Pequeñas lecciones.

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  Mi papi no estaba muy contento al tener que venirnos en el auto con la abuela, la tía Lucy y su sumiso, y los gemelos.

  Mi papi los quiere, pero se harta muy rápido y quiere tiempo a solas, cosa que es difícil de controlar cuando todos quieren tu atención.

  Además de que él es un hombre muy simple. Adoro ir en silencioso, o comentando pocas cosas, o escuchando audiolibros o música.

  A mi me tocó en los asientos de atrás del todo, junto a Shawn.

  Era un chico muy encantador he de decir. Saber que ha pasado todo eso, solo me entristece, pero sin duda es muy educado y amable.

  Tiene unos ojos azules oscuros y un cabello negro azabache. Y aunque parece muy flaco, tiene bastante fuerza, tanta así para poder levantar tres maletas al mismo tiempo.

       —Tu tía Lucy siempre habla de lo impresionante que eres—dice él en tono bajito, y yo me sonrojo.

  Odio que hablen de esto. Ni siquiera me gusta la palabra.

       —Dice que sabes hablar varios idiomas, tocas instrumentos, eres muy buena con los números, que haz pintado cuadros, lees clásicos, haces natación, ¿Hay algo que me falte?—dice dudoso a lo que yo a todo esto ya estaba muerta de vergüenza como para responder.
       —Yo...—digo nerviosa.
       —Lo siento, no quería ponerte incómoda—dice tímido a lo que yo ahora me siento mal. Ya le cuesta al pobre sacar un tema de conversación y yo le corto así.

  Mi tía Lucy se voltea de donde ella estaba hablando con mi padre, abuela y mis tíos.

       —No le hagas caso, Shawn, ella odia hablar de este tipo de cosas. Hasta odia que diga que es superdotada.

  Yo volteo los ojos. Ya estamos...

       —¡No lo soy!—digo rápidamente sintiendo mis mejillas rojas como un tomate.
       —267x89—dice mi tío Zack.
       — 23. 763—digo al segundo.
       —¿Ves, Shawn?—dice mi otro tío.
       —Eso no prueba nada—digo en voz baja.
       —Divídelo entre 33—dice ahora mi tía Lucy.
       —720—digo al pensar un poco.
       —Con...—me pide que continúe.
       —0 9 0 9 0 9 0 9—digo en voz baja.
       —¡Eres una genia!—exclama ahora Shawn emocionado.
       —¿Pueden parar ya?—pido ya con las mejillas más que rojas.
       —Si admites que lo eres—dice Mark mirándome con una sonrisa.

  Yo me quedo en silencio. No me gusta pensar que soy superior a alguien por saber mucho. Me gusta aprender, eso es todo.

       —Déjenla ya en paz—dice mi papi y yo se lo agradezco internamente.

××××××

  Las navidades pasaron bastante rápido. Lo celebramos en casa de la abuela. Cenamos y en la mañana abrimos regalos. Pude conocer a los amos y sumisos de mis otros tíos y todos fueron sumamente amables.

  Mi tía Claire con su amo Justin, Mark con su amo y Zack con su sumiso.

  Justin ya tiene años con nosotros, lleva siendo el amo/novio de mi tía Claire mucho tiempo, y aunque al principio no me convencía porque era sumamente frío conmigo, los últimos años ha sido diferente y mucho más divertido conmigo.

  Y así tras las fiestas,  me tocaba pasar dos días con la tía Lucy.

  Mis tíos "le exigen" a mi papi que al menos me dejen compartir con ellos dos días a solas, a lo que mi papi aceptó sin duda. Yo también estaba súper entusiasmada las primeras veces que lo hicimos, y ahora que estoy algo más grande lo disfruto más.

  Este año decidí que les iba a pintar un cuadro en mi estadía allí. Se me da bastante bien realizar retratos, así que le hice un retrato a cada uno. Me hizo muy feliz que a todos les gustasen, ¿Quién lo diría? Trabajé en mis vacaciones.

  Por lo que al volver siempre me quedo devastada.

       —Tía Lucy...—le murmuro a la oreja sollozando por mi partida.

  Ella acaricia mi espalda suavemente tratando de calmarme.

       —Cariño...—me dice ella de vuelta—Nos volveremos a ver el año que viene, ya lo sabes.

  Yo asiento abrazándola.

       —No es suficiente...—le digo con la voz cortada.
       —Lo sé cariño, pero es lo que tenemos ahora.

  Yo asiento y ella tras dejarme en el suelo y darme un montón de besos, alguien me carga por detrás y me suelta para luego cogerme un par de segundos después, haciendo que suelte una carcajada, es Justin.

       —¡Tío Justin!—digo riendo rápido, a lo que en poco me arrepiento, ¿Tío? Oh no, volverá a ser el mismo frío de hace años, ¿Por qué dije eso?—. Lo siento... Quise decir...
       —¡Soy el tío Justin!—dice emocionado dándome un abrazo.

  ¿Le gustó?

   Y así tras despedirnos de todos al menos unas doce veces más, entramos a seguridad.

  Al acabar con inmigración y seguridad que ya estamos en el jet, mi papi me acurruca en su pecho consolandome.

       —Princesa—me dice en voz bajita acariciándome la espalda.
       —Papi... Esto cada vez es más difícil...—le digo aún con lágrimas.
       —Lo sé cariñito, pero la pasaste bien ¿No?

  Yo asiento con la cabeza.

       —Eso es lo que importa tesoro.

  Para cuando aterrizamos ya estaba más calmada y debo admitir que más dormida que despierta, por lo que mi papi fue el que me llevó hasta el auto.

××××××××

Un capítulo algo triste, pero espero les esté gustando la historia :)

Gracias por todo el apoyo que me dan, no sé ni cómo agradecerles 😭😭😭😭

Lili 🦋✨