Mi primer beso fue con Kevin Jax.
Habían pasado tres semanas desde la noche de Año Nuevo y a mí seguía doliéndome recordarla. Era enero y el curso acababa de empezar, así que las clases todavía no requerían toda nuestra atención, y Kevin y yo comenzamos a mandarnos notitas desde el primer día.
«¿Qué tal las vacaciones?»
«Bien. Pintando. ¿Y tú?»
«En la playa con estos. ¿Vas andando a casa?»
«Sí, ¿por qué lo preguntas?»
«¿Puedo acompañarte?»
Mordisqueé un poco la punta del bolígrafo y contesté solo con un «sí».
Cuando las clases terminaron y me despedí de Blair, que iba en otra dirección, Kevin se acercó con una sonrisa tímida.
Apenas hablamos al principio, como si mandarnos notas en clase no tuviese nada que ver con estar cara a cara; pero conforme fueron pasando los días, la incomodidad se disipó y me di cuenta de que Kevin era divertido y muy inteligente. Le gustaban los palitos de regaliz y a veces se comía alguno mientras caminábamos, porque decía que le daba envidia verme a mí con una piruleta en la boca. Me hacía reír. Era una de esas personas optimistas que siempre estaban alegres y conseguían contagiar ese sentimiento.—Así que vendrás este sábado a la fiesta de la playa —repitió cuando llegamos a la puerta de mi casa. Yo asentí, con las manos en las asas de la mochila. Kevin me miró nervioso y cogió aire antes de hablar:
—Iba a esperar hasta entonces, pero…
Supe lo que pensaba hacer antes de que sucediese.
Allí, bajo un zarzo dorado que trepaba por la valla blanquecina entre las hierbas que crecían salvajes, él se inclinó y me besó. Fue un beso un poco torpe y cohibido, como lo son casi todos a esa edad. Yo cerré los ojos y noté un cosquilleo en el estómago que persistió mientras Kevin se daba la vuelta y se marchaba calle abajo.
No me moví hasta que oí una voz familiar:—Prometo que no se lo contaré a nadie.
Me volví. Hyungwon alzó las cejas y sonrió divertido.
—¿Qué haces aquí? —pregunté.
—Había quedado con tu padre. No me mires así, no pretendía espiarte. Parece un buen chico, de los que cortan el césped los sábados por la mañana y acompañan a su novio hasta la puerta de casa. Me gusta. Tienes mi aprobación.
—No necesito tu maldita aprobación.
—¡Venga! ¡No me digas que te has enfadado!
Reprimí las ganas de llorar, entré en casa y me encerré en mi habitación.
Mi madre subió un rato después con un bote de helado. Se sentó a mi lado en la cama, con las piernas cruzadas y la bata llena de pintura seca, y me tendió una cucharilla antes de hundir la suya en el chocolate. Tragué saliva y la imité.
Tiempo después entendí que una madre siempre suele saber más de lo que parece. Que hay cosas que no se le pueden esconder cuando se trata de sentimientos. Que, a pesar de respetar mis silencios, ella lo supo casi antes de que yo mismo empezase a darme cuenta.
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Nunca Fuimos 1° Parte // HyungKi (Ad2)
FanficBienvenidos queridos lectores. Segunda adaptación, espero que les guste. Más detalles dentro de la historia (≧▽≦). * Hyungwon x Kihyun * Primera parte de mi segunda adaptación * Contenido BL, si no es de su agrado siga su camino.