Error Adolescente |Bughead|

"Capítulo 49"

Se cumplió aproximadamente un mes desde que Betty y Jughead se separaron. Fue muy difícil ser padres separados cuando su hija no asimilaba la situación.

Jughead no la dejó ni por un momento. Seguía viéndola todos los días, llevándola al parque, llevándola a la escuela y buscándola en las tardes y nunca le fallaba.

Lo difícil era encontrarse con la mamá de la niña de sus ojos. La tensión en el aire era muy fuerte cuando les tocaba encontrarse.

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Jughead estaba en Pop's, conversando con su buena amiga Tabitha y la hija que ésta había tenido con Reggie. Su nombre es Annie Mantle y actualmente contaba con solo tres años de edad. Una hermosa niña morocha con los ojos idénticos a los de su mamá.

—¿Quieres volver al parque pronto para jugar con Mía?— Le preguntó Jughead a la pequeña, sonriéndole.

—Si— Respondió la menor mientras estaba en brazos de su madre.

—Jughead... hablando de Mía... ¿Como está?— Le preguntó Tabitha.

Jughead suspiró. —Es difícil. Ella... ya me separé de Betty desde hace un mes y ella aún no se acostumbra—

—Ten paciencia. Solo tiene cinco años y fue un cambio muy repentino. ¿Si?— Lo aconsejó.

Jughead asintió. —No se que haríamos sin ti, Tabs—

La campana de la puerta del Pop's sonó y entró Reggie, con una sonrisa de oreja a oreja.

—¡Papi!— Chilló Annie, apartándose de los brazos de su mamá y corriendo hacia su padre.

—Hola mocosa hermosa— Dijo Reggie, tomándola en sus brazos y llenándole la cara de besos. —Te amo—

—Deja de decirle mocosa– Lo regañó Tabitha, acercándose y dejando un pequeño beso sobre sus labios.

—Sabes que es de cariño amor— Se justificó Reggie, dejando repetidos besos sobre la cara de su ahora esposa y mirando a Jughead. —Hermano, hola—

—¿Que hay?— Respondió Jughead, sonriéndole.

—No creerás quienes vinieron— Aseguró Reggie mientras dejaba a su hija en el piso y rodeaba a la morena con su brazo.

La puerta del Pop's volvió a abrirse y entraron Betty y Verónica tomando a Mía de la mano.

Mía apenas vio a su padre y sus ojos se abrieron como platos, corriendo hacia el. —¡Papito!—

—Hola princesa— Respondió Jughead, tomándola en sus brazos y besando su mejilla. —¿Todo bien mi niña?–

—Te extrañé— Confesó la menor, abrazándose a su cuello.

—También yo bebita— Dijo Jughead, bajándola al piso y dejando otro beso sobre su frente.

—Lo viste esta mañana bebé— Le recordó Betty, divertida.

—Típico. Sufres teniendo a tus hijos y luego quieren más a su papá— Se quejó Tabitha.

Mía y Annie se vieron y se abrazaron. La diferencia de edad no impedía que tuvieran una amistad especial a corta edad.

—Hola tía Tabitha. Hola tío Reggie. Annie y yo vamos a jugar— Avisó Mía, tomando a la más chica de la mano.

—Está bien mi niña. Reggie, ve a cuidar a las niñas, por favor— Le pidió la morena a su esposo, besando su mejilla.