::Gatito mimado:♱:KookV::

(Rumores -20)

Terminando de ponerse la sudadera, TaeHyung vio su reflejo en el espejo del baño, el peligris le había pedido que se bajara para que el minino dejara de seguirlo. JungKook le había prestado de su ropa mientras la silla se lava.

La ropa del alfa le queda grande, a comparación de él que es un sangre pura, el omega es pequeño a su lado, y delgado con una cintura pequeña. Su cabello húmedo goteaba un poco y las ojeras se notaban un poco. Por lo general no le importa su apariencia y nunca la cuida para no llamar la atención, pero en ese momento lo avergonzaba un poco que JungKook le viera así.

Suspirando bajo la mirada, es un desastre en todo los sentidos, emocional, física y socialmente.

Alzando las manos tocó su rostro, cansado y ojos tristes…El mismo rostro de siempre, pero aun así, seguía siendo lindo. Las monjas solían decir que la presencia del omega es melancólica .

Sonriendo, TaeHyung alejó sus manos  ciertamente recordaba sus momentos felices con melancolía, atesorándolos ya que eran pocos. Y en casi todos, estaba con JungKook… Ese años que compartió con el, fue el mejor en toda su vida, sentir el calor y cariño de alguien que genuinamente se preocupaba por él.

Un año de su compañía  le dio dos de soledad por su ausencia. Simplemente no tiene sentido, simplemente se aferraba a un lindo recuerdo. Vivió toda la vida sin él ¿Por qué le afecta tanto verlo ahora?

Esos sentimientos que nunca pudo expresar, vuelven a él como si fuera la primera vez, el alfa aún lo persigue en sus sueños, su voz su risa… incluso su olor. Tomando la camisa, la olfateo un poco sintiendo su esencia que le hacía temblar las piernas. Au que el minino se ve exactamente igual, no se siente lo mismo, ese aroma es su perdición.

La vez en que casi se besan vino a su mente. Los escalofríos que le daban al mantenerle la mirada.  Es como el fuego que necesita para mantenerse caliente en.

—Soy un degenerado —Murmuro alejándose un poco al ver que seguía oliéndolo, esa camina tienen sus feromonas impregnadas.

Viéndola un momento, mordió su labio inferior sintiéndose tentado.

—Solo un poco más —Murmuro volviendo a olerlo, queriendo grabarlo en su mente aún más. Quería recordarlo con claridad, no sabía si volvería a sentirlo otra vez al volver a la iglesia. Quiere un poco más.

Escuchando un toque en la puerta, el omega se sobresaltó dejando lo que hacía, con la culpa golpeándolo.

—TaeHyung…. —Le llamo la voz de JungKook, haciendo que el omega se sintiera expuesto ¿Lo descubrió? Haciendo una mueca, el omega noto que había liberado muchas feromonas ya que estaba feliz oliendo las del alfa.

—¿Si? —Respondió arreglándose la sudadera.

—La cena esta hecha ¿Quieres comer? —Pregunta y TaeHyung rascaba su nuca, ya había comido, pero el siempre tiene hambre.

—Si, gracias. En un momento salgo

—Esta bien, te espero en la cocina —Respondió Antes de marcharse.

—Ni siquiera me vio y muero de vergüenza —Se quejo con las mejillas rojas por la vergüenza. Arreglando un poco su cabello antes de salir. Andando por el pasillo llego a la cocina, donde estaba su plato servido en la isla. Vio a su alrededor, pero JungKook no estaba. YeonTan por otra parte comía en el plato que JungKook le compró.

Se sentía decepcionado, pero también aliviado. Suspirando se sentó en la silla de la mesa y comenzar a comer, la comida jamás se desprecia, la comida es sagrada.

Un suspiro se le escapo al comer —¿Acaso todos los JungKook saben cocinar tan bien? —Se pregunto a su mismo volviendo a comer.

—¿Qué quieres decir? —Pregunta JungKook al volver, ya que había ido a darle comida a aquellos dos, sobresaltando al omega y se le cayeran los palillos —Disculpa, no quería asustarte —Dijo JungKook al acercarse y recoger los palillos.

—Es-esta bien, yo me asustó fácil mente cuando —Dijo viendo a JungKook dejar los palillos los palillos el lavado y darle otros limpios.

Suspirando JungKook se sentó también a la mesa. Pensando en eso. TaeHyung siempre es molestado por demonios que le hablan o le aparecen de la nada, así que debía ser más cauteloso en como se acerca, el omega siempre está tenso. Y atento al menor ruido.

—Gracias —Dijo el omega, haciendo una pequeña reverencia con su cabeza antes de volver a comer con un poco de timidez.

JungKook solo apoyo su brazo en la mesa y apoyar su mentón en la palma de su mano.

—¿Qué pasa? —Pregunta TaeHyung con las mejillas rojas y JungKook negara.

—Memorizo tu rostro, ya que no se cuando volverás a desaparecer de la nada —Sonriendo TaeHyung bajo la mirada.

—Tampoco te pierdes de nada —Comentó volviendo a comer.

—¿Por qué te fuiste? —Pregunta y TaeHyung guardará silencio un momento —Después de lo que paso… Te fui a buscar a tu casa, pero no había nadie. En el instituto pregunte, pero nunca te transfirieron ni sacaron,  solo dejaste de asistir a clases.

—Pasaron muchas cosas… —Murmuro TaeHyung dejando los palillos y cruzarse brazos en la mesa —Mi mamá se mudo ya que decía que la ciudad estaba poseída, nos mudamos a Daegu  de nuevo y después de eso no volví a ir al escuela.

—¿Por qué? —Pregunta, recordando que el omega decía que quería ser maestro.

—Mi mamá se dio cuenta de la magia del señor gato en mi. Así que me encerró en el sótano durante días, me golpeaba y hacía que un cura me hiciera exorcismos a diario.

Dijo y JungKook hiciera una mueca, recordando lo loca que podía ser la madre del omega.

—Pero descuida. Me escapé de casa después de eso, así que he estado relativamente bien por mi cuenta.

—¿Cómo terminaste con la iglesia? —Pregunta JungKook sirviendo un poco de agua en un vaso antes de pasárselo al omega. Quien la acepto

—Tenían un comedor de beneficencia donde yo iba a pedir comida. Hasta que notaron mi presencia demoníaca y me volvieron a atrapar para hacerme exorcismos —Se quejo —Tomándola del agua —Pero hasta que los ayude con un demonio me dejaron en paz, me dieron trabajo como exorcista, pero me siguen vigilando. Me hacen quedarme en un convento,. Tampoco me quejo me dan comida y no me obligan a ir rezar como a otros exorcistas.

—¿Los demonios aún te molestan?

—Amn… A veces, pero Yeontan se los come… También tengo unos lentes q con ellos puestos no puedo verlos y esta pulsera —Levantó su mano mostrándosela —Hace que ellos no puedan sentirme si son débiles —Dijo y JungKook le agarrar de la muñeca, viendo mejor la pulsera, cosa que puso nervioso al omega.

—¿Cómo de la conseguiste? —Pregunta viendo la pulsera de oro, con una piedra roja de ojos de gato.

—Me la dio mi otro yo, es de magia comprimida como la de tu libro —Murmuro, viendo el rostro de JungKook, el corazón le latía como loco dentro de su pecho. Sintiendo con más intensidad sus feromonas.

Moviendo levemente sus dedos, TaeHyung los roso en la mano de JungKook. Haciendo que este levantara la mirada haciendo contacto visual con el omega. Fue como si algo se retorciera dentro del omega. Lo había extraño un poco

—Tae… —JungKook quizá hablar, pero el sonido insistente del timbre lo hizo callar. Maldiciendo por lo bajo, JungKook soltó la mano del omega y levantarse. Bajando la mirada, el omega sintió sus mejillas arder. Su corazón no podía calmarse.