10. ...cuz some days stay gold forever.

579 11 0
                                    

Capítulo 10.

- ¿qué vamos a cantar? – le preguntó Mara a Empar en nuestro idioma. Yo me asomé para seguir la conversación y vi como los chicos se quedaban con cara de incomprensión. Max que estaba a mi lado, hizo cara de concentración total y sin querer se me escapó un risilla, que pasó desapercibida.

- ¿cómo quieres que lo sepa? – le contestó tocándose nerviosa las trenzas.

- ¿Qué están diciendo? – oí a Nathan preguntarle extrañado a Jay.

- Yo que sé, no entiendo el español – Jay se encogió de hombros y siguió observando con detenimiento a Empar y Mara que seguían hablando de lo que iba a pasar.

- Chicos, canción de Gold forever – de repente todos se pusieron a rebuscar entre los papeles que habían en el atril y nos dieron uno a cada una. Genial, no comprendo nada – chicas, lo que os dije antes ¿vale?… listos… allá va. – sonó un pitido y la música comenzó a sonar en mis cascos. Max me indicaba las línea que tenía que seguir, cosa que le agradecí de corazón.

Tom comenzó la canción con una voz perfecta, luego el chico que estaba a mi lado continuó de la misma forma. Nathan le siguió con voz dulce y grave, luego Max volvió a cantar… estaba claro que cantar, iba a hacerlo porque no me quedaba otra. Todas estuvimos atentas, entonando y siguiendo nuestras líneas. La canción acabó, las cinco teníamos cara de pánico.

- Ahora os toca a vosotras – la voz de Martin me sobresaltó. – cantar, dejaros llevar y todo irá perfecto – nos alentó.

- ¿ahora tampoco estás nerviosa, no? – me volvió a preguntar Max mirándome de reojo. Esta vez asentí, con miedo de hacer el ridículo… las pocas veces que había cantado delante de alguien había sido con ellas y bueno…digamos que a eso no se le podía llamar cantar.

De repente Max me agarró la mano izquierda y la apretó suavemente, dándome a entender que no tenía por qué estar nerviosa. No miento si digo que este gesto logró calmarme. El pitido se oyó otra vez, me coloqué los cascos corriendo y me adentré en la canción. Estaba oyendo la mezcla entre la voz de Tom y Mara… no sonaba nada mal, pero tuve que concentrarme rápidamente cuando vi que tenía que cantar. Lo hice. Y una vez hecho ya no sentía ningún pudor, Max seguía agarrándome de la mano y mirándome a los ojos cuando nos tocaba cantar. Esther y Siva hicieron su solo, al ser tan altos los dos me dio la impresión de que encajaban bastante bien. Siva tenía su brazo por encima de los hombros de ella, y de vez en cuando la zarandeaba levemente, provocando que sonriera. Luego Zaira y Nathan cantaron su trozo, sus voces contrastaban perfectamente… pero no pegaban ni con cola. Luego les tocó a Jay y Empar que estaban agarrados de la cintura y moviendo sus brazos de forma rara, cual pájaro volando por el cielo.

Mientras Mara y Tom, que estaban agarrados de ambas manos, cantaban el puente de la canción, los demás nos pusimos a bailar… Max me dio una vuelta que hizo que recordara lo que había comido hace pocos minutos. Por suerte para el final de la canción, en el cual teníamos que cantar, no recordaba nada y pude finalizarla sin problemas. Todos aplaudieron contentos, y cada uno abrazó a su respectiva compañera. Max me envolvió en sus fuertes brazos y percibí su aroma.

- Mmm… hueles genial – le comenté deshaciendo el abrazo.

- Vaya, gracias – dijo riéndose – ¡tú tampoco hueles nada mal!

- Oh, gracias… supongo – le miré desconcertada pero riéndome igualmente.

- Chicos, lo habéis hecho de fábula – nos felicitó Martin entrando en la cabina. - ¿es la primera vez que hacéis esto, de verdad?

- Sí, que yo sepa, sí – contestó Mara asintiendo con fuerza.

- Pues lo habéis hecho muy bien… - se quedó pensativo. – se os veía muy cómodas.

Gold Forever L5F. [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora