CAPÍTULO 56

6.1K 989 48
                                    


Octubre de 2007

Querido ángel:

En el paso de los días sin recibir ninguna respuesta tuya, el amor que siento empieza a doler. Aun así, lo prefiero. Aunque sea en oleadas de sufrimiento, prefiero morir amándote que vivir vacío, sin sentimientos. Eres mi maravillosa flor que descubrí al borde de un horrible precipicio, en el que quiero seguir escalando al filo de la misma muerte con tal de solo tener la esperanza de que algún día dejes que te arranque y te lleve en mi pecho.

Cada noche sueño contigo y a veces, como tú, también sueño con Mateo. Me culpé durante toda su vida por mi incapacidad para amar... Una noche, una única noche, dormí con él cuando era bebé. Recuerdo que durante esas horas me sentí insensible, frío e incapaz de darle el amor que merecía... Mi amor, estuve tan ocupado pensando en cómo debería sentir que no tuve tiempo para sentir. Quizá mi temor de no sentir amor era infundado. Lo habría encontrado en mi corazón si no hubiera tenido tanto miedo de no encontrarlo... Mi niña, me has enseñado a amar. Creí que no podía. Creí que nadie merecía una roca de hielo ni como padre ni como amante. Has recobrado el correr de mi sangre y el palpitar de mi corazón. Me has hecho sentir humano.

Te amo.

P. D. Te mando otro trocito de partitura.



¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
HUNDIDA EN TU OSCURIDAD © (En físico)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora