Capítulo 30

7.2K 892 60
                                    


Todo comenzaba a dar vueltas. Su vista estaba nublada y sus dedos se sentían hormiguear. Su estudio se sentía más sofocante de lo recordado y las teclas frente a él parecían cambiar de lugar en cuanto intentaba tocarlas.

Estaba demasiado ebrio. No sabía con exactitud la cantidad de alcohol que había ingerido, solo sabía que aquella canción que preparaba comenzaba a tener forma. No sabía si era gracias al whisky en su sistema, pero la letra simplemente había fluido por si sola. Esperaba que a esa chica, la cual en ese momento no recordaba su nombre, ni le interesaba, le gustara su canción. Había estado semanas intentando escribir algo que pudiera ser al menos decente, pero su cerebro no estaba cooperando en absoluto.

Rendido, se había decidido a tomar hasta que se quedara dormido en su sofá, lugar donde últimamente pasaba la noche. Pero en cuanto comenzó a sentir el efecto del alcohol, su inspiración volvió y la letra estaba ya escrita sobre el papel. Intentando enfocar su vista sobre aquella hoja, leyó como pudo lo escrito.

"Estoy borracho de ti, estoy borracho esta noche del recuerdo de tú siendo malo conmigo"

Mierda. Idiota. Ahora recordaba porque no había podido escribir durante todo este tiempo, todo lo que escribía era sobre Jimin. Sobre ellos, sobre su separación.

No era capaz de recordar cuánto tiempo había pasado, solo sabía que incluso la primavera ya estaba por terminar. Solo sabía que hacía tanto tiempo ya de la decisión más estupida de su vida. Al menos, estando ebrio y jodidamente melancólico, sonaba como una idiotez dejar ir a la persona que más amas.

Sirvió de nuevo su vaso de whiskey mientras sus lágrimas comenzaban nuevamente a deslizarse por sus mejillas. No quería llorar, pero no podía evitarlo, era lo que conseguía cada que se encontraba solo durante la noche de un viernes, recordando perfectamente lo que solía hacer ese día. Extrañaba ver a su pequeño rubio estar sentado sobre su sofá de cuero, solo observándolo trabajar mientras le dedicaba dulces y tiernas risas. Y cuando se aburría simplemente se levantaba de su lugar y se sentaba sobre su regazo para así observar juntos lo que hacía el mayor en su monitor.

Extrañaba lo atrevido que podía ser cuando se cansaba de tanto trabajo y solamente comenzaba a moverse sobre su cuerpo. Extrañaba besarle, tocarle, saborearle. Recordando su último encuentro justo sobre ese asiento, como Jimin se había desnudado frente a él, indicándole que la composición que realizaba podía esperar. Se había sentado en sus piernas, se había frotado sobre su erección, lo había hecho venir con solo ese toque, con solo verlo saltar desnudo sobre su polla cubierta.

Sin duda, el alcohol le estaba jugando mal, ahora estaba llorando mientras su cuerpo comenzaba a calentarse, sintiendo el bulto crecer sobre sus pantalones. Soltó una pequeña risa irónica. Se sentía como la mierda, se sentía tan mal, no había comido bien desde aquel día, solo vivía en su estudio, solo trabajaba intentando así no pensar en lo destrozado que estaba su corazón. Incluso había faltado a terapia un par de semanas, pero desde luego su terapeuta le había retado, indicándole todo lo malo que estaba haciendo en su vida. Y aunque ahora estaba siguiendo aquellos estupidos ejercicios de autoestima que le dejaba de tarea, simplemente había días en los que solo quería hundirse en su miseria y llorar borracho por su pequeño chico. Se preguntaba cómo estaría él, le miraba todos los días y aún así no lograba descifrar lo que sucedía con el rubio.

Solo sabía, gracias a Hoseok, que Jimin le había mencionado a Taehyung sobre comenzar a hacer cambios en su vida. Yoongi no quería presionarlo, desde luego que no. Pero moría porque llegara el día en que Jimin tuviera el valor de decirles a todos lo que era, de poder ser libre. No deseaba más que felicidad para su chico.

No importaba cuánto tiempo haya pasado desde que se separaron, Yoongi solo sentía como cada día lo amaba más y más.

Oɴᴇ ᴅᴀʏ- 𝚈𝙾𝙾𝙽𝙼𝙸𝙽Donde viven las historias. Descúbrelo ahora