30

4.5K 711 59
                                    

Después de unas horas de parto, finalmente se encontraban en brazos de sus padres, Maya y Moon Kawata.

La familia Kawata estuvo presente, en los pasillos, se habían emocionado cuando las pequeñas dieron sus primeros llantos.

Pero Moe, justo como la primera vez se sintió triste de que su hermano no pudiera estar con ella. Aunque sus padres si estuvieron, no fue lo mismo.

—¿Otras pelusas? No puede ser. —Exclamó Soyeon quitándole de los brazos de Smiley a la mayor de las niñas. —¿Y ella quien es?

—Si abre los ojos es Maya. Y si no es Moon. —Dijo riendo Moe. 

—¿Y en donde fuiste a echar a mi bebé Bomi? —Preguntó Niell cargando a otra de las niñas, quién aparentemente era Maya ya que al abrir sus ojos eran idénticos a los de Moe.

—Ouh, se quedó con tus amigos. —Dijo Smiley. —Le diré a Souya que vaya por ella.

°°°

El Kawata menor llegó al departamento de Naoto, golpeó la puerta y tras abrirla el dueño, noto un apeste en el aire.

—Ugh, ¿Quién se pudrió? —Cuestionó.

—Tu sobrina. —Dijo Takemichi dándole a la pequeña, con un pañal mal amarrado.

—Aquí está su bolsa. —Dijo Naoto con un cubrebocas y guantes dándole la pañalera.

—Hasta para eso son inútiles. —Gruñó abriéndose paso para ir a los sillones.

Extendió una manta sobre el sillón y acostó suavemente a su sobrina, saco un pañal nuevo y todo lo necesario para cambiarla.

—Hijos de su madre, ni la limpiaron bien, si se roza vendré a darles sus golpes. —Gruñó Angry limpiando correctamente a su sobrina.

—Es que no sabíamos cómo hacerlo. —Trató de defenderse Takemichi.

—Pues vean como se hace, y cuando tengan a sus propios hijos no hagan burradas. —Bramó.

Cuando Bomi estuvo limpia, le dio el pañal a Naoto, pero como no tenía nada no reprochó.

Angry le puso otra ropa a su sobrina y jugó con ella un rato.

—Bueno, me largo, mis sobrinas ya nacieron y perdí tiempo aquí. —Dijo cargando la pañalera en su hombro y a la niña la dejó en el suelo para que siguiera aprendiendo a caminar. —Hasta luego.

Al llegar al auto del peliazul subió a su sobrina en su sillita y se fueron de ahí hacia el hospital.

Una vez en el hospital ambos entraron, los abuelos de Bomi fueron hacia ella arrebatandosela a Angry.

—¿Y las gemelas? —Preguntó el peliazul.

—En la incubadora, puedes ir a verlas, que te acompañe tu hermano.

Ambos gemelos fueron a ver a las bebés, ahí estaban, siendo unas pelusas más en la familia.

—¿Crecerán igual de fuertes que nosotros? —Preguntó Angry.

—Eso espero, y si no, tendrán a su padre y tío para defenderlas, y por si no fuera poco tendrán una madre muy valiente y fuerte. —Dijo con su ya característica sonrisa.

—¿Y Moe?

—Está durmiendo, se cansó mucho y casi le hacen cesárea porque ya no aguantaba el dolor. —Murmuró.

—Felicidades por la linda familia que tienes hermano. —Le dio una leve sonrisa mientras palmeaba la espalda del otro Kawata.

—Me hubiera gustado que Draken estuviera aquí, ella no lo dice pero sé que esperaba eso. Ojalá puedan quitarle la pena de muerte al menos.

—Estoy seguro que algún día él podrá jugar con sus sobrinas como yo.

—Esperemos que si.

NEXT LEVEL [Tokyo Revengers]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora