::Gatito mimado:♱:KookV::

Veinticinco

Con su cabeza apoyada sobre sus brazos cruzados en el escritorio. TaeHyung tenía sus ojitos cerrados sintiendo dolor de estómago. Por lo general no usaba su magia para cosas tan pequeñas. JungKook por su parte observaba a cada alumno asegurándose de que no pudieran copiar de ninguna forma.

Siendo el minino que vigilaba, ni siquiera lo intentaban, le tenían más miedo a él que un castigo de TaeHyung.

—Maestro Kim —Dijo una voz femenina haciendo que TaeHyung levantara la cabeza notando el examen escrito que esta le estaba entregando —Termine mi examen.

—Esta bien… —Dijo al aceptarlo y dejarlo sobre el escritorio —Ya puedes retirarte —Asintiendo, esta fue por su mochila.

—Nos vemos el otro año —Le sonrió mientras salía del salón, TaeHyung solo Alzo su mano despidiéndose también, pero no quería hablar. Se sentía muy incómodo con ese dolor. Haría algún hechizo cuando la prueba terminara.

Suspirando recostó su espalda en el respaldo de la silla y ver a JungKook de espaldas a él, su colita se movía en un suave vaivén, tocando su abdomen, vio a sus alumnos, todos eran alfas de 4 a 7 años mayores que él, a los maestros aún les parecía un poco cómico que el peligris fuera su maestro, TaeHyung es pequeño y adorable entre todos esos grandulones.

Mientras el tiempo pasaba uno a uno fueron pasando al escritorio dejando sus pruebas antes de irse, suspirando, TaeHyung las ordenó y meterlas dentro de un sobre que guardo en su mochila.

“¿Sucede algo?” Pregunta JungKook llamando la atención de TaeHyung quien cerraba su mochila, este se veía pequeño pero podía guardar cualquier cosa dentro. Sin importar su tamaño. El mismo lo había hecho. Era uno de sus primeros inventos, pero era algo que guardaba solo para si mismo.

—Si. Solo me duele un poco el estómago —Respondió haciendo el hechizo y un pentagrama verte apareciera bajo sus pies desprendiendo una pequeña luz. Sonriendo sintió aquel dolor detenerse —Vamos — Dijo colgándose la mochila en los hombros y tomar a JungKook en brazos. Saliendo del salón cerro la puerta.

Pero ni bien anduvo algunos pasos en el pasillo se detuvo sintiendo aquel dolor con más intensidad —TaeHyung ¿Qué tienes? —Pregunta JungKook volviendo a su forma humana, viendo al omega que se había inclinado un poco hacia adelante tocando su abdomen.

—Me duele mucho el estómago —Dijo sintiendo que este se calmaba pero a los 3 segundos este volvió igual de fuerte y TaeHyung hiciera una pequeña mueca.

—¿Y el hechizo?

—No funcionó —Dijo y JungKook se quedará pensando un momento, viendo al peligris lo tomo en brazos sorprendiéndolo, desapareciendo en una nube de humo negro se lo llevo de ahí.

Apareciendo en la habitación de TaeHyung le dejo en la cama mientras aquel humo negro se disipabá en el aire —¿Por qué no funcionó el hechizo?

—No puede quitarte el celo —Dijo y TaeHyung le viera con confusión.

—¿C-celo?

—No estás enfermo así que no hay nada que curar, es un proceso natural del cuerpo así que el hechizo no funciona —Dijo y TaeHyung se pusiera pálido, se estaba asustando. Se supone este se manifiesta a los 18… Aunque tampoco estaba tan lejos. En tres días cumpliría 17.

Espantado vio sus manos, apretandolas un poco por el dolor —¿N-no puedo calmar este dolor?

—Tengo experiencia en esto —Dijo estirándose un poco —A HanSung le daban unos dolores que lo hacían retorcerse en cama —Dijo yendo hacia la puerta, TaeHyung solo se asustó más.

Los minutos pasaban y TaeHyung solo se sentía más agitado, hacia mucha calor y su corazón estaba acelerado, ya se había cambiado de ropa pero seguía goteando, abrazando una almohada se encontraba en posición fetal, no soportaba el dolor, tanto que sus ojitos se habían llenado de lágrimas, era como si lo desgarran por dentro.

Entrando a la habitación, JungKook entro con una taza de té —Tómate esto —Dijo ofreciéndosela y TaeHyung se sentara en la cama.

—Esto huele horrible —Se quejo.

—Y sabe aún peor. Solo tómatelo sin vomitar. Quita el dolor —Respondió honesto y TaeHyung hiciera una mueca.

Suspirando, soplo un poco el té antes de tomar, sintiendo una arcada cuando probo el amargo sabor que este tenía. Conteniendo las ganas solo termino de tomarse aquel líquido púrpura.

—Siento que voy a vomitar —Se quejo dándole la taza y JungKook la dejara sobre la mesa, no quería ir a la cocina solo por dejar esa cosa, suficiente con hacer el té y buscar las hojas y raíces.

—Por eso no te preocupes, si vomitas te daré otra taza.

—Creo que mejor me lo trago, mi vomito sabrá mejor —Se quejo y JungKook riera, metiéndose a la cama se recostó a su lado cuando TaeHyung lo hizo también —¿Qué estas haciendo? —Pregunta, ya que el pelinegro solo le observaba en silencio.

—Solo pensaba que no quiero que crezcas —Dijo y TaeHyung frunciera el ceño abrazando más su almohada.

—¿Por qué?

—Tienes un límite de tiempo, y este avanza rápido. Quiero que se detenga… ¿Tienes un hechizo para eso?

—No… No tengo.

—Haz uno.

—No creo que sea posible algo así, pero si uno que me impida envejecer más…

—¿De verdad? —TaeHyung asintió.

—Aunque aún estoy buscando una manera, no hay un hechizo para eso… Y no se que costo tenga hacerlo. Ni que edad tenga cuando lo consiga —Río adolorido —Te imaginas, un anciano por la eternidad.

—No me importa si eres un anciano adolescente o adulto, quiero estar contigo más tiempo…

TaeHyung desvió la mirada sintiendo sus ojos cristalizados, le habían dado ganas de llorar, pero no quería hacerlo. No había ningún motivo para hacerlo... No es tan débil.

Quitándole la almohada, la tiró a un lado tomando su lugar, abrazando al Omega, dándoles carias en la espalda para calmarlo, reconfortadolo con su poder.

—Tranquilo... yo te cuidare —Murmuro JungKook, aferrándose al minino, TaeHyung oculto su cara en el pecho del minino, JungKook emite un calor agradable y muy agradable, le relaja.

Pasados unos minutos. JungKook seguía entre los brazos de TaeHyung a quien ya se le había calmado el dolor, pero estaba exageradamente cariñoso besándole las mejillas.

Ronroneando. El pelinegro solo se dejaba hacer por el omega sin dejar de darle las caricias en la espalda, pero aunque pareciera al revés por la personalidad del felino, lo cierto era que era el más afectuoso de los dos, le gusta dar abrazos y le gusta que lo abracen, le den besos y lo acaricien… Bueno. Solo TaeHyung, de lo contrario ya habrían terminado sin manos.

Así que, sería una descarada mentira decir que no está disfrutando de sobremanera ese momento al tener mimos,

Aunque ese dulce aroma del omega le hacía recordar a HanSung, no sabía si era el mismo, pero lo encontraba familiar, sus feromonas de celo. Concentrándose en TaeHyung lo abrazo más, con su colita  enroyada en el omega —Relajate —Pidio JungKook manteniendole quieto —Ya pasará —Murmuro. Cerrando los ojos, tarareo un canción mientras le acariciaba el cabello. Esperaba pudiera dormirse con eso.