Renn
Estoy sentado afuera, en el césped. Aún siento como mi cuerpo tiembla y mi corazón sigue acelerado. Y no voy a negar de que estoy conteniendo las ganas de llorar.
Si. Lo sé. Soy muy emocional.
Se sienta a mi lado.
- ¿Estás molesto conmigo? - me pregunta, rompiendo el silencio.
- ¿Molesto? Molesto se queda chico. - digo. - Honestamente, en estos momentos, te odio.
- Si me odiaras no estarías así.
Lo miro, tiene esa mirada divertida en su rostro.
- ¿¡Cómo es que estás tan tranquilo!?
- ¿Por que no habría de estarlo? Mis alumnos aprobaron su primer simulacro.
- ¡Nos han dado un susto de muerte!
- Aún así se organizaron, trabajaron en equipo, estuvieron de acuerdo.- dice. - Teníamos micrófonos por todo el bosque, no los escuchamos discutir ni una vez.
- ¡Creí que estabas muerto, maldito desgraciado! - le grito molesto.
- Son situaciones que pueden pasar en el trabajo, en la vida, tener la baja de algún compañero y aún así tener que seguir con la misión. - paso su brazo por encima de mis hombros y me acerca a él, abrazando mi cuello. - Estoy muy orgulloso de ti. Escucharte dar las ordenes me ha hecho muy feliz.
- No quieras endulzarme, hijo de puta. - me aparto de él.
Ríe. - Vamos adentro, que tú padre quiere hablarles.
- ¿Acaso quiere dar una charla de "como sobrevivir a tú primer ataque falso"?
Vuelve a reír. Nos paramos y volvemos a entrar a la cabaña.
Los seis nos sentamos uno al lado del otro, mientras ellos cinco están parados enfrente nuestro.
- Con honestidad, no les teníamos fe. - comienza a decir mi padre, que está parado en el centro, con sus brazos cruzados. Admiro tanto de él que pese a que ya paso los 60 y a simple vista podría ser un anciano, aún sigue teniendo esa presencia imponente y que infunde tanto respeto como temor. - Pero, nos han cerrado la boca, porque en verdad nos han sorprendido. Estamos muy felices con su despeño del día de hoy.
- ¿De quien fue la idea? - pregunta Evan.
- De Rocco, ¿de quien más? - digo con fastidio.
- Solo en situaciones de estar bajo mucha presión se refleja la verdad de las personas. - dice él. - Y ustedes seis no podrían haberlo hecho mejor. Mason y Natalie, quienes tienen trabajo de escritorio, cuando surgió un inconveniente no se quedaron a esperar a que ustedes vinieran, sino que agarraron sus armas y defendieron el fuerte. Ustedes cuatro vieron una ventaja y la usaron de maravilla. También supieron usar lo que tenían, investigaron la cajuela de Hayes por si había algo que les sirviera.
- Usaron los chalecos antibalas, que son cruciales. - dice Jude. - Pueden marcar una diferencia significativa.
- Muy bien Natalie que vino preparada para estar en el medio del bosque, sin señal. - le dice mi padre. - Eso es importante, y creo que lo dejamos en claro al dejarles todo lo que necesitaban en las cajuelas de los autos. Siempre tienen que estar preparados para un posible ataque. Nunca salgan sin nada. Serán parte de un clan y no de cualquiera, sino del mejor de Nueva York. Siempre hay enemigos buscando una grieta de la cual entrar. No permitan que los sorprendan. Y tienen que estar alerta en caso de que un compañero los necesite. No importa el día, ni la hora, ni siquiera si hacía 20 minutos se habían gritado de todo. SIEMPRE tienen que estar para su equipo.
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Atrapado Contigo (Mafia Marshall II)
Novela Juvenil*SPOILERS "NO PUEDES COMPRAR MI AMOR"* Renn Marshall es un joven arrogante, millonario, egocéntrico y malcriado. Su padre es la cabeza del clan más importante de Nueva York. Él cree tenerlo todo y ser feliz estando de fiesta en fiesta, viajando con...