Dos chicos que están a nada de graduarse de la secundaria e iniciar sus vidas, pero cometen un error que puede comprometer su futuro y tal vez sus vidas para siempre
—¿Sabes que? Me parece que no supiste darle educación sexual a tu hijo, Forsythe— Reclamó Alice, enojada.
Ahí Jughead también comprendió que Alice ya lo sabía todo, pero no hizo nada más que abrazar a su novia. Ella lo necesitaba.
Estaba tan nerviosa y asustada que no paraba de llorar y temblar en sus brazos, aferrada a él. Él hacía lo posible por hacerla sentir segura y contenida.
Fp miró a los chicos y luego a Alice nuevamente. —¿A que te refieres Alice? Ve directo al punto, por favor—Miró a su hijo. —¿Que hiciste Jughead?—
Alice soltó una risa sin gracia y dio dos pasos más cerca de Fp. —¿Eres estúpido o que? ¡Tu hijo embarazó a mi hija!— Gritó, enojada.
Fp quedó atónito y no supo que responder. Solo miró a su hijo. —¿Que? Eso... ¿Eso es cierto?—
—¿Esto responde a tu pregunta?— Preguntó Alice, mostrándole la prueba de embarazo a Fp. —¿Ves esto? ¡Mi hija solo tiene diecisiete Forsythe! ¡¿Comprendes lo que le hizo tú hijo?!— Continuó gritando.
Fp estaba tan atónito que no supo que responderle a Alice. Solo miraba a los chicos mientras éstos seguían abrazados. Evidentemente estaban muy, pero muy asustados.
—No lo entiendo— Habló por fin Fp, mirando a su hijo. —¿Que pasó, Jughead?—
Jughead en ningún momento soltó a Betty. Aún la abrazaba. —Fue un accidente, papá—
—¡Ustedes dos son unos niños!— Les gritó Alice, mirándolos con ira. —¡¿Que diablos van a hacer con un bebé?!—
—Alice, creo que es necesario que nos relajemos. Primero calmémonos un poco para hablar de esto. Los chicos cometieron un error y están asustados— Sugirió Fp, mirando a los dos chicos con tristeza.
—¡No me pidas que me calme!— Le gritó Alice a Fp para luego mirar a su hija. —Elizabeth... mañana mismo vamos al hospital para que te practiquen un aborto—
—¡No!— Gritó Betty, mirando a su madre con los ojos llenos de lágrimas que bajaban por sus mejillas.
—Eso es muy peligroso— Opinó Jughead, volviendo a esconder a su novia en su pecho.
—Alice... eso no. Piénsalo— Intervino Fp.
—Entonces si no vas a abortar a ese engendro... te vas de la casa, Elizabeth. A ver como te las arreglas con un hijo— Exigió Alice, mirando a su hija con tanto enojo que le daba miedo a cualquiera.
—¡No puede echarla!— La defendió Jughead, indignado.
—¡Entonces se queda con nosotros!— Intervino Fp, mirando a Alice. —No puedes echar a tu hija de esa forma. Y menos con un niño—
—¡Ja!— Exclamó Alice. —¿Mi hija en ese viejo trailer en el que vives? ¿Sabes que? Mejor que se quede conmigo. Pero tú hijo va a responder por el daño que le hizo a mi hija—
Fp soltó un suspiro y miró a su hijo. —Yo hablaré con él cuando estemos en casa. Pero por ahora pienso que lo mejor es tranquilizarnos un poco para poder tomar una buena decisión—
Alice asintió y después de eso hubo un silencio extremadamente incómodo en el ambiente. Estaban pensando, como sugirió Fp.
Jughead se sentó junto a Betty en un sofá de la sala, rodeándola con sus brazos, sin dejarla sola en ningún momento mientras sus padres daban vueltas por toda la sala, pensando.
Finalmente Fp tomó aire y miró seriamente a los chicos. —¿Que pasó con los métodos anticonceptivos? Pudieron cuidarse al menos, por Dios—
Jughead lo miró, sin dejar de abrazar a su novia. —Nos cuidamos... papá. Fue un accidente y estoy dispuesto a responder por mis errores y aceptar mis responsabilidades—
—¿Y que planean hacer?— Les preguntó Alice, mirándolos a ambos. —Es el hijo de ustedes dos, después de todo—
Betty se reincorporó y tomó aire para poder hablar. Estaba tan nerviosa que hasta eso se le dificultaba. —Jughead y yo acordamos juntarnos en dos días para charlar sobre esto—
—Y los vamos a apoyar en la decisión que vallan a tomar— Aseguró Fp y miró a Alice. —¿Cierto Alice?—
Alice rodó los ojos y asintió. —De acuerdo. Dios...— Murmuró, dándoles la espalda. A ella se le estaba haciendo muy difícil asimilar lo de su hija.
—Vámonos Jughead. Tu y yo tenemos mucho que hablar en casa, muchacho— Aseguró Fp, mirando mal a su hijo. —Despídete rápido—
Jughead suspiró y le dio un último abrazo a su novia acompañado de un beso en su frente sudada por los nervios. —Te amo nena. Todo estará bien y ya sabes a donde ir si pasa cualquier cosa. ¿De acuerdo?— Le preguntó en voz baja.
Betty asintió y después de otro abrazo de su novio, lo vio irse junto a su padre de la casa.
La ojiverde más chica subió en total silencio a su habitación mientras Alice seguía dando vueltas en la sala de estar, tratando de asimilar la situación de su hija. Le había afectado demasiado y se sentía traicionada.
Betty se encerró en su habitación para seguir llorando, pero ya había llorado tanto que no pudo hacerlo otra vez. Su pecho dolía y ya incluso le había dado migraña de tanto llanto y frustración.
Ya sentía que su vida estaba arruinada.
No sabía cuanto tiempo había pasado cuando Alice entró a su habitación, porque Betty olvidó ponerle seguro.
Alice la vio echa bolita en la cama, sufriendo, y ahí se arrepintió de cómo se comportó con ella hace poco.
—Linda...— Le habló en voz baja, entrando a su habitación y sentándose a su lado en la cama. —Se que no debí reaccionar así hace rato... ¿Pero tienes idea de lo que hiciste?—
—Te juro que en ningún momento quise esto mamá. Ya no me reclames más, por favor— Suplicó, con la voz entrecortada.
Alice suspiró y empezó a acariciar su espalda. —No creas que he dejado de amarte por este accidente Betty. Sigues siendo mi hija—
—Me ibas a echar de la casa— Le recordó en un sollozo.
—Eso lo dije sin pensar. Fue el momento— Aseguró. —Mira... buscaremos la manera de hablar con tu padre cuando llegue mañana. Mientras tanto, hablaremos con el director Whaterbea para ver si te deja terminar el año en esa condición—
Betty se sentó sobre la cama y la miró con miedo. —Pero mamá...
—Pero nada Betty. Ya se te está empezando a notar y no queremos inconvenientes. Descansa— Le dijo, sonriéndole para luego retirarse de la habitación de su hija.
Esa noche, ella no iba a dormir. Solo podía pensar en las consecuencias de este embarazo adolescente. Sería juzgada y señalada por los demás sin mencionar la reacción de su padre al enterarse.
Estaba perdida.
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Una gran prueba la que enfrentan ahora. Vallan comprando más pañuelos 😭
Y mientras tanto comenten nombres para niño y niña 👇🏻
