Capítulo 38.
- Despierta bella durmiente.
- No está durmiendo… ¡mira como le tiembla el párpado!
- Va… - me cogieron de los dos brazos hacia delante.
- Que no…
- ¿Te quedas en el avión? – Abrí los ojos y me levanté del asiento mientras les gruñía.
- ¡Venga chicas! – Nos gritó el profesor desde la salida. Avanzamos hacia él y nos reunimos con los demás. A continuación fuimos a por las maletas… esto me recordaba tanto a París que miraba hacia todas partes por si los veía o algo. Empiezo a pensar que estoy obsesionada.
- No están…
- Tú calla, que no sé qué pintáis aquí… - la decisión que habían tomado Mara y Empar de venirse con nosotras había sido estúpida. A ver… tienen trabajo y vida fuera de las barreras del instituto… ¿Qué se suponía que hacían aquí? Ni la menor idea. – No sé ni qué pinto yo aquí…
- Yo te lo digo. Cantar… cantar como nunca lo has hecho – Josep se fue aproximando a mí con mirada amenazante… esa que suele poner de broma – y como no lo hagas, vamos… te reviento… pim pam… - imitó como si le pegara a alguien. Cuando acabó con su actuación no pude evitar reírme como una loca, al igual que las chicas. Por favor, este hombre es genial.
Más tarde, pasamos lista como por décima vez, ya que venían hasta niños de primero de Eso, esos que se confunden con mochilas andantes, y nos metimos en el autobús que nos llevaría al hotel.
No voy a mentir, siempre había querido venir a esta ciudad. Por algún motivo siempre me ha atraído. Miraba con atención hacia todo lo que mi vista podía alcanzar. El cielo estaba encapotado, como no, y veía a la gente con grandes abrigos por la calle. Haría un frío que pela. Diez minutos después anunciaron que habíamos llegado a nuestro destino. Nada más cogimos nuestras pertenencias del compartimiento inferior del autobús no pude creer lo que estaba viendo.
Una gran masa de gente aglomerada en frente del hotel. Flases. Gritos. No.
- No están aquí – me susurró Empar pasando por mi lado. La miré aún más confusa. ¿Cómo…? Da igual. Haciéndonos paso, como pudimos, entramos al hall del hotel. A quien se le ocurre… está en pleno centro, tenía pinta de caro y… sí, lo era. Como todo en esta ciudad, supongo. Nos dieron las llaves de cada habitación.
- Es pura coincidencia, tranquila…
- ¿Lo estáis haciendo a posta para reíros de mí? – Esto no podía ser coincidencia. El mismo número de habitación que en París. Esto está amañado. Dejamos las cosas tiradas por ahí mientras decidíamos quién dormía con quién.
- Las habitaciones son de tres – informó el profesor – apañáosla como queráis.
- ¿Nos ponemos como en París? – Por lo menos Mara sí que lo estaba haciendo a posta.
- Creo que esta vez será mejor que yo vaya con vosotras dos – sugirió Esther. Ellas aceptaron y como nadie reclamó una cama, Zaira y yo nos quedaríamos con una de más. Entramos y nos tiramos directamente en el pequeño sofá. Era bastante cómodo. Respecto a la habitación era bonita, espaciosa. Con un baño… nada que ver con la de París. Esta era más pequeña, solo estaban las camas, una tele y el anterior nombrado. Nada de terrazas ni barras americana ni cosas por el estilo. Todo pequeño, y eso sí, acogedor a más no poder.
…
![](https://img.wattpad.com/cover/3875244-288-k665250.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Gold Forever L5F. [Editando]
Hayran KurguCristina, Empar, Zaira, Esther y Mara. Amigas desde siempre y con vidas absolutamente normales. Nunca soñaron con algo más que cumplir unas expectativas comunes. Nunca pensaron que sus vidas pudiesen cambiar de tal forma. Nunca vieron que ellos eran...