Hace ya unos días que les pregunté qué historia de acuerdo a la época quisieran que hiciera. En la encuesta había tres opciones: Siete Corazones Los Carcamanes (leyenda mexicana) El Árbol del Vampiro (leyenda mexicana)
Tal vez sepan (o no) que ganó “Siete Corazones”, pero por si alguien se quedó con ganas de saber las otras leyendas decidí contarlas aquí. La primera será “Los Carcamanes”.
Amor, locura, rencor, celos, rabia, engaño, asesinato. Sin han leído mis historias Me Enamoré De “El Diablo” o La Llamada, estos temas no les serán desconocidos y es que, muchas leyendas mexicanas tienen base a esos temas y México está plagado de leyendas.
Para situarnos en el relato, nos debemos ir a Guanajuato en el estado de Guanajuato, en la época colonial, específicamente a finales de los años 1700 cuando dos hermanos procedentes de Europa se establecieron en Guanajuato.
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En la casa de tres pisos se dice que los hermanos vivieron en el segundo piso. Se ubica en la Plazuela de Carcamanes o de San José (llamada así por su proximidad a la iglesia del mismo nombre).
Arturo y Nicolás Karkaman (los hermanos en cuestión) eran comerciantes lo que los hizo ser muy populares en muy poco tiempo. Tan populares que la gente empezó a decir “Los Carcamanes” para referirse a ambos.
Su popularidad se extendió por los alrededores y con las doncellas y fue una de estas doncellas quien atraería la desgracia a “Los Carcamanes”. Esta doncella tan bella como frívola enamoró con su encanto a los dos hermanos y mantenía una relación con los dos a espaldas del otro.
Sin embargo, Arturo Karkaman descubrió el engaño por parte de su amada y de su hermano. Cegado por la ira, la locura y los celos, la noche del primero de junio de 1803, Arturo hizo cosas espantosas.
Ni el parentesco ni la vida en común a través de los años evitaron que Arturo asesinara a su hermano Nicolás con una daga tras una feroz pelea en la que Arturo terminó malherido.
La sed de venganza le dio la suficiente fuerza para levantarse y llegar donde vivía su infiel amante. En su misma casa, la doncella terminó asesinada por Arturo con la misma daga que tenía la sangre del difunto Nicolás.
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Arturo regresó a su hogar y se suicidó con la misma daga, terminando con “Los Carcamanes”.
Al día siguiente encontraron los tres cuerpos.
El cuerpo de Nicolás fue inhumado en el templo de San Francisco,
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y Arturo en el Panteón de San Sebastián.
Y cuenta la leyenda que por ese rumbo de San José, a la casa de “Los Carcamanes”, tes espectros hacen el recorrido, apenas cae la noche hasta la madrugada, lamentando su suerte y llorando su castigo.
Eso es todo por hoy, espero que les haya gustado esta leyenda mexicana. Hasta la próxima 👋👋👋.
