Oɴᴇ ᴅᴀʏ- 𝚈𝙾𝙾𝙽𝙼𝙸𝙽

Capitulo 14

Editado 25/11/2021

La calma que surgió al terminar la grabación de su álbum no duró mucho tiempo. Mientras se continuaba con las ediciones y los preparativos se le asignó al grupo otro tipo de trabajo. Al principio Yoongi no estaba del todo de acuerdo en lo que había propuesto Bang PD-nim sobre salir del país, pero cuando explicó que solo sería durante una semana y que a pesar de ser trabajo se les brindaría la oportunidad de disfrutar de un viaje completo, aceptó.

Y así fue como en medio de las preparaciones de su álbum salieron de Corea rumbo a Noruega. El camino había sido ajetreado, pero al final llegaron a su destino sanos y salvos.
Tras grabar una serie de eventos planeados y algunos inesperados, se hospedaron en un pequeño lugar en el centro de la ciudad. Su primer día había terminado de buena manera con una excelente cena dando paso al segundo y último día en el lugar antes de comenzar su camino hacia el siguiente país.

Yoongi había decidido quedarse en el hotel, puesto que no tenia los ánimos suficientes para salir de excursión. Su hombro le molestaba por el largo viaje en avión y a pesar de todo había tenido un momento de lucidez y la inspiración le había invadido.

Cuando los chicos volvieron con Taehyung llegando con ellos su última noche en la ciudad, el staff apago las cámaras y todos regresaron a sus habitaciones, incluido su pequeño Jimin.

Yoongi no admitiría en voz alta la falta que le estaba haciendo el pequeño, a pesar de no tener mucho tiempo fuera de Corea, todo el asunto tan repentino les había hecho mantenerse ocupados con los preparativos, haciendo imposible el poder verse en su estudio o solo reunirse sin los demás miembros al rededor.

Hacía exactamente dos semanas que no probaba esos esponjosos labios. Y el tenerlo tan cerca de si le era imposible el no desear sentirlos sobre los suyos. Tan solo imaginarlos,  recordar su piel sobre sus dedos, sintiendo lo suave que era, aspirando su dulce aroma mientras acariciaba sus caderas, le estaba volviendo loco.

El reloj marcaba las 2 de la mañana y el único sonido que resonaba en la habitación era la fricción de las sábanas de la cama sobre su cuerpo, el cual no dejaba de dar vueltas mientras trataba de conciliar el sueño.
Tenía más de lo pensado tratando de dejar sus recuerdos atrás para así caer en los dulces brazos de Morfeo, pero simplemente no podía.
Cansado de intentar decidió salir de la habitación silenciosamente tratando de no hacer mucho ruido en el proceso para no despertar a su compañero.

Al adentrarse a la sala de estar notó de inmediato que Jungkook no estaba ahí, al parecer la noche de películas en la habitación de los demás miembros había terminado con todos durmiendo en la misma habitación amontonados.

Yoongi solo soltó una suave risita mientras se echaba en el cómodo sillón, esperando así qué tal vez este le ayude con su repentino insomnio. Cerró sus ojos dispuesto a dormir tranquilamente cuando escuchó una puerta ser abierta, no le tomó mucha importancia creyendo que podía ser cualquier miembros en busca del baño. Pero cuando sintió el peso de un contrario sobre su cuerpo abrió los ojos lentamente, sabiendo perfectamente quien era aquella persona sobre su cuerpo.

El pelinegro no tardó ni un segundo en pegar sus labios sobre el cuello expuesto del pálido, los cálidos belfos de Jimin contra la fría piel de su garganta provocó que todo su cuerpo temblara, deleitándose contra el contraste. Lentos besos comenzaron a ser depositados sobre la nívea tez. Yoongi cerró los ojos mientras su boca se entreabría, dejándose llevar por las sensaciones que irrumpían en su ser, mientras colocaba sus manos sobre la cintura del menor para afirmarlo sobre su cuerpo. Por un momento creyó que su cansancio lo había vencido y había caído por fin sobre aquel viejo sofá en al parecer un muy interesante sueño. Sus dudas se aclararon de pronto cuando sintió una ligera mordida sobre mentón, sintiendo los dientes de Jimin tirar de su pálida piel, este acto trayéndolo de regreso a la realidad, haciéndole saber que la persona que ahora mismo estaba sobre su cuerpo, besándole con tanta delicadeza, era completamente real.