45. La Roca.

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A la par de Tanjiro, Hoshi iba superando el entrenamiento de la cascada y de los troncos, lo que la sorprendía. No sabía desde cuándo había ganado tanto fuerza, pero estaba inmensamente agradecida por eso.

No era lo único por lo que estaba agradecida, también lo estaba por volver a ver a sus amigos y, sobretodo, por volver a verlo a él. Aunque hubiera estado ocupada entrenando y no hubiera tenido el tiempo suficiente para darle vueltas a sus sentimientos, Tanjiro había empezado a ser su primer y último pensamiento del día, y estaba extremadamente feliz por estar junto a él, aunque intentaba no demostrarlo. Sin embargo, había algo que no podía ocultar y eso era lo ligeramente sonrojada y nerviosa que se ponía cuando veía a Tanjiro, ya que últimamente andaba con su torso descubierto y, aunque no era el único chico así, sí era el único que provocaba ese efecto en ella, sobretodo cuando estaban cerca.

Tanjiro, por su parte, se perdía en sus pensamientos más de lo normal, pero todos ellos eran sobre Hoshi. Pensaba en ella todo el día y estaba floreciendo una necesidad de estar con ella, de acompañarla, de estar a su lado siempre que pudiera.

-¡JA JA JA! ¡HE PESCADO MÁS QUE TODOS USTEDES!

-¡NO TODO ES UNA COMPETENCIA, POR DIOS!

Inosuke y Zenitsu discutían mientras estaban parados en el río con sus pantalones recogidos hasta sobre las rodillas, pescando junto a Hoshi y Tanjiro. Se habían dividido con los demás chicos del grupo para que prepararan arroz y pudieran comer todos juntos, ya que en realidad no eran muchos participantes.

-¡Ya quiero comer! -volvió a decir Inosuke al cabo de un rato-.

-Espera, pesquemos unos cuantos más por si acaso -dijo Hoshi, volviendo a recoger las mangas de su camisa, ya que se le caían a ratos-.

-¿Tú crees? -preguntó Zenitsu-.

La muchacha asintió.

-Debe ser suficiente para todos -volvió a inclinarse en el río y siguió pescando-.

-¡Sobretodo para mi! -interfirió Inosuke y Hoshi rió de lado-.

-Sí, también para nosotros. Pero tenemos que compartir -lanzó un pez a una cesta que tenían en la orilla-. De eso se trata ser nakama.

-¿Kajama? -preguntó Inosuke ladeando la cabeza-.

-Nakama -le corrigió la chica con una sonrisa, irguiéndose-. Significa que somos compañeros, como hermanos.

-Así es. Significa que nos apoyamos entre nosotros -agregó Tanjiro, enderezándose también-.

-¿Y qué más?

-¿Cómo que "qué más"? -interfirió Zenitsu que se había acercado a la cesta-. Nakama significa amigo, uno con el cual empatizamos. Algo que te cuesta hacer.

-¡Yo sí emtapizo! -respondió Inosuke echando humos por su nariz, aunque no sabía realmente qué significaba esa palabra-.

-A lo que se refiere, Inosuke -agregó Hoshi con calma-, es que Nakama significa estar ahí para el otro cuando lo necesite y caminar juntos por el camino correcto.

El de la máscara de jabalí se quedó quieto unos momentos, analizando más de lo normal las palabras de su amiga. Hoshi miró a Tanjiro, pensando en aquello que ocurrió con Nezuko en el distrito rojo y, de alguna manera, Tanjiro recordó la misma situación. Se sonrieron y comenzaron a salir del agua. Cuando Inosuke volvió en sí, los demás habían salido del río y se estaban poniendo sus zapatos tranquilamente. Sacudió un poco su cabeza y se encaminó hacia ellos para hacer lo mismo.

Cuando estuvieron listos, se encaminaron a la zona donde los demás estaban, Tanjiro prendió fuego al llegar para cocinar el pescado y comenzaron a prepararlo. Al terminar, todos juntos comieron, pero, como siempre desde que estaba junto a Hoshi en el entrenamiento, Tanjiro percibió ciertos aromas de los demás chicos que le indicaban que sentían un tipo de atracción por Hoshi. Esto le producía una sensación levemente desagradable; no era como el malestar de cuando olfateó a los chicos en el dojo de Kanroji, bueno, tal vez se parecía un poco, pero era muchísimo menos intenso.

El Sol Es Una Estrella [KNY x OC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora