Gold Forever L5F. [Editando]

31. Can't sleep.

Capítulo 31.

Esther POV.

El camino al hotel fue raro. Más que eso diría yo. Mara le pegaba miradas asesinas a Zaira. Ésta me miraba a mí y yo las evitaba. Y entre tanto Empar se aclaraba la garganta para que todas parásemos.

Una vez llegamos subimos a las habitaciones, yo con más prisa de la habitual, y entramos a mi habitación. Lo más raro de todo esto es que Zaira entró también. Empar y yo recorrimos precipitadamente el pequeño pasillo y luego nuestras caras se desencuadraron totalmente.

- A ver… ¿Qué coño haces con las maletas? - preguntó mi precipitada amiga con tono irritado.

- Pues… que me voy - respondió la que tenía agarradas sus dos maletas de color azul eléctrico.

- Venga… deja de decir tonterías… - dije mientras avanzaba hacia ella. Chasqueé mi lengua al ver como ella retrocedía para que no la tocásemos. Odio ver cómo las cosas se nos van de las manos.

- No seas infantil, hazle caso - agregó Mara haciendo lo mismo que yo.

- ¿por qué te quieres ir? - preguntó Zaira secamente. Nos giramos sorprendidas. Sus facciones eran inescrutables. No podíamos saber que se proponía.

- No me vale la pena estar aquí… así.

- Te lo buscaste tú solita - respondió ella.

- Lo sé - de repente cogió las maletas y avanzó, pero Mara y yo le impedimos el paso. Rodó los ojos a la vez que gruñía.

- No lo hagas - le rogué cogiéndole una de las maletas - te arrepentirás de hacerlo, después.

- Vosotras lo habéis querido… - Empar nos sorprendió arrastrándonos a todas a los sofás. - Reunión familiar - anunció mientras nos posicionaba. Mara y yo estábamos en en el sofá grande mientras que las otras dos estaban en el más pequeño. - A ver, somos una puta familia y paso de ver esto - las señaló y vimos sus caras de asco y desprecio. Sobretodo la de Zaira. - Así que venga ¿Quién empieza? - Nos miramos unas a otras. En este aspecto sí que parecíamos crías.

- Yo - respondió al rato la voz de la que tenía al lado. - Os cuento la situación. Zaira está con Nathan. Nathan la engaña. Ella lo manda a tomar aire y se deprime, una vez más. Él me pide consejo para recuperarla. Le digo que se gane tu perdón - miró a Zaira- y que te diese una oportunidad para conocerte - miró a Cristina - Tú y él os lleváis mal. Te sube al escenario. Discutís y luego os liáis.

- Buen resumen… - Aplaudió Zaira desganada.

- Sigo. Cris se niega a decirte nada porque tiene miedo. La convenzo. Te lo dice. Os enfadáis. No os habláis en días. Ambas estáis mal. Y hoy te lías con Nathan. De nuevo. - Los ojos de Cristina se abrieron muchísimo. Alucinaba.

- ¿Qué? - preguntó incrédula. Todas asentimos. Zaira seguía sin expresión alguna en su cara. - ¿Has vuelto con él?

- ¿Te importa mucho? - contestó de golpe con mirada amenazante - Claro que sí… - acabó con una mueca de molestia en su cara.

- Bueno… ahora que lo sabemos todo, gracias Mara, necesitamos soluciones para arreglar esto - explicó Empar.

- Yo propongo que olvidéis lo qué ha pasado - dije cruzándome de piernas - Ella se arrepintió del beso y tú ahora mismo estás siendo demasiado cabezota.

- Exacto. Mirad, hacer una promesa - propuso Mara mientras las demás se quedaban con cara de interrogantes - No os meteréis en la vida amorosa de la otra. Y con eso quiero decir a controlar los impulsos tan raros que alguna tiene… - miró fijamente a Cristina.