Un reencuentro siempre suele llenar de felicidad, en los cuentos de hadas la felicidad es para siempre pero en esta historia no se sabe.
_____ Halls perdió al amor de su vida, Tom Hiddleston quién se caso con una mujer con la cual tuvo una aventura...
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— Bueno, deberíamos de pasar a sentarnos primero –dije– ¿Dónde les parece mejor?
— ¿Podemos en la cocina? –preguntó Martha– me encantaría cocinar algo si tú me lo permites.
— Sería un placer –sonreí– vengan, están en su casa –caminé hasta la cocina– solo es cuestión que te vayas familiarizando sobre donde están las cosas... Puedes tomar lo que quieras con confianza Martha.
— Muchas gracias –sonreía– bueno, lamento interrumpirte pero... Por favor continúa con lo que estabas diciendo sobre ese muchacho Sean.
— Si _____, dinos que ocurre con Sean –habló Isabel sentándose.
— Bueno, tú ya sabes que él era algo así como mi jefe –miré a Isabel– Pues hace un tiempo me invitó a salir pero todavía no tenía ni idea de que yo estaba comprometida con Tom.
— ¿Tu aceptaste salir con él? –preguntó Martha de manera curiosa.
— ¡Jamás! –respondí rápidamente– de hecho la primer vez que me lo dijo si no mal recuerdo fue cuando Tom fue ingresado a la clínica... en alguno de esos días –me senté también y tomé un poco de queso de la charola que habían llevado.
— ¿Y Tom no lo sabe cierto? – Isabel me miraba, yo solo negué.
— ¿No le contaras? –Martha pregunto mientras buscaba algunas cosas en las gavetas de la cocina.
— Veo que Tom lo aprecia demasiado... Cada que lo ve se pone muy feliz y veo que se llevan tan bien que no me gustaría tampoco causar problemas entre ellos y mucho menos que Tom se vaya a alterar por una tontería.
— Bueno entonces si para ese entonces te lo dijo y no te ha vuelto a decir algo incomodo pues no le digas, Sean debe de comprender que ya tienes tu pareja ¿No crees? –Martha me miró.
— Es que hoy me volvió a hacer unos comentarios que no me gustaron, no sé si estoy exagerando o...
— ¡Nunca exageras! –habló Isabel interrumpiéndome– Querida, las mujeres contamos con una habilidad increíble, esa habilidad nos permite darnos cuenta con que persona corremos peligro o también nos hace dar cuenta con que persona no estamos seguras... Deberías de contarle a Thomas.
— Isabel tiene razón, si una vez te sientes incomoda con una persona ten cuidado... –Martha saco algunas cosas.
— Es que no puedo decirle a Tom, el está demasiado emocionado por que su amigo irá a nuestra boda, además en dos días estaremos casados y estando casados Sean debe entender eso y tomar su distancia –hablé– no me hubiera gustado contarles porque es algo que me da pena pero les tengo confianza a ambas, son mi familia y sentía la necesidad de contarlo porque también me tenía angustiada.
