De Noruega, con amor.

18

El cuarto de Lucas está listo para ser habitado de nuevo. Ayer pude acabar de pintar y hoy intente llegar rápido a casa para poder organizar todo, eso me ayudo a distraerme un poco de todo el asunto de Juanes. No dejo de pensar en que se fue por mi culpa. En que probablemente alguna de las cosas que le grite lo lastimaron o simplemente me imagino cosas y solo se fue por que se aburrió de estar en Colombia.

Algo me dice que mi tía sabe más de lo que dice saber y la cena de hoy es la oportunidad perfecta para preguntarle. Todo está listo. La casa está limpia y la comida también.

***

La cena acabo. ¿Cuál fue el tema de conversación? Lucas, así que no tuve oportunidad de preguntarle a mi tía sobre Juanes. Como me aburrí de la conversación, o mejor, del tema de conversación, me fui al estudio a seguir con los diseños del concurso. Tomo algo de inspiración de los peinados de las modelos credos por Guido Palau, en el desfile de Givenchy alta costura otoño – invierno 2019. Creí que estaba creando el algo puro, pero de "puro" no tiene nada, entonces creo que tengo otro diseño de estilo libre. 5 de 15. Todavía me faltan 10, pero siento que llevo buen ritmo. Golpean la puerta – Adelante – grito, es mi tía.

- ¡WOW! Así que esté es el "infame" estudio que tiene loca a tu mamá... Nunca creí que Alonzo tuviera tan buen gusto. – Dice en tono de burla mientras observa el estudio.

- Mi papá es un hombre de sorpresas... - respondo – ... y mi mamá esta enojada porque llego creer que con la llegada de Lucas y con la posible desaparición del taller, yo me iba olvidar de ser diseñadora de modas... Créeme: la basura que ahora está en el garaje y las remodelaciones de la azotea es lo que menos le molesta.

-Ya se le pasara.

- Eso espero.

- ¿Muy ocupada?

- No – respondo mientras dejo la Mac en el escritorio y la dirijo hasta la zona de los sofás que está ubicada al otro de la habitación.

-Es un espacio muy bonito y me gusta porque puede sentir muchas paz y tranquilidad. Espero que lo estes disfrutando.

- Si tía, lo hago. Me gusta mucho, como tú dices, aquí estoy tranquila y tengo más libertad que en el cuando estaba en el cuarto de Lucas.

- Desde hace días... - Pregunta cambiando el tema de conversación – ... quería saber cómo vas con los del concurso. Te lo pregunto, porque sé que Lucas va a volver a casa y sé que la relación de ambos es complicada. – Dice y noto algo de preocupación en su cara y en su tono de voz.

-Bueno no te voy negar que lo de Lucas me tiene nerviosa, pero si pienso mucho en ello, solo me complicare las cosas, así que intento acostumbrarme al hecho de tener que compartir de nuevo con el... respecto a los diseños... - me quedo callada. Miro por la ventana tratando de no agobiarme por ello. El tema de Juanes está complicando todo.

- ¿Qué ocurre? ¿Estas agotada? – pregunta con preocupación

La miro y se muy bien que ella ya sabe la respuesta, solo la quiere escuchar de mi boca. Suspiro resignada evitando mirarla para poder responder – Si.

- ¿Muy difícil? – pregunta

- No... Desafiante. Estos diseños me están sacando de mi zona de confort. No son la clase prendas que suelo dibujar. Al final de eso se trata el diseño de modas ¿No? Debes tener la habilidad de diseñar todo tipo de cosas, adaptándote a las nuevas tendencias. Pero entre la escuela, la tienda, el concurso, Lucas, la pastelería, mi mamá... y otros asuntos, todo se vuelve agotador.

- ¿Con "otros asuntos" te refieres a Juan Esteban?

Que observadora. Sabe que quiero hablar del tema.