Perdido

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______ pensó en irse de allí y buscar la biblioteca por su cuenta, no creía poder soportar eso mucho más, pero debía hacerlo, quería leer libros. Intentó respirar hondo y muy lentamente abrió la boca.

—Oye tú.

Casi le dio un infarto. Pegó un mini salto y abrió los ojos tanto que parecía el único rasgo que había en su cara.

—¿Qué se supone que haces con mi novia?

—.....

Todavía sorprendido no pudo decir nada.
La chica miró al hombre que acababa de llegar.

—Cariño... —luego miró a ______ y se dio cuenta de que él también estaba temblando. —No me ha hecho... ¿Nada?

______ se giró, la chica tenía una voz muy dulce, era bajita y de aspecto asustadizo. Se dio cuenta en ese preciso momento de que había asustado a esa chica con su comportamiento y se sintió un poco mal.

—La blibi- —se trabó. Lo que le causó mucha vergüenza y se tiñó de rojo toda su cara. —La, la biblioteca. —habló mucho más lento para no trabarse de nuevo.

La pareja le miró. En realidad, mucha gente estaba mirando. ¿Desde cuándo había tantas personas observando? Eso lo hizo sentir mucho peor. No fue capaz de terminar su frase, estaba muy nervioso, nunca antes le había mirado tanta gente a la vez. Tembló mucho más fuerte. La chica, que también era tímida creyó entenderlo y le preguntó directamente.

—Eem, puede ser... ¿Quieres saber dónde está la biblioteca?

A ______ se le escapó un pequeña lágrima en uno de sus ojos a causa de los nervios, y como no pudo decir nada solo infló un poco las mejillas por vergüenza y asintió emitiendo un pequeño ruido de garganta.
La situación se hizo un tanto adorable para algunas personas que miraban, la chica que entendió la vergüenza de ______, se compadeció de él porque entendía esos nervios, así que le explicó amablemente como ir allí. Su novio solo la miraba sin terminar de entender la situación.

______ no dijo nada más, solo escuchó atentamente las indicaciones de la chica y se marchó en cuanto pudo.
Cuando se había alejado lo suficiente respiró muy hondamente. Su corazón ya se había tranquilizado y él también. Se prometió no volver a intentar hablar con nadie más. Pensó en las indicaciones de la chica.

"Cuando llegues después de la intersección de la calle Tsunam a la tienda de ropa 'Sakurako' tendrás que girar a la derecha y...."

Se dirigió a retomar su camino hacia la biblioteca, más determinado al saber el camino. Se detuvo después de dar unos pasos.

"Bien, ahora... ¿Donde está la calle Tsunam?"

Volvió a temblar. No tenía ni idea de a dónde ir, se le olvidó que desconocía el nombre de las calles, más bien, desconocía todo el vecindario. No sabía nada de nada, como no hubiera alguien que le guiara, no sabría qué hacer.

No volvería a hablar con nadie, de todas formas no entendería nada y no sería capaz de explicarlo.

Caminó unos pocos minutos sin rumbo, intentando leer el nombre de las calles, hasta que vio un gran túmulo de gente que parecía feliz y emocionada, le ganó la curiosidad así que se acercó a mirar qué pasaba.

Gran error.

Se arrepintió inmediatamente de esa decisión. Nunca debería haberse acercado.
Era pequeño, así que pasar entre la gente le resultó fácil, hubo un momento en el que le preocupó ser aplastado pero daba igual, ya era aplastado muchas veces en su vida, un poco más no le daría muchos problemas.
Antes de sacar su cabeza para mirar escuchó una voz alegre. Tardó unos segundos en reconocerla y ojalá lo hubiera hecho antes, ¿qué otra voz podía conocer él?

Sacó la cabeza y se encontró con él, el hombre pájaro que vio la última vez. Abrió los ojos con sorpresa. La luz parecía darle directamente y él tenía una sonrisa espléndida en su cara. Sus alas rojas reflejaban un poco esa luz.

Quedó maravillado, otra vez.

Sus ojos no habían conectado, Hawks no se había dado cuenta de que él estaba allí. Reaccionó de su corto embobamiento, que se le hizo largo, y se fue de allí lo más rápido que pudo sin echar a correr, su cuerpo no daba para más.

Caminó unos pocos minutos, cuando estuvo lo suficientemente lejos, se relajó. Nunca pensó que lo vería de nuevo, antes de salir tal vez se esperó verle, pero no creía que pasaría de verdad.
Por suerte, él no le había visto.

Cayó una pluma delante de él. Roja.

Bueno, al menos creyó que no le había visto.

—¿A dónde vas con tantas prisas?

.

.

.

[(Holaaaa, traigo otro capítulo maaaas. Gracias por leerlo, espero que os haya gustado.
¡¡Voy a decir (escribir) algo importante!!
Más bien es una duda que me ha surgido, veréis, me he dado cuenta de que esto se está haciendo más largo de lo que tenía pensado, mucho más, y temo que la historia llegue a tener un montón de capítulos, (tal vez unos 80-90), y pienso que a lo mejor es demasiado, sin embargo tal vez os guste que sean tantos capítulos, pero no estoy segura. Es que mis capítulos no son demasiado largos, más bien son cortitos, así que pensé en hacer un cambio, pensé en hacer los capítulos más largos para que no sean tantos pero tardaría más tiempo en actualizar, no obstante, no sé qué es lo que preferiríais así que lo pregunto directamente, ¿preferís que haga los capítulos cortos como hasta ahora (que serían actualizados cada 1-2 días) o que los haga más largos (que actualizaría cada 4-5 días)??)]
No estoy segura de qué hacer así que agradecería que opinárais. Muchas gracias.





Gemas [Hawks x Male reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora