Su mano era jalada con fuerza mientras su mayor caminaba a paso apresurado por el andén sin soltarle. Sus sonrisas de oreja a oreja estaban acompañadas de pequeñas risas, demostrado así lo mucho que disfrutaban de aquella aventura. El mayor se detuvo justo frente a un parque del otro lado de la calle, este estaba rodeado por árboles de todo tipo, mostrando los botones de las flores que estaban por florecer puesto que la primavera estaba por llegar.
— ¿Lo ves? Es justo ahí donde tome esas fotos vergonzosas— Soltó Yoongi con voz jadeante debido a su larga caminata.
Hace menos de dos horas que habían llegado a Daegu. En cuanto salieron del tren el pálido no tardó en comenzar a dar un tour por el lugar, explicándole a detalle que era cada cosa de la ciudad acompañada de sus anécdotas en dichos lugares. Estaba muy eufórico al encontrarse después de tanto tiempo en su ciudad natal. No paraba de relatarle a Jimin de forma alborozada cada una de las actividades que solía realizar en tales sitios. El rubio no podía dejar de sonreír al ver a su chico tan feliz, adoraba ver esa linda sonrisa que mostraba sus encías mientras sus pequeños ojos se entrecerraban. Su estómago revoloteaba al ver aquellos lugares, algunos de los cuales ya había escuchado anteriormente en sus conversaciones pasadas con el mayor, asombrado de por fin poder verlos ante él.
— Crucemos y desde luego que recrearás esas fotografías— afirmó Jimin burlón mientras tomaba de nuevo la mano del pálido para así cruzar la calle.
Yoongi solo reía contento, dejándose hacer. La mañana estaba siendo en verdad divertida, divagando por la ciudad, recordando su niñez y parte de su juventud. Muchas cosas habían cambiado tanto en él como en dicho lugar, aún así, la sensación de encontrarse en casa era la misma. El frío viento que marcaba el fin del invierno chocaba en su rostro mientras las hojas de los árboles cepillaban la vereda. Aquel parque seguía siendo muy pequeño, sin embargo, los árboles eran mucho más grandes mientras que otros recién habían sido colocados.
Cuando Yoongi era joven salía ir allí después de clases, sentándose en las bancas del lugar mientras escribía en su pequeña libreta un sin fin de rimas. Solía estar durante horas solo dejándose llevar, ni siquiera le importaba los regaños que recibía de sus padres por desaparecer tanto tiempo, al final lo valía cuando aquel lugar le daba la inspiración suficiente para escribir sus letras. En ocasiones, sus amigos le acompañaban y jugaban a cualquier cosa, solo riendo y bromeando como cualquier adolescente.
Estar aquí ahora, después del cambio que había tenido en su vida, se sentía muy diferente. Recuerda las conversaciones con sus amigos, donde les hablaba de sus aspiraciones, queriendo sólo componer canciones importándole poco la universidad. Recuerda como se reían de sus palabras, pensando solamente que eran locuras. Y ahora estaba ahí, de nuevo, regresando al lugar donde su corazón se había encogido en su pecho mientras escuchaba una y otra vez que tenía que tener los pies en la tierra y ser mucho más realista con sus metas. Los años habían pasado y Yoongi lo había logrado. Su sonrisa se hizo más grande mientras cerraba los ojos y soltaba un suspiro.
— ¿En que piensas?— preguntó un curioso chico a su lado al observar a detalle cada una de sus reacciones.
— Nada, pequeño, solo estoy feliz de volver— le contestó el mayor mientras llevaba aquella mano que se encontraba sobre la suya a sus labios y le depositaba un cálido beso.
Sin soltar su mano comenzaron su camino hacia un nuevo destino. Yoongi había hablado mucho de tal sitio en aquellas noches de desvelo que compartían. Mencionaba lo rica que era su comida y lo barata que era. Y cuando dicho restaurante se presentó frente a ellos, Jimin dio un saltito de felicidad. Estaba realmente feliz de estar en esos lugares que eran parte importante de Yoongi, sentía que estaba explorando más a fondo sobre su vida, sobre él y eso le emocionaba en demasía, se sentía morir por tener la oportunidad de compartir estos momentos con el pálido.
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Oɴᴇ ᴅᴀʏ- 𝚈𝙾𝙾𝙽𝙼𝙸𝙽
FanfictionEl día que el último trainee se unió al grupo fue el primer día que Yoongi sintió su corazón martillar con fuerza sobre su pecho. Su corazón confundido no sabe si arriesgarse a amar a ese pequeño chico o solo reprimir ese sentimiento que le quema p...