Familia Hanaki 2

274 41 13
                                    

Haru salió de la cafetería y se fue a comer a un sitio de comida rápida.
Comió y se pasó el resto del día pensando en las palabras de su amigo. Le daba un poco de vergüenza lo que le dijo, pero le sorprendió que le dijera la razón por la que todos le seguían. Él pensaba que era por sus chistes pero resulta que no...

"Mis chistes no son una mierda, son fabulosos."

Repitió para sí mismo.

Sus chistes eran una mierda, pero mientras él creyera que no, todos se lo dejaban estar, porque su carcajada era increíblemente contagiosa.

______ heredó una extraña carcajada también, probablemente por culpa de Haru, que también se reía como foca retrasada. Ambos tenían risas peculiares, pero de esas que se contagian enseguida, por eso en sus casas nunca hubo un día malo, siempre terminaban con risas gracias a sus formas de reír.

Cuando se fue acercando la noche, se pasó por una floristería y compró un ramo de Camelias.
Eran las flores favoritas de Hana, muchas noches entraba en la habitación del hospital para reponer las viejas por las nuevas, lo hacía para que ella no lo viera.

Oh, pero ella lo sabía, ella siempre lo supo, cuando sus flores se empezaban a poner marchitas ella siempre esperaba despierta, haciéndose la dormida solo para escuchar las palabras que su dulce esposo le decía en susurros, con cuidado para no despertarla.

Le contaba sus dudas, sus miedos...

Pero siempre, siempre, le decía lo mucho que la quería. Y lo mucho que quería a Yuki.
También lo mucho que se arrepentía por no poder hacer nada más.

Qué tonto.

Si ella no volvió a intentar hacerse daño y su condición mejoró al poco tiempo fue precisamente por las visitas nocturnas de su estúpido marido.
Pero ella era terca así que no lo diría.

Cuando ya se hizo muy tarde, él se dirigió hacia el hospital y entró en la habitación de Hana.

Cuando miró al frente se encontró con algo que no esperaba ver; a Hana y a Yuki sentados en el suelo abrazándose mientras lloraban.
No supo ni lo que pasaba ni cómo reaccionar, pero la imagen que tenía delante suyo lo hizo sentirse aliviado.

Se acercó a ellos, escondiendo las flores, y los abrazó también.
Se sorprendieron un poco pero al saber quién era, apretaron aún más el abrazo.

Haru lo sabía, probablemente habían hablado de ______. Se le escapó una lágrima.

Esa noche todos estaban muy sensibles.

Pero esa noche todos sintieron un gran alivio.

Y la familia Hanaki habló durante horas sobre ______ Hanaki, sus aventuras, sus anécdotas, sus gustos, sus momentos juntos...

Esa noche, la familia se volvió a unir de nuevo, fueron sinceros y lloraron juntos.

Y esta vez, no volverían a distanciarse, porque todos se querían más que nada, solo necesitaban un ligero empujón.

.

.

.

















Gemas [Hawks x Male reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora