Error Adolescente |Bughead|

"Capítulo 53"

Hall vivió menos de lo que se esperaba. Murió un mes más tarde debido a que la leucemia que tenía ya estaba muy avanzada. Se aseguró de pedir perdón y quedar bien con todos a los que lastimó y pasar la mayor parte del tiempo posible con su familia.

Le hicieron un funeral sencillo, solo con personas cercanas. Betty tuvo la compañía de su madre, los Jones, su pequeña familia compuesta por su exnovio e hija y sus fieles y leales amigos.

Betty estaba en paz, porque su padre murió en paz.

Lo que no le daba paz era que aún estaba separada del hombre de su vida, que su hija estaba muy inquieta por la situación y también estaba el trabajo. Estaba enfrentando mucho estrés y nadie lo notaba.

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Betty estaba en casa, trabajando desde su computadora. Tener mucho éxito tenía sus consecuencias. Mucho trabajo y muchas responsabilidades para enfrentar.

Por suerte su pequeña hija estaba con Jughead, quien se ofreció a quedarse con ella después de la escuela. Si había algo que Jughead hacía realmente bien, era ser el papá de Mía.

Pero ella lo deseaba, aunque el orgullo no le permitiera admitirlo.

Alguien tocó la puerta y Betty se paró del sofá de la sala para ir a abrir. —¿Quien es?—

—Soy yo, B— Contestó Verónica desde afuera.

Betty abrió la puerta principal y recibió a su mejor amiga con un cálido abrazo.

—Oh Betty...— Dijo Verónica, separándose y mirándola de arriba a abajo, preocupada. —¿Estas bien? ¿Qué tienes? Te ves cansada—

Betty suspiró. —Estoy bien— Le sonrió. —¿Quieres pasar?—

Verónica asintió con una sonrisa y las dos se sentaron juntas sobre un sofá de la sala. La morocha se veía emocionada.

—Betty, no creerás la noticia que te tengo— Aseguró Verónica, con una sonrisa, pero notó a su amiga cansada. —¿Estas bien?—

Betty sonrió y asintió. —Claro— Bostezó. —Continúa. Quiero saber qué noticia tienes para mi hoy—

Verónica tomó aire. —Archie y yo estamos esperando a nuestro primer bebé— Anunció, emocionada.

Fue como si el desánimo de Betty se fuera. Sonrió y abrazó a su mejor amiga. —¡Por Dios Verónica! ¡Se habían tardado!— Se separó. —¡Felicidades!—

—¡Gracias B!— Chilló Verónica, feliz. —No sabes lo felices que estamos Archie y yo. Y será mejor que no me tarde o él saldrá a buscarme. No sabes lo intenso que se pone—

—Dímelo a mi. ¿Cuanto tiempo tienes?— Le preguntó la ojiverde a su amiga.

—Casi cinco meses— Presumió, levantándose la remera y dejando ver su vientre ligeramente abultado. —En mi próxima cita voy a saber si será niño o niña—

—Aún no entiendo por qué te tardaste tanto en decirlo, pero me da mucho gusto V. Pensé que solo estabas engordando— Admitió, pasándose una mano sobre la cara, estresada.

—Oye, ¿Estas bien?— Le preguntó Verónica a la rubia. —Me estas preocupando—

Betty no le contestó. Se puso de pie de repente y corrió hacia las escaleras. Verónica la siguió y la vio vomitar en el baño.

La rubia tenía unas grandes ojeras por la falta de sueño y el estrés y se veía extremadamente cansada.

—Betty, ¿Que tienes?— Le preguntó Verónica, acercándose y acariciándole la espalda.

—Nada, nada— Negó cuando dejó de vomitar, poniéndose de pie y dirigiéndose al lavamanos para lavarse la cara. —Estrés, creo—

Verónica la miró, alzando una ceja. —Eso decía yo cuando me enteré de que estaba embarazada—

Betty la miró, pero solo empezó a reír a carcajadas, asustando a su mejor amiga. —Por favor... estoy soltera V. Además... ¿Cuando fue la última vez que tuve sexo con el padre de mi hija? ¿Hace... tres meses?—

—Pero yo no dije nada— Se defendió Verónica. —¿Pero se cuidaron cuando lo hicieron aquella vez?—

—Claro. Además, no hay nada a lo que le tema más que a quedar embarazada otra vez. Por eso usamos condón— Aseguró la rubia, saliendo del baño.

—Lo que todavía no entiendo es por que tú y Jughead aún no se juntan otra vez. ¿Por qué están separados? Eso no tiene sentido si ustedes se aman— Opinó Verónica, siguiendo a su amiga hasta la sala.

Betty la miró, soltando un suspiro. —Simplemente pienso que nos estamos llevando mejor así, separados. Si volvemos a estar juntos van a volver las peleas y no quiero lastimar a mi hija—

Verónica asintió, algo desconcertada. —Entiendo.

—En fin... es temprano. ¿Quieres un poco de té?— Propuso la ojiverde.

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Por otra parte, Jughead estaba junto a Reggie en el parque. Archie estaba con ellos, pero se había ido a buscar a Verónica hace rato.

Esos dos estaban a cargo de sus hijas toda la tarde y las veían jugar, sentados en un banco. No había nada que disfrutaran más que ver a sus hijas siendo felices.

—No quiero que siga creciendo— Se quejó Reggie, mirando a su pequeña con orgullo.

—Tampoco yo, amigo— Aseguró Jughead, soltando un suspiro.

—¿Que hay de Betty? ¿Por que diablos no se juntan otra vez?— Preguntó Reggie, mirándolo.

—Es complicado. Yo incluso quería darle un hermanito a mi hija, pero creo que Betty y yo estamos bien así— Contestó, mirando a su amigo.

—Pero no seas tonto. Vuelve con tu chica, hazle otro hijo y ya. Problema resuelto— Aconsejó Reggie. —Hacer bebés no es muy difícil—

Jughead soltó una pequeña risa. —No es tan fácil como tú crees—

—Papi— Habló Annie, acercándose a Reggie con los ojitos cansados. —Sueño—

—Tío— Le habló Mía, acercándose. —Annie ya tiene sueño—

—Muy bien, regresemos a casa con mamá y vas a descansar— Dijo Reggie, tomando a su pequeña en brazos y poniéndose de pie. —Hasta mañana niña hermosa. Tu también ve a casa a dormir. Hasta mañana viejo— Se despidió de Jughead.

—Hasta mañana amigo— Se despidió también Jughead y tomó la mano de su hija. —¿Y tu tienes sueño pequeña?—

Mía negó. —No tengo sueño—

Pero solo hicieron entrar al auto para que la niña cayera en un sueño profundo. Jughead la miró por el espejo retrovisor, sonrió y empezó a conducir a casa para dejar a Mía con Betty.

Condujo hasta la casa, estacionó el auto y tomó a su hija dormida en sus brazos para luego ir y tocar la puerta principal para que Betty le abriera.

Pero la rubia no le abrió. Nadie le respondía.

Amo dejarlas en suspenso 👀 perdón 😭

Samy ❤️