The Heir to the House of Prince | Traducción

xxv. Secretos del Dosel

Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas.

"No está feliz".

No me digas, Nott.

Severus no se había dado cuenta de que Apollonius tenía tanto talento para decir lo obvio. Están de pie en el pequeño jardín trasero de la mansión Riddle, mientras en el interior el Señor Oscuro se enfurece. Los gritos resuenan por los pasillos. Parece que Avery se lleva la peor parte. El Señor Tenebroso se ha aburrido y ha permitido que Lucius tome el mando, que tiene esa aptitud de Malfoy para los hechizos de compulsión. Está haciendo que Avery se chamusque la piel de sus propios brazos. A su lado, Apollonius está temblando de pies a cabeza por los repetidos crucios.

"Toma", Severus saca el frasco de reponedor de nervios que siempre lleva consigo y se lo entrega a Apolonio. "Bebe esto".

Apollonius lo toma. Tiene el color del pergamino fresco, pero tiene suerte. Está vivo. Es viejo y frágil y el Señor Tenebroso lo encuentra políticamente útil, así que no lo tortura a menudo y hoy, cuando Apollonius ya no podía mantenerse en pie, el Señor Tenebroso lo echó de la habitación y le dijo a Severus que lo cuidara.

"Había olvidado la intensidad de su ira", murmura Apollonius temblando. Severus casi resopla de burla. Por eso Apollonius tiene suerte. Severus no tiene la posibilidad de olvidar nunca. Toma el reponedor de nervios casi a diario. Severus presiona con sus dedos el pulso en la muñeca de Apollonius. Es rápido y desigual.

"Una ronda más habría sido suficiente. Podría haberte matado", murmura Severus.

"Todavía podría". El tono de Apollonius es ligero, indiferente. Severus se da cuenta de que tal vez Apollonius ya no tenga miedo de morir. Severus piensa en darle crema para moretones a Theodore Nott. Siente un intenso destello de rabia por este hombre tan dispuesto a morir y a dejar a su hijo con su abusador.

"Tienes un hijo", gruñe Severus. Esto no afecta a Apollonius. Se limita a asentir suavemente.

"Lo tengo".

Mira las estrellas sobre Little Hangleton. Su rostro, ligeramente crispado, es ilegible. Apollonius es uno de los contemporáneos del Señor Tenebroso. Severus se imagina en ese momento a los dos, Nott y Riddle, de primer año, jodiendo Pociones en la clase de Slughorn. Severus pondría todos los galeones que tiene si pudiera viajar en el tiempo y enseñar Pociones al Señor Tenebroso.

Le haría desollar gusanos de la suerte todas las noches en el castigo y luego lo ahogaría en un puto caldero.

"Tengo un tarro canopo".

Severus mira a Apollonius con total asombro. Respira profundamente y se tranquiliza.

¿Por qué carajo la gente me sigue contando sus secretos?

Severus se dice a sí mismo que no responderá. Deja que Apollonius comparta su secreto, deja que se infecte el mundo. Cómo desearía Severus que la gente se callara, pero Apollonius acaba de decir que tiene un tarro canopo, así que...

"¿Perdón?" Susurra Severus.

"Un tarro canopo", dice Apolonio con calma. "Se usan para..."

"Sé para qué se usan", escupe Severus. "¿Por qué?"