7. Finca de las Mariposas.

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Lo primero que hizo al despertar fue entrenar. Había estado entrenando todos los días desde que decidió prepararse para ser cazadora. Tenía su propia rutina.

Le dejaron su ropa y luego de un baño, vestirse y de que la misma chica de la noche anterior le trajera comida, se marchó a su próxima misión.

Está demás decir que sus lesiones estaban completamente sanas e, incluso, su rango había aumentado a kanoto. Era inusual que sólo le tomara un día, pero si se tenía en cuenta que entrenó toda su vida con pilares, no lo era tanto.

Caminó un par de horas con la única compañía de Akira que ahora llevaba la cinta celeste con el dije de estrella en su cuello.

Llegó a otro pueblo que estaba siendo atormentado por otro ser que ningún habitante lograba identificar porque nunca habían visto un demonio. Estaba muy nublado y Hoshi pensó que, debido a ello, el demonio no tendría pudor en atacar en pleno día.

No estaba equivocada.

***

El demonio fue derrotado, pero Hoshi no salió muy bien parada.

«Pareciera que el patrón se estuviera vengando de algo».

Bromeó para ella.

Iba cojeando y sosteniendo su brazo derecho que iba doblado de una manera muy anormal, pues se había fracturado y su tibia y peroné izquierdo iban trizados, o esa idea le daba el dolor. Finalmente llegó a sentarse en el suelo y apoyar su espalda en un árbol. Ya estaba anocheciendo.

De su frente, boca y nariz escurría sangre, aunque también tenía varias heridas por todo el cuerpo. Todas esas lesiones le costaron el rango tsuchinoto, que, en realidad, era para lo que la prepararon.

Akira preocupada se posaba junto a la chica avisándole a Hoshi que ya venían los kakushis a su rescate, pero ella sintió una presencia maligna no muy lejos de ahí.

«Si llegan los kakushis será peligroso para ellos».

Con dificultad, tomó el vendaje de su bolsillo y con ayuda de sus dientes, comenzó a enderezar su brazo derecho con el vendaje.

-¡CAAAW! ¡¿QUÉ HACES?! -preguntó Akira con sus ojos saltones-.

-Hay un demonio ahí -señaló hacia adelante con su cabeza, soltando quejidos de dolor-. Tengo que ir antes de que los kakushis lleguen. Ya me recuperaré después.

Akira siguió replicando e incluso jaló del haori para detenerla, pero la chica ya se encontraba de pie. Se abrió paso por varios árboles y llegó a encontrarse con una chica que se enfrentaba a un demonio con un poco de dificultad.

Era Kanao, la reconoció de inmediato.

Sin dudarlo, decidió sumarse a la batalla. A diferencia de Kanao, el demonio pareció no notar su presencia, así que a la chica le dio una mirada rápida de seguridad para darle a entender que la ayudaría.

-¡Aliento estelar, sexta postura!

Hoshi se movió alrededor de los pies del gran demonio y fue desenvainando su espada en varios puntos. Cuando llegó al punto inicial, formando una figura cerrada, gritó.

-¡Salta!

La chica del moño obedeció y Hoshi devolvió su espada a la funda.

-¡Constelación enlazada!

Todos los puntos donde se detuvo a desenvainar su espada colisionaron y cortaron los pies del demonio a la altura de sus pantorrillas, haciéndolo perder el equilibrio y fue cuando Kanao aprovechó de darle el golpe final.

El Sol Es Una Estrella [KNY x OC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora