De Noruega, con amor.

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Una mano enredada en mi cabello, acaricia suavemente mi cabeza. Peleo con mis ganas de seguir durmiendo en intento abrir mis ojos, pero me es difícil, es cuando escucho hablar a una voz conocida:

- Buenos días mi ángel ¿Qué tal tu noche?

Mi cabezo descansa en uno de sus brazos, mientras que, con su otra mano, sigue acariciando mi cabeza y mi cabello. Cuando finalmente tomo conciencia de mi situación actual, busco rápidamente la sabana de la cama y me cubro el rostro para que Ari no vea mi deplorable estado mañanero. Escucho como se ríe y añade burlón:

- Lo siento, ya no tiene sentido que te cubras de mí, llevo viéndote dormir como por 15 minutos.

-Nooo – respondo avergonzada.

- Lamento despertarte temprano pero hoy tenemos mucho por hacer – responde emocionado.

- ¿Debes trabajar hoy? ¿Qué hora es? ¿Qué vamos a hacer hoy? – pregunto descubriendo mi cara. Busco un reloj, intentando que Ari no vea mi cara inflamada y libre de maquillaje, pero él se da cuenta y se ríe; con su mano libre acomoda mi rostro frente a el para darme un beso en mis labios.

- No trabajo hoy, son 5: 45 de la mañana y es una sorpresa. Por ahora, lo mejor será que te levantes, tomes una ducha y te alistes para salir a desayunar. Te aconsejo que uses ropa abrigada.

- ¿Es broma verdad? Mira el día que esta haciendo y aun no son ni las 7 de la mañana. Es verano, moriremos de calor.

- Si, hoy amaneció más temprano, pero al sitio que iremos hace mucho frio y no quiero que resfríes por no llevar ropa adecuada.

Le hago saber con mi expresión que dudo de su petición y el inmediatamente añade con una sonrisa en su rostro – confía en mí.

- Esta bien – respondo resignada. El me lanza una sonrisa con un beso rápido y se levanta de la cama.

- ¿Para dónde vas? – pregunto cuando veo que se pone su chaqueta para salir.

- A mi cabaña, todas mis cosas están allí. Cuando esté listo vendré por ti. – responde para luego salir. Por mi parte, me acomodo en mi cama, intentando procesar el suceso de esta mañana. Aún no puedo creer que compartí una coma con un hombre, mejor aún con mi novio. Nunca lo había hecho, ni siquiera con Juanes, solo con Via en pijamadas uy noches casuales donde ella se quedaba en mi casa o yo en la de ella.

A pesar que solo dormimos, fui increíble despertar a su lado, sintiendo su calor corporal y u caricias. Segundos después mis pensamientos son interrumpidos por un mensaje en mi celular, es Ari.

Se que tardas 2 horas en alistarte así que deja de

pensar en mí, y levántate ya. paso por ti a las 9...

te quiero.

Sonrió y le hago caso. Me levanto inmediatamente, busco mi ropa y corro hasta a la ducha.

***

Bañada, cambiada y maquillada a eso de las 8:15 de la mañana, espero a que llegue Ari para ir a desayunar juntos. El servicio del hotel ya arreglo mi cabaña y recibí un mensaje de texto de Ruby que decía que ya había entregado mis diseños. Mientras tantos estoy en una video llamada con mis padres y Lucas desde hace poco menos de 10 minutos.

- ¿Por qué llaman a esta hora? No me mal entiendan, amo cuando me llaman, pero es muy tarde en Colombia, debe ser como la una de la mañana- respondo preocupada.

- Siempre que hablamos es de noche en Noruega y nunca hemos podido verte de día, además tu madre decidió no ir a la pastelería hoy, entonces podrá reponer el sueño perdido – dice mi padre.