Gold Forever L5F. [Editando]

35. I love you but goodbye.

Capítulo 35 ~Final París~

Cristina POV

A mitad mañana vinieron las demás. Llevaba demasiadas horas aquí dentro y me estaba asfixiando. LLegaron con unas caras impresionantes.

- ¿Y esas caras? - preguntó Empar.

- Los chicos no se han despedido de nosotras - respondió Mara - sabemos que se han ido por twitter, sino…

Quise contarles que Tom había estado aquí, pero Empar y yo nos callamos. Después de un rato el médico nos dijo que podíamos irnos.

                                                                                               …

- Es que no entiendo porque ni siquiera responden - Esther agitó su móvil con fuerza.

- No es culpa del móvil - le paré - tranquilizaros de una vez… - Entre el ambiente caldeado del coche y el dolor de cabeza que me estaba viniendo… solo quería salir de aquí ya. Aparcamos y entramos por el hall. La chica de recepción, parecía ya nuestra amiga, llamó nuestra atención. Les dio un papelito, como el que Tom me había dado antes, a cada una. Subimos por el ascensor y me pareció raro que ninguna la hubiese abierto aún. Más me extrañé ya que en las manos de Empar habían dos papeles…

- ¿Las vais a leer? - preguntó Mara mirando insegura a todas partes. Empar salió del ascensor y nos metió a todas en nuestra habitación. Nos sentamos en los sofás y ella se quedó de pie. Cogió uno de los dos papeles y lo abrió. - ¿Qué pone? - después de un rato nos miró y fue pasando de mano en mano. Llegó a las mías un poco después. Básicamente me impactó el contenido. Era de los chicos, de los cinco. Era una carta de despedida. Nos explicaban las razones por las que habían decidido irse sin vernos, a parte de mí, las razones por las que nos recordarían y por las que nos echarían de menos. Al final del todo decían que el contacto se podría mantener por las redes sociales y whatsapp. No sabía como tomarme aquello. Por una parte me daba ganas de darles unas buenas hostias a todos, pero por otra de dármelas a mí. En ese momento es cuando por mi cabeza pasaron los típicos pensamientos de: “deberías haberles escuchado, haber aceptado sus disculpas” Y ahora mismo no me podía sentir más bipolar.

Luego todas se pusieron a leer las que se suponían que eran personales. Empar sonreía como una niña pequeña y se tocaba una trencita. Mara estaba con aspecto frágil, en cualquier momento se convertiría en una cascada. Esther también sonreía y tenía lágrimas en sus ojos. Zaira se mordía el nudillo de su dedo índice a la vez que ponía caras raras. Y finalmente yo… no quería leerla. Si lo hacía me sentiría peor de lo que me siento ahora. Así que ahí estaba yo, observando aquel panorama que entristecía tanto.

- ¿No lees la tuya? - Quise responder a Zaira, pero solo negué. Sin embargo les pregunté qué ponía en las suyas - Nathan me ha dejado. Bueno… en verdad nunca habíamos empezado nada, pero dice que somos amigos con derecho a roce. - Le miré extrañada, como el resto. - Ya, es Nathan… ¿qué esperabais? A parte me pide perdón por todo. Y a ti también - me señaló. Me señalé incrédula, pero lo dejé pasar.

- A mí Max, Nathan y Jay…

- ¿Los tres? - preguntamos las demás al mismo tiempo.

- Sí… - Luego se puso a reír - Yo he sido la única que no ha tenido nada con ninguno - nos miramos extrañadas. Todo había apuntado a que ella y Max se llevaban algo… pero bueno… - Muy resumido, dicen lo especial que soy y que no me olvidarán nunca. - Todas sonreímos sin darnos cuenta.

- Jay me dice que… son muchas las cosas que ha sentido y vivido en tan pocos días. Que no quiere olvidarme y tampoco quiere que esto acabe - una lágrima se derramo por su cara - Pero que a partir de ahora cada uno debería hacer su camino y… - sollozó, limpiándose las lágrimas con su manga - aún así se empeña en intentarlo - una pequeña sonrisa se dibujó en su cara - Lo vamos a intentar.