36. ¿DE DÓNDE VIENEN LOS BEBES? 《SCOUNDRESS》

528 18 11
                                    

Era una soleada mañana, cuando interrumpieron toda la paz y tranquilidad de Han de disfrutar de su único día libre, un ruido familiar lo regreso a la realidad. Resignado consciente de que su preciado silencio había acabado tan rápido.

¡Papá! -grito una pequeña voz.

El pequeño Ben Solo se hizo presente en la sala, con su pelo negro revuelto, de haber estado jugando por largo tiempo con sus amigos. Aunque eso no era lo que llamaba la atención de Han, sino la expresión de inquietud y confusión con la que había llegado a la casa.

¿Qué ocurre? -pregunto de forma grave, pero sin ser desagradable.

Ben dudó un momento, pero finalmente se acercó a su padre y le hizo una señal para que se agachara y así poder hablarle al oído, Han alzó la ceja. Sin entender, pero accedió a la petición de su único hijo para que le contara aquello tan importante.

Estaba jugando con Hux y cuando volvíamos a casa comento que tendría una hermanita pronto -le dijo el pequeño en forma confidencial.

¿Y qué tiene de extraño? Es algo normal que los padres quieran tener más hijos -dijo Han alzado una ceja- No me digas que eso tenía tan intrigado, Ben -comento mientras revolvía sus cabellos negros al pequeño.

Papá, ¿De dónde vienen los bebes? -pregunto Ben dejando a Han en blanco.

Oh, mierda. Esta conversación no... No ahora -pensó Han preocupado.

Han pensaba en la posibilidad de explicar de la forma más clara y precisa que todo se debía a un proceso entre un hombre y una mujer. Maldición, ¿Dónde estaba Leia cuando era necesario? Era mucho mejor que él con las palabras y seguramente hallaría la forma de darle una buena respuesta al niño, sin llegar a traumatizarlo.

Verás, Ben es algo bastante simple... -intentando decir nervioso Han- Entenderás perfectamente cuando sea su debido momento

¡Papá! -hablo haciendo puchero el pequeño no iba a ceder ante ese intento de dar por terminado el tema- ¡No me estas contestando! Yo quiero saber de dónde vengo

¿Qué? -dijo exaltado Han y se volvió hacia él- Esto se está volviendo más difícil de lo que creí -pensó sudando frio el hombre- ¿Por qué quieres saber de dónde vienen los bebes?

Quiero un hermanito -contesto Ben dejando más pálido a Han- Sería divertido tener alguien con quien jugar, pero quiero un hermanito, porque las niñas son tontas y molestas -arrugo la nariz y frunció el ceño levemente- Excepto mamá

No depende de ti... -masculló Han entre dientes, pensando en una respuesta para aclarar sus dudas y que no volviera a molestar con el tema por lo menos dentro de los próximo cinco años más.

Mmm, eso significa que no puedo escoger, entonces, ¿Cómo va llegar él bebe? -preguntó él pequeño.

Verás... -intentando decir- Vienes de la fábrica de bebés -dijo finalmente, de forma cortante y con toda la seguridad del mundo.

¡¿Fabrica de bebés!? -repitió Ben.

Hay hacen niños para los padres que desean uno y cuando está listo, lo van a buscar y lo llevan a casa -dijo Han llevándose una mano al rostro. Era lo más estúpido que había dicho en toda su vida.

¿Yo vine de ahí también? -pregunto el pequeño.

Ciertamente. Y la fábrica queda muy, pero muy lejos, así que no podemos visitarla de nuevo -aclaró, antes de que su hijo le preguntara aquella posibilidad- Eso resuelve tu duda, ¿Ben?

¡Si! -fue la efusiva respuesta afirmativa del niño, pero luego una nueva expresión de duda lleno su rostro- Y papá, ¿Qué es el sexo?

¿Qué? -tanto el padre como el hijo se voltearon hacia la dueña de la voz que había pronunciado aquellas palabras. Leia estaba recargada en el lindel de la puerta, con el pelo algo húmedo después de la ducha- Ben ¿Dónde escuchaste eso?

Del tío Luke, lo escuche que se lo comentaba a su amigo Erza -contesto inocentemente Ben.

Leia tenía una sonrisa, pero Han veía la vena resaltar en su frente a Luke y Erza les esperaba a ambos una buena golpiza de Leia.

El sexo es cuando es cuando los papas y mamas van piden a la fábrica que le traigan un bebe -dijo Leia con una sonrisa agachándose para quedar a la altura de Ben y le dio un beso en la frente- Ya no tienes más dudas, ¿O sí? Todo entendido

Gracias papa y mama -digo Ben sonriendo.

Ahora ve a lavarte las manos, mientras preparo el almuerzo -dijo Leia y Ben se dio la vuelta para ir al baño.

Fue una conversación interesante -comentó Han.

Ah -afirmo Leia- Voy a matar a esos dos cuando los vea para que la próxima cuiden sus palabras en frente de Ben

Leia caminó hacia la cocina, no sin antes dirigirle una última mirada de indignación a Han, quien sólo esbozó una sonrisa y entornó los ojos, pero no pudo evitar sonreír también. Verdaderamente, amaba a su familia.

Días después

La pareja se encontraba en su dormitorio acostados en su cama listos para dormir cuando escucharon pequeños golpes que daban en la puerta de la habitación.

Mamá, papá, ¿Puedo pasar? ¡Tengo otra pregunta que hacer! -dijo Ben desde otro lado de la puerta.

¿Qué querrá ahora? -mascullo Han, con gesto de resignación. Leia suspiro y se levantó de la cama, colocándose una bata y abriéndole la puerta a su hijo.

¿Qué ocurre, cariño? -preguntó ella con dulzura.

El niño ingreso a la habitación, con la misma expresión de confusión que hace algunos días.

¿Qué es un orgasmo? -preguntó el pequeño Ben.

A Leia casi se le desencaja la mandíbula y Han comenzó a toser descontroladamente.

Es que escuche decir a la tía Ahsoka a la tía Mara que cuando llegas al orgasmo junto a tu pareja es lo mejor ¿Pero a que se refiere? ¿Qué es un orgasmo? ¿Qué es? -preguntó Ben inocentemente.

Han gruño y Leia se llevó las manos a la cara con desesperación.

¿Te he hablado de las abejas y las flores? -pregunto Leia.

Esa noche para ambos padres sería una de las noches más largas de su vida.

Star Wars♡StoriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora