeres. Su carne es más suave—Dijo viendo a la mujer con una sonrisa malvada, a esta solo le dio un escalofrió viendo los ojos rojos del demonio.

Soltando a TaeHyung lo cargó y subir más rápido alejándolo de ese ser —Mi cama es pequeña, pero creo que cabes en ella —Dijo TaeHyung asomándose por el hombro de su madre para ver a JungKook quien los seguía.

—No va a dormir en tu cama. Que duerma en el suelo. Suficiente con tenerlo dentro —Se quejó cerrando la puerta al entrar a la habitación. Dejando a JungKook afuera, pero este solo la atravesó —Fuera. No te quiero aquí dentro.

—No recibo ordenes de usted —Respondió con desinterés.

—TaeHyung dile que se vaya, que se quede en el pasillo.

—Pero quiero que duerma aquí. El señor gato es mi mascota.

—Que no soy un gato.

—Hazlo. Tienes que ponerle límites a tu familiar desde ahora —Con un puchero TaeHyung se acercó y hacer un ademán con su mano para que JungKook se agachara cosa que hizo a mala gana.

—Quédate afuera hasta que todos se duerman, entonces entra —Le susurró.

—¿Qué le dijiste? —Pregunta la mujer.

—Que se quedara afuera —Confesó e ir por su pijama. JungKook solo vio con desagrado a la mujer y salir atravesando la pared.

Sentándose en suelo JungKook vio sus pies descalzos y los grilletes en ellos. Solo era un objeto que usaban como se les antojaba.

Las horas pasaban y las luces se apagaron en aquella casa cuando todos se fueron a dormir. Casi una hora después la puerta de la habitación de TaeHyung se abrió dejando a la vista al pequeño recién despertado.

—¿Por qué no entraste?

—Tu tío sigue despierto bebiendo en su habitación —Dijo sin mirarle. Él dijo que hasta que todos se duerman.

—Entra —Dijo abriendo más la puerta y el pelinegro le obedeciera. Cerrando la puerta volvió a su cama —Acuéstate aquí —Dijo palmeando el lugar a su lado y el pelinegro fuera como le pidió.

—Puedo dormir afuera —Dijo y TaeHyung negara dándole su peluche de dormir.

—Ten al señor oso. Ayuda a dormir —Dijo cubriendo al pelinegro con la sabana y acostarse —Buenas noches —Dijo antes de quedarse dormido.

—Niño tonto —Dijo sin poder tirar ese peluche ni levantarse de la cama. No podía desobedecer.