Error Adolescente |Bughead|

"Capítulo 21"

—Entonces... si mi hija decide abortar... ¿Aún se puede?— Preguntó Alice, mirando a la doctora.

—¿Que? ¿Abortar?— Preguntó Betty, mirando a su madre con miedo.

—Nena, tranquila— Murmuró Jughead, apretando con cuidado su mano.

La doctora los miró a los tres y negó. —Lo siento tanto... ya no se puede. El feto ya está demasiado desarrollado y un aborto a estas alturas sería demasiado riesgoso—

—¿Que tan riesgoso?— Preguntó Alice.

—Su hija podría sufrir una hemorragia muy severa y eso podría causarle hasta la muerte. Es mejor no considerar esa opción— Informó la doctora, sin dejar de pasar el aparato por el vientre de la rubia más chica.

—No. Eso no. Si eso representa un peligro para su vida, es mejor no hacerlo— Habló Jughead, asustado.

—¿Ah si? ¿Y tu que sugieres? ¿Que tengan al bebé? ¿Que van a hacer dos mocosos como ustedes con un bebé?— Le preguntó Alice al chico.

Jughead no le respondió, porque escuchó un sonido continuo que no conocía. —¿Que es eso?— Preguntó.

Betty también lo escuchaba. —¿Que es? ¿Que es ese sonido?— Preguntó.

La doctora sonrió, mirando la pantalla y luego a los chicos. —Es el corazón del bebé—

—¿El corazón del bebé?— Preguntó Betty, mirando a su madre. —¿Eso es cierto?—

Alice asintió y ese sonido puso a Jughead nervioso, y a Betty también.

—Ya no quiero escucharlo. No quiero— Exigió Betty, empezando a llorar. —Quítenme eso...

—Pero linda, es el corazón del bebé— Dijo la doctora, mirándola.

—¡No lo quiero escuchar! ¡Quítenme eso!— Gritó Betty, llorando.

—Nena, ¿Que sucede?— Le preguntó Jughead. —Entonces quíteselo doctora—

La doctora suspiró y dejó de pasar el aparato sobre el vientre de la rubia. Ésta se sentó sobre la cama y empezó a llorar.

—Elizabeth... ¿Que pasa?— Le preguntó Alice a su hija, acariciando su espalda.

Jughead tomó su mano y besó su mejilla mientras ésta aún lloraba. Ni él ni Alice sabían por qué. Parecía que tenía miedo de escuchar o sentir al bebé.

—Esto es normal— Aseguró la doctora, mirando a Betty con una sonrisa compasiva. —Es muy joven y está atravesando una situación muy estresante. Yo les recomiendo que visiten a un psicólogo y que los tres vallan con ella, o también seria bueno una sesión en donde solo estén ellos dos— Miró a Jughead.

—Ya pasó amor. Esta bien— Tranquilizó Jughead a Betty, abrazándola mientras ésta dejaba de llorar lentamente en sus brazos.

—Linda— La llamó la doctora, acercándose a ella. —Se que estas asustada, pero necesito que me dejes terminar de revisarte para ver si tú y tu hijo están bien. ¿De acuerdo?—

Betty negó, mirando a la doctora con las mejillas empapadas de lágrimas. —Quiero irme de aquí—

—Betty, es necesario que la doctora se asegure de que estas bien, mi amor, por favor— Suplicó Jughead, besando su mejilla.

—¿Entonces mi hija tendrá que quedarse con el bebé?— Le preguntó Alice a la doctora.

—Es eso o el riesgo de morir por una hemorragia— Explicó la doctora.