NEXT LEVEL [Tokyo Revengers]

17

Todos estábamos, bañados, cambiados, peinados, perfumados, y bien bonitos.

—Bonitos y gorditos muchachos. —Les dije y las chicas rieron. —¿Esos son los gemelos?

—Si, ¿Por qué? —Preguntó Emma.

—Dejen me les presento otra vez. —Ellas rieron divertidas. —Hola guapos, ¿A qué hora salen por el pan?

—¡Draken, alguien le dio droga a Moe! —Exclamó divertido Smiley mientras Angry se ponía colorado de vergüenza.

—Hijode... ¡No es cierto! ¡Era broma! Los voy a patear, me pongo romántica y se ponen mamones. —Gruñí.

—Ven aquí preciosa. —Ambos me abrazaron y besaron mis mejillas.

Me puse rojarojarojaroja hasta el cuello y orejas, ellos se rieron y se fueron.

—Uuuyyy, se chiveó. —Dijo Hina riéndose de mi.

—¡No me miren, soy un monstruo rojo! —Lloriqueé tapándome la cara.

—¿A ti qué demonios te pasa? —Gruñó Draken quitándome las manos de la cara. —¿Por qué pareces tomate?

—Los gemelos la besaron. —Le dijo Hina burlona.

—¿¡Ah!?

—Ahora que Moe se baña ya consigue pretendientes. —Dijo una chistosa Emma.

—¡Los voy a matar! —Exclamó Draken yendo a buscar a los gemelos.

—¿Y esa guapa? —Mitsuya y Mikey se acercaron.

—¿A dónde tan peinada? —Sonrió Mikey.

—No creí que ese perfume atrapa hombres serviría. —Les dije a las chicas y ellas se soltaron a reír más, casi casi tirándose al suelo.

Mitsuya se acercó mucho a mi y yo me asusté, pero antes de lograr darle su respectivo puñetazo él sujetó mi mano y olió mi muñeca.

—Me gusta ese perfume. —Dijo.

—Mhm, huele rico. —Ese fue Mikey desde atrás de mi, oliendo mi cuello.

—¡Abranse a la...! ¡Drakeeeeennn! —Exclamé saltando sobre él quien llevaba a los gemelos de la oreja.

—¿Qué te...? ¿Y ese olor?

—Me bañé. —Le dije en un puchero.

—Ve a bañarte de nuevo. —Dijo y yo asentí.

—¡No! —Exclamaron los chicos.

—¡Deja que por lo menos todo el día lleve ese olor! —Pidió Mitsuya.

—¡Y ya aunque después siga oliendo a salsa Valentina! —Lloriqueó Mikey.

—¿Huelo a salsa Valentina?

✨✨✨✨

Luego se ese largo y extraño pensamiento, me dieron escalofríos y dejé el perfume en el tocador, pero al poco rato me perfumé de pies a cabeza. 

Después salí de la que es mi habitación y fui con las chicas. Nos habían separado en un pasillo eran las chicas y en el otro pasillo los chicos.

—Wow, Moe, no creí que algún día te vería con vestido. —Dijo Hina. —Te ves increíble.

—Lo sé. —Hice una mini sesión de modelaje y ellas simulaban ser las paparazzis.