Familia Hanaki, Yuki

386 52 15
                                    

Apenas habían pasado unas horas desde que Yuki se había despedido de Hawks tras haber investigado la sala secreta. Más de cinco años era el tiempo que le había dedicado a luchar por la búsqueda de su hermano, durante todos esos años hizo cosas que nunca pensó que haría, durante todo ese tiempo solo tenía una cosa en mente: encontrar a su adorado hermano.

***

Hanaki Yuki tan solo tenía tres años cuando recibió la noticia de que iba a tener un hermanito, al principio no lo entendió muy bien y se asustó pero desde el momento en el que por primera vez vio la carita redondita y los mofletes rosados de ese pequeño y frágil bebé que sería su hermano, sintió que algo se movía muy dentro de él. En ese entonces no supo identificar el qué, todavía era muy pequeño para hacerlo.

Desde el primer día en el que le vio, Yuki permaneció a su lado, ayudándole a hablar, a limpiarse, a caminar... Su madre bromeaba con él diciéndole que era mejor padre que el de verdad, haciendo que su padre se ofendiera, Yuki entonces se reiría y todos terminarían riendo.

Desde entonces, Yuki no se separó de su hermano, crecieron literalmente juntos, uno al lado del otro.
Conforme iban creciendo, Yuki se daba cuenta de muchas cosas.

Su hermanito era lo mejor del mundo.

Su hermanito era adorable, más adorable que nadie, era amable con todo el mundo, era divertido, dulce, alegre... Y tenía la sonrisa más bonita que había visto jamás, adoraba su carcajada, cuando su hermano se reía era como escuchar la mezcla entre una hiena y una bruja, era una risa desquiciada, rara y graciosa, tenía una risa muy contagiosa, cuando él reía, que lo hacía mucho, toda la familia terminaba riendo también, sin poder evitar no contagiarse de esa carcajada tan extraña y extravagante.

Su casa siempre era alegre y llena de luz y calidez gracias a su querido hermano. Por supuesto, él tenía más amigos, pero nadie era como su hermanito.
Él podía parecer increíble, pero también era despistado, algo torpe y un llorón. A Yuki le gustaba mucho molestarle, sus reacciones siempre eran muy graciosas, ya que ______ se ponía nervioso con cosas pequeñas y Yuki siempre aprovechaba eso.

Le encantaba ver a su hermano haciendo pucheros, le encantaba ver a su hermano siendo travieso, le encantaba ver a su hermano riendo con su loca carcajada.

Le encantaba su hermano pequeño.

Los días eran más felices cuando estaba con él. Aunque se peleaban siempre, Yuki le quería muchisimo. Más que a nada. Y aunque siempre, siempre se pelearan, (sobre todo por lo pesado que era Yuki en molestar a su hermano), los dos estaban siempre juntos.

Además, su hermano era alguien tímido, no tenía amigos a parte de él, y como buen hermano protector que era, debía estar a su lado constantemente y hacerle feliz.

Ese era Hanaki Yuki, un hermano mayor que adoraba a su hermano menor.

***

Yuki despertó en medio de la noche, en un banco en un parque cualquiera. Había vuelto a tener un sueño del pasado, su querido hermano se había enfadado con él otra vez por haberle molestado.

Se ve que se había quedado dormido mientras miraba las estrellas, nunca las entendió ya que se dormía en las explicaciones de su apasionado hermano sobre éstas, pero desde que ______ desapareció, cuando estaba triste tenía la manía de mirar hacia las estrellas que él tanto amaba, intentando recordar alguna parte de la explicación.
Nah, para qué mentir, la explicación le daba completamente igual, siempre lo hizo, lo que intentaba recordar era ver la amplia sonrisa de su hermano junto con el brillo en sus ojos que reflejaba el firmamento cuando explicaba, tan feliz, lo que había descubierto del cielo en sus libros.

Sólo quería recordar eso cuando miraba el cielo, y así se quedó como un hábito, uno que de alguna manera dolía más que otra cosa pero le hacía sentir bien al mismo tiempo, qué sentimiento tan contradictorio...

.

.

.


















Gemas [Hawks x Male reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora