Cuando Yoongi descubrió que se sentía atraído hacia los chicos no pudo evitar sentirse asustado puesto que vivía en una sociedad cerrada y con temor a lo que es diferente. Él solía creer que para poder tener una vida plena tenía que seguir con dichas reglas establecidas. Pero no pasó mucho tiempo cuando comprendió que simplemente el amar a alguien no tenía que limitarse solo por el género. Yoongi no entendía porque el amar a una mujer estaba bien pero el sentir lo mismo por un hombre era mal visto, al final ambos eran personas con sentires, con los que podía congeniar a la perfección. Ambos podían tocar y provocar aquel sentimiento de felicidad y tranquilidad sin ningún problema, al fin y al cabo lo único que los diferenciaba era su sexo, pero su capacidad de pensar y creer era la misma. Así que teniendo raciocinio, llego a la conclusión de que no tenía porque dejarse influenciar por mentes que realmente no comprendían a las personas como él, siendo solo personas que le temían a lo que no comprendían.
Yoongi apoyaba firmemente a la comunidad y aunque por su posición no podía hacerlo de forma directa, siempre intentaba apoyar de forma discreta. Él se mostraba orgulloso de sus compañeros que a pesar de sus agencias tenían el valor de, al menos entre celebridades, confesarse y mantener relaciones libremente homosexuales, afrontando sin miedo las constantes críticas y discriminación de las personas de mente cerrada y homofóbicas. Yoongi siempre intentaba establecer algún tipo de relación con dichas personas, haciéndoles saber que no todos eran iguales y que él les admiraba y apoyaba. Tal vez no era mucho, pero el sabía perfectamente que aveces una sola palabra puede cambiar y mejorar las cosas al menos un poco.
Hace solo unas semanas había salido a comer con sus compañeros, no eran de la misma empresa pero aún así, ambos se habían dado un tiempo para poder conversar mientras compartían una deliciosa comida completamente fuera de su dieta. Ambos chicos estaban saliendo y se mostraban realmente felices. No les importaba para nada los comentarios mal intencionados incluso provenientes de su mismo staff, no les importaba mientras estuvieran juntos. Ambos chicos mencionaban lo libres que se sentían por fin de ser sinceros con ellos mismos y mostrarse ante los demás. Claro, por contrato no podían hacerlo de forma pública, pero al menos eso bastó para dejar de sentirse reprimidos.
Yoongi deseaba el poder contarles que él también estaba más que feliz. Deseaba contarles que estaba teniendo una relación con su compañero de grupo y que era realmente maravillosa. Que lo quería como nunca había querido a nadie y que era correspondido. Pero el pálido respetaba la decisión de Jimin de mantenerlo en secreto.
Los únicos que sabían sobre ellos eran los demás miembros del grupo y nadie mas. Jimin le había sido claro al decirle que no estaba listo para mencionárselo a otras personas y Yoongi, siendo la persona comprensiva que era, había aceptado. El quería a Jimin demasiado y sabía que no había razón para trascender aquello, no importaba la opinión de los demás, mientras se tuvieran el uno al otro.
Pero cuando escuchaba a sus amigos hablar de lo enamorados que estaban el deseaba estar acompañado de su pareja, compartirles también lo mucho que se querían. Sus amigos sabían que Yoongi no era una persona heterosexual, el jamás lo había ocultado y siempre le brindaban completo apoyo. Ellos solían contarse todo y sabía lo felices que se pondrían cuando se enteraran que el chico del que hace años les hablo, ese chico que le parecía realmente bonito, estaba saliendo con él.
Aún así guardo silencio y solo se dispuso a escuchar sus lindas palabras de amor.
— No deberías juntarte con ellos— exclamó su manager.
Todos los miembros se encontraban cenando en la compañía de sus superiores, incluso Bang PD-nim se encontraba entre estos. No era un reunión sobre trabajo, solo era una comida en recompensa por su duro esfuerzo.
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Oɴᴇ ᴅᴀʏ- 𝚈𝙾𝙾𝙽𝙼𝙸𝙽
FanfictionEl día que el último trainee se unió al grupo fue el primer día que Yoongi sintió su corazón martillar con fuerza sobre su pecho. Su corazón confundido no sabe si arriesgarse a amar a ese pequeño chico o solo reprimir ese sentimiento que le quema p...